La 3er temporada de tu serie favorita pero mucho más jugada. Porque la adolescencia tiene muchas más peleas, besos y otras cuestiones del amor que Disney no muestra. Te invito a que disfrutes de lo que pudó ser y no fue.
Un Lutteo menos conflicti...
El plan era sencillo en apariencia. Pero como todo plan para tener exito se tiene que dar un montón de acontecimientos. Porque si uno no se da, el plan ya deja de ser plan y se transforma en una improvisación. Luna bailaría con todos los invitados en el baile presentación. Benicio cuando pudiera encontrar un momento, saldría de su escondite bailaría un poco y luego la besaría para que Matteo la viera. Era importante que Luna no lo reconociera para que no sospechara de que era una trampa y no tuviera alguien que pueda explicarles a todos como fueron las cosas. Ambar estaría junto a ella. Primero para evitar que intente sacarle la mascara a Benicio y para facilitarle la huida con el fin de proteger su identidad. Matteo al ver el beso saldría corriendo. Ahí es donde participa Emilia, quien dejaría en evidencia la huida de Matteo chocando nuevamente con él y volcandole comida o bebida. Matteo humillado se iría y Emilia correría detras, para acercarsele y tratar de entablar un contacto. Ambar nuevamente le pondría fichas a Luna de que Matteo se fue con su amiga Emilia, la que besara en la fiesta de los Red Shark. Y también frenaría cualquier posible intento de Luna para acercarse a Matteo. Pero el plan ya presentaba un improvisto. Ámbar no estaba. ____________________________________________________________________________ PARTE 6
Luna estaba en el medio. Divina de blanco. Muchos jovenes la miraban esperanzados de ser el primero en bailar con ella. Otros simplemente eran amigos que estaban ahí.
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Estaba nerviosa, era de noche, no veía mucho y a la distancia que estaban de ella le costaba distinguir caras. Lo busca a Simón, no lo encuentra. Intenta distinguir aunque sea el antifaz azul, ahí esta lo encontró. Empieza a levantar su mano para señalarlo, y se da cuenta que olvidó sacarse el anillo que le regaló Matteo. ¡Que horror! Claramente es ridiculo ese anillo acompañando el atuendo que tiene puesto. Pero eso poco importa, porque el anillo brilla, brilla otra vez. Como en Cancun, como en las noches que no logra conciliar el sueño. ¿Que hacer? ¡No! se dice Luna, no podes bailar con Simón sabiendo que Matteo está en algun rincón de esta fiesta o de donde sea pensando en vos. Continúa dando vueltas, buscándolo. Pero al amor por mas oscuridad, por mas antifaces, por mas poca visión que uno tenga, se lo reconoce. Se lo reconoce por instinto. Y lo ve, estaba ahí, mas fresa que nunca. Irresistiblemente encantador. Mirandola, sonriendole. Era rojo, con todo lo que representa ese color. Y así como esas cosas magicas que tiene el amor, ella que no ve nada, logra leerle los labios que le dicen "Elegime a mi".
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