Ocho meses después.
—Amor, despierta.— Joel movió con suavidad a Erick.
—¿Mmmh?— hizo ese extraño sonido aun sin abrir los ojos y sin moverse un solo centímetro.
—Despierta, es tu turno.— Joel lo volvió a mover.
—Si, si, ya voy.— Erick se destapo con cuidado de no destapar también a Joel. Bostezo y se tallo los ojos, voltio a verlo y antes de salir de la cama depósito un casto beso en sus labios.
Joel miro su hora en el celular, eran las tres de la madrugada pero el sonido de unos débiles llantos lo habían despertó, pero hoy era el turno de Erick así que podía seguir acostado. Se turnaban los dias en que tenían que pararce durante las noches, aunque en realidad a ninguno de los dos les molestaba hacerlo, mas bien amaban esta nueva faceta como padres.
Se estaba quedando de nuevo dormido pero unos pasos acercándose lo hicieron abrir los ojos y vio a Erick entrando de nuevo por la puerta de su habitación.
—Mira quien vino a visitar a su papí.— dijo Erick mientras acercaba a la pequeña bebé a Joel.
Joel la tomo entre sus brazos, y sonrió al verla.
—Te he dicho que no es bueno que la traigas a la cama, la conscientes mucho.— reprocho Joel pero la enorme sonrisa en su rostro decía lo contrario, no se podía enojar con Erick, amaba este tipo de momentos.
—Es que me miro con esos ojitos.— acaricio la mejilla de la bebé con delicadeza.— Y supe que quería que la trajera con su papi Joel.
—¿Es verdad Lucía? ¿Querías venir conmigo, mi amor?
La pequeña Lucía balbuceó algo intendible pero que causo la risa de sus dos papás.
Erick ya se iba a acostar de nuevo cuando otro llanto lo interrumpió, hizo una mueca y se volvió a poner de pie.
Joel rió al ver la cara de Erick.
—Ni modo mi amor. Traelo para que así podamos dormir los cuatro.— dijo Joel mientras acostaba a Lucia en la cama.
Erick asintió y salio de la habitación. Joel se estiro un poco para tomar una mamila y un bote de leche para prepararsela a la bebé.
Cuando Joel tomo de nuevo a Lucía entre sus brazos, Erick entre otra vez con otro pequeño bultito cargando.
—Lucas pesa mas que Lucia, sera un hombre grande y fuerte, pero eso es genial por que así podrá defender a nuestra princesita.— dijo Erick en cuanto se acostó en la cama.
Hace dos meses cuando les hablaron del hospital diciéndoles que el bebé ya iba a nacer, jamas les paso por la cabeza que iban a regresar a su hogar no con uno si no con dos bebés. Resulta que uno de ellos se había escondido y no se dejaba ver en los ultrasonidos, por eso nadie sabia que eran dos los bebés que estaban esperando, pero sin duda alguna los recibieron todos con mucho amor y muy felices.
Los bebés eran completamente idénticos, la única diferencia era que Lucia tenia su cabello mas largo y un poco mas castaño, pero los dos tenían unos lindos ojos verdes, con pestañas sumamente largas, aun mas que las de Joel, ambos tenían pequeños rulitos en su cabeza, su piel era color canela, al igual que la de sus papás. Sin duda alguna son idénticos a Joel y a Erick, todo el mundo lo decía y era verdad. Son los bebés mas lindos del mundo, simplemente perfectos.
—Pobre de esta princesa. Tendrá muchos hombres cuidándola.— dijo Joel.
—Eso es bueno, así no tendrá novios.
—Amor, solo tiene dos meses aun no piensa en eso.
—Bueno, mas vale prevenir. Y tú la cuidaras, ¿verdad Lucas?— le pregunto a su pequeño bebé.
Joel rió, sin duda Erick seria muy celoso con su pequeña Lucía.
—Son tan hermosos.
—Lo sé, se parecen mas a ti que a mi, solo sacaron mis ojos.— dijo Erick mientras hacia un puchero con sus labios que Joel rápidamente atrapo con sus labios uniéndolos en un delicado beso.
—Ven acá.— Joel acomodo en su pecho a los bebés que ya estaban a nada de volver a dormirse y señalo su hombro para que Erick recargara ahí su cabeza.
Una de las manos de Joel estaba debajo del cuerpo de Erick pegándolo mas a ellos, mientras que con la otra mano sostenía a sus bebés. Y Erick con un brazo abrazaba a sus tres amores.
Joel comenzó a tararear una canción de cuna haciendo que los bebés quedaran completamente dormidos, mientras sus pequeños pechitos subían y bajaban tranquilamente.
—Son tan pequeños.— comento Erick en un susurro mientras veía y acariciaba sus pequeñas caritas.
—Lo se, son tan pequeños que los tres caben en mi pecho.— contesto Joel en tono de burla.
—¡Oye!— se quejo Erick.
Joel acaricio la espalda de Erick con su mano.
—Sabes que los tres son mis bebés.
—Lo se. Pero no soy pequeño.— dijo Erick intentando sonar molesto.
—Amor, soy mas alto que tú por una cabeza y media.— sonrió burlón.
—Bueno, pero soy mas maduro que tú.
—Si claro, amor, lo que digas.
—Pero yo...— iba a seguir hablando Erick pero Joel lo interrumpió.
—¿Por qué no mejor te callas y me besas?— pregunto Joel.
Erick se giro un poco y beso tiernamente a Joel.
—¿Quieres que los lleve de regreso a su cuarto?
—Por un dia que se duerman con nosotros no pasa nada.— contesto Joel.
—Si, pero te recuerdo que duermen con nosotros casi diario.— Erick volvió a acomodar su cabeza en el pecho de Joel.
—Bueno, ¿a quién le importa?— Joel se acurrucó mas entre las cobijas y abrazo mas a los tres.— Te amo Erick, los amo, ¿lo sabes, verdad?
—Claro que lo se mi amor, yo también los amo mucho a los tres, son lo mejor que tengo en la vida.— Erick dejo un pequeño beso en el pecho de Joel.
—Tambien son todo para mi, son mas de lo que hubiese pensado alguna vez.
—Te amamos Joey.
—Te amamos Er.
Ambos comenzaron a quedarse dormidos de nuevo junto con sus bebés.
Y por fin habían logrado lo que mas querían en la vida, su pequeña pero hermosa familia, estaban los cuatro juntos, en su hogar y ahora si nada se interpondría entre ellos.
Les dejo este edit, para que se den una idea de como se ven con sus gemelitos. :)
Escogí los nombres que propuso elisa15v por que ame el significado. Lucía: Aquella que nace de la luz. Lucas: El que ilumina. Gracias Eli ❤
Lxs amo💙