Especial KI

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HOLA!

pues aquí les traigo el penúltimo especial, espero les guste.

no tengo mucho tiempo, pero muchas gracias con sus comentarios, después de publicar comenzare a contestarles los comentarios pasados.

aquí el especial.



Especial KI

Toda su vida había vivido bajo la sombra de su padre, no es que se quejara, después de todo tenía a sus dos padres con él, y era lo suficientemente grande para saber que su madre era solo una amante ya que su padre estaba casado con otra Omega con la que había tenido un cachorro dentro del matrimonio.

Tampoco era ignorante y sabía que su padre era jefe de la mafia roja, ¿qué si le tenía miedo? No, claro que no, sólo que simplemente no le daba importancia. Su padre era amable con ellos y siempre buscaba su bienestar a pesar de tener encima todas las miradas de los demás jefes.

—Kakashi.

Salió de su escondite y miró a su padre cargando un bebé en sus brazos y supo que era su hermano al verle el pelo, luego su padre se lo cedió y él lo agarró mirándolo de cerca. Tampoco sentía mucho por su hermano, ¿envidia? ¿Cariño? No, nada...

Él era un niño muy serio y con pocos sentimientos, y, aunque no sabía muy bien porque era así, le gustaba su soledad y era muy fiel. Era una personita muy fuerte.

Se sentó en el suelo con su hermano y comenzó a jugar con él, mirando la vitalidad del bebé, que gateaba siguiéndolo. A lo lejos, pudo escuchar la discusión de su mamá con su padre y prefirió centrarse en él bebe, eso era algo que no le gustaba para nada, el hecho de escuchar a su padre levantándole la voz a su madre, eran pocas las veces que pasaba, pero cuando pasaba no le gustaba nada. Él quería dejar bien claro que su madre merecía respeto.

—A ver, ¿cómo te llamas niño?

—Se llama Hidan —dijo su padre saliendo con una marca en su mejilla que parecía ser un golpe, él miró acusadoramente a Sakumo y este se acercó en busca de Hidan—. Nos vemos después —fue lo último que dijo y luego se fue, así como si nada.

Se levantó del suelo y buscó a su mamá, que lloraba histérica sobándose la mano, entonces Kakashi comprendió que su madre le había pegado a Sakumo, no dijo nada y se acercó abrazándola, a veces las personas no necesitan palabras, algunas ocasiones necesitan más bien, un abrazo.

No sería sino hasta más adelante, que entendería porque su madre le había pegado a su padre ese día, años atrás.

Aleshka, ese era el nombre que su mamá temía tanto, era el nombre de la mujer de su padre, una Omega de temer que había sido cegada por los celos hasta un punto sin retorno, después de todo no era fácil ver que Sakumo tenía dos familias.

La esposa de su padre, envidiosa y venenosa, había amenazado a su madre para que se alejara de la vida de Sakumo, y este, había llevado a Hidan a la casa, cosa de lo que la mujer de Sakumo no estuvo nada feliz y por la que seguro le haría pagar, por eso la discusión que habían tenido.

A sus 16 años, la vida de su mamá llegó a su fin tan repentinamente, que Kakashi se llenó de mucho dolor. De inmediato fue a vivir con Sakumo, situación que a Aleshka no le gustó nada, mientras que él, se recluyo a sí mismo, alejándose de todos, al final de cuentas, su madre había sido su fuerza durante todos esos años y la incertidumbre de su muerte no lo dejaba tranquilo, ¿cómo era posible que muriese en un accidente de tránsito? Ya lo había comentado antes, él, no era tonto. Su mamá no manejaba ningún carro, así que eso era imposible, por lo que varias preguntas comenzaron a formularse en su cabeza.

Jeho divoké oči  -Omegaverse-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora