další

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hola... pues SORPRESA!!!!

espero que les guste esto, se que se los debía, así que me tome el tiempo de escribirlo y presentárselo, gracias por todo el apoyo que recibió esta historia, me alegra mucho el corazón.

sin mas aquí el extra.



Extra

—¿Estás bien?

—Sólo un momento...

El pelirrojo se hizo para atrás dejando sola a su pareja de vida, quien contemplaba la lápida que se había puesto recientemente en el lugar, miró a su hijo a lo lejos y trató de sonreír, pero no pudo, entonces fue hacia él y le acarició la cara mientras el joven Alfa trataba de contener un gruñido.

—No hagas eso —regañó débilmente.

—¿Qué hace llorando a ese hombre? —dijo un poco brusco—. Él te ama a ti ¿o no?

—Es complicado —dijo sin fuerzas—. Quizás nunca fui lo necesario para él, de hecho, no creo que lloré mi muerte como lo hizo con él.

El Alfa lo miró con enojo e intentó controlarse.

—No es justo que tú estés así, ¡papá no sabe lo que hace!

—Deidara lo amaba, respeta eso tal como yo lo hago. Ahora, vámonos.

Su hijo se volteó y comenzó a caminar lejos de ahí mientras Sasori miraba por última vez a su pareja.

Deidara se veía desolado llorando contra la tumba de Itachi...

Sí... porque Itachi estaba muerto y la noticia le había golpeado fuertemente, pero ciertamente de los dos, él que sufrió más fue el Omega rubio, apenas pudo dormir esa noche por consolar las lágrimas del rubio, y fue en ese momento en el que se dio cuenta de que todo este tiempo que pensó que se amaban no fue real. Quizás nunca debieron intentar tener una relación en la que ambos saldrían perdiendo, era difícil estar sin un Alfa, pero Sasori pensó que lo habían hecho perfecto durante este largo tiempo

Subió al asiento del copiloto de su auto y esperó paciente junto a su hijo que el rubio llegara y se subiera al auto, habían viajado un largo rato hasta ese lugar y sólo quería volver a su casa para poder descansar. Prefirieron no presentarse el día del entierro por temor a ser reconocidos, después de todo habían comenzado una nueva vida lejos de la ciudad, en donde Sasori era un famoso enfermero y Deidara daba lo mejor de sí siendo mesero.

La vida los trataba bien, su hijo iba a visitarlos de vez en cuando y la soledad la llenaban entre ellos dos, pero ahora se sentía más vacío que nunca, darse cuenta de la dura realidad nunca es fácil.

Vio a su hijo mirando el reloj y suspiró.

—¿Por qué papá se tarda tanto?

—...

Y su hijo comprendió, Sasori lo miró de reojo y se recostó en su hombro sintiendo como le acariciaba el cabello, por lo que tragó grueso.

—Gracias por aceptarnos, nunca te lo dije —dijo el Omega.

—Los amo a ambos, no importa nada. Ambos son mis papás.

Sasori supo qué tan difícil fue la adolescencia de su hijo al saber qué tenía dos papás Omegas, no era común y nunca lo sería, pero habían sido fuertes y habían salido adelante como la familia que eran, porque a ese cachorro nunca le faltó amor. Deidara y él intentaron dar siempre lo mejor de sí mismos para que su cría creciera con amor y valores. Para que nunca fuera como ellos habían sido...

Jeho divoké oči  -Omegaverse-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora