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¿Quién no tenía música en su celular? Al menos una canción o un audio, Joshua apenas tenía una alarma que sonaba a las 5:50 de la mañana, al menos tenia un juego bastante adictivo que Jun no pudo jugar más porque se le agotaron las vidas y los anuncios saltaban cada cinco segundos. No esperaba ver los mensajes, ya habían sido borrados, y los teléfonos registrados solo eran; Mingyu, mamá. Y la madre hablaba inglés, lo descifro por las cadenas enviadas por ella que su hijo, el muy desgraciado, reenviaba a Mingyu. Incluso a él desagradándole Mingyu no lo haría.

Pero eso no era interesante, sabia que no conseguiría nada en los mensajes, a menos no hasta buscar algo a fondo, pero se concentró en otro tipo de cosas.

Quien diría que Hong Joshua tuvo una pareja tan apuesta. Una vieja fotografía porque ciertamente Joshua parecía más joven... y porque el celular asi lo dictaba, pero en la basta galería que solo constaba de dos fotografías y una había sido tomada por accidente, la encontró. Una linda pareja, sin duda ¿el chico seguiría con él? Quién sabe.

El celular vibró en su mano y dio un pequeño brinco al estar distraído, era un número desconocido. Observó su espejo retrovisor por costumbre, y respondió, colgaron de inmediato cuando él ya tenía una buena frase pensada en su cabeza.

Tomó su celular y buscó entre sus contactos el numero de Wonwoo mandándole un cariñoso mensaje, pidiéndole un importante favor. Queria saber quien era la pareja de Joshua, aunque en verdad suponía que era su pareja, podría estar equivocado. 

Dog collar. [Seventeen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora