Nightstar

Capítulo 20: Una última oportunidad

Damian

Después de la pelea de la fiesta, decidimos que lo mejor sería irnos a la casa. Bruce nos llamó a mí, Tim, Alfred, Barbara y Jason a la Baticueva.

-Lo creas o no, Damian, tomé tu palabra respecto a la secta que seguía a Mar'i. Resulta que en efecto, la secta estaba activa, como tú me dijiste. Por eso es que teníamos ya un plan de contingencia en caso de necesidad. No estoy completamente seguro de cómo supiste que estaban activos de nuevo, pero tenías razón-Dijo mi padre.

-¿Cuál es tu plan?-Preguntó Jason.

-No quiero hacer movimientos bruscos por ahora. Tampoco puedo mover a Mar'i de lugar bajo riesgo de que la sigan. Es mejor tenerla cerca porque de esa manera es más sencillo mantenerla segura-Dijo mi padre.

-¿Quieres que nosotros hagamos algo?-Preguntó Tim.

-Sí. Barbara, necesito que tú te encargues de seguir y rastrear a los robots. Jay, Tim, necesito que ustedes revisen todo el perímetro de la casa. No quiero que haya nadie indeseado rondando la zona. Y Damian-Me miró fijamente-quiero que tú te encargues de seguir a Mar'i a donde sea. Como te dije, quiero que seas su sombra si es necesario. No quiero correr ningún tipo de riesgos.

En cualquier otro momento yo me hubiera negado, pero después de darme cuenta de la situación decidí que yo era la persona más capacitada para mantener a Mar'i a salvo.

-Damian, cariño, sube a ver a Mar'i y asegúrate de que se encuentre bien-Me pidió Barbara mientras me ponía una mano en el hombro. Asentí y subí las escaleras en dirección al cuarto de Mar'i.

Toqué la puerta y me indicó que pasara. Ella estaba sentada en su cama, aún usando el vestido de fiesta rojo, sólo que estaba algo dañado por la huida frenética. Miraba fijamente la foto que le había regalado de cumpleaños con un gesto triste.

-Mar'i, ¿estás bien?-Pregunté mientras cruzaba la puerta de su cuarto.

-Sí, estoy bien. No me lastimaron. Estoy sana y salva-Dijo ella sin mirarme.

-No me refería solamente al ataque.

-¿Te refieres a la visita sorpresa de Richard?-Preguntó ella y asentí.

-Es algo tonto, ¿sabes? siempre supuse que cuando viera a Richard Grayson iba a ser uno de los días más felices de mi vida. Pensaba que en cuanto lo viera iba a sentirme feliz. Completa incluso. Sin embargo no fue así-Me dijo con pesar.

-¿Cómo fue?

-No sé cómo explicarte, pero estuvo lejos de ser como yo creí que iba a ser. Cuando lo vi, no pude evitar pensar en todos los años que me dejó sola. Nunca me llamó. Nunca preguntó por mí. Sabía que había cometido un error pero nunca se atrevió a encararlo-Murmuró ella mientras se abrazaba las rodillas.

-No puedo decirte que te entiendo porque nunca he pasado por algo similar, pero...pero si necesitas a alguien con quien hablar quiero que sepas que puedes hablar conmigo-Solté de golpe.

Mi amabilidad con Mar'i no se debía solamente a que me había salvado. El regreso de su padre me había hecho darme cuenta de lo mucho que Mar'i había sufrido en su niñez. Había crecido rodeada de lujos y amor, pero siempre con la esperanza que su padre viniera a verla, y eso era algo que ni con todos los lujos del mundo se podía olvidar. Me había dado cuenta de la fragilidad de aquella chica. E incluso momentos antes, cuando ella y yo bailábamos, algo dentro de mí se encendió. Ella era muy hermosa. Más hermosa de lo que yo hubiera notado jamás. Ella también me había mirado fijamente. Quizá algo se había encendido dentro de los dos.

-¿Hablas en serio?-Preguntó.

-De verdad. Salvaste mi vida, Mar'i, tomando en cuenta que llevo haciendo imposible la tuya desde que era un niño. Es lo mínimo que podría hacer por ti-Le dije.