·Forbidden Love· -4ta Parte-

·Capítulo 46 : Irracional·

<Anastasia>

Apenas está saliendo el sol por el horizonte que mi marido ya nos trajo de vuelta a nuestro piso. Fausto quedó con Owen, ahora pertenece ahí y Christian prometió buscar pronto una ama de llaves. Me da lo mismo, podría hacer que mi chef vuelva pero él prefiere alejarme de mi séquito. 

Hasta Massimiliano quedó por la peligrosa presencia de la esclava, sólo Taylor y los demás guardias del penthouse nos acompañan. Por supuesto nuestro hijo, Athan, está siempre al lado de nosotros. 

Que ahora suelta quejidos de hambre, debe ser la hora de su leche. 

-Descansa, iré al estudio un rato - ignoro sus palabras y me dirijo directo al cuarto. 

No quiero discutir menos con Athan en brazos. 

Como toda madre me las tengo que arreglar y con una mano abrir la manta para recostar a Athan. Tiene un poco de temperatura así que debo tenerlo bien tapado, el doctor Myers dice que cada tanto se enfermará porque es parte del crecimiento. 

Lo acepto pero me alarma porque no sé como reaccionar. 

-¿Eres el bebé de mami? - beso sus cachetes gordos de éste rostro tan suave. 

Lo abrazo con cuidado para que me patalee y me arañe con sus manitos. Es tan enérgico, siempre sonríe y tan apegado a su padre que conmigo ni una sonrisa le puedo sacar. 

-¿Quieres mas a papi que a mami, cierto? - le pregunto pero obvio que no hay respuesta. 

Athan se me que da mirando, y yo hacer una mueca para que ponga otra expresión. Pero al instante empieza a llorar queriendo comer, suspirando me descubro el pecho y me siento en la cama contra el respaldo. 

Lo tomo con ganas de dormir un rato largo pero en horas debo partir para el trabajo. Repito por dentro, sólo esta semana y Owen volverá, ya todo esta preparado, los chicos de mi junta saben y resta firmar el traspaso de poder. 

¿Por qué me siento vacía ya?.

-Te sienta bien ocuparte de Athan .. - ignoro lo que dice y miro fijo a la persona que tanto necesita de mi para vivir. 

-Me sentaría bien que no seas tan duro con Owen .. - sigo hablando sin mirarlo a los ojos. 

-Ana, no pienso discutir contigo acerca de los límites - camina molesto hacia el vestidor y vuelve con el traje que se pondrá hoy. 

-¿A donde irás? - pregunto por el apuro. 

-Estoy alistándome para mi vuelta, te lo he dicho desde hace días pero no prestas atención, sólo te interesaba la vuelta de Owen - reclama y recelosa dejo a Atan recostado y tapado. 

Sigo mirando para todos lados menos para su rostro. 

-¿Por qué piensas que sólo le presto un atención a mi primo? - abro y cierro la boca por no decir algún insulto al aire que pueda herirnos a los dos. 

Vuelvo a sentarme sobre la cama para palmear delicadamente la panza de Athan, así lo arropo antes de salir. 

No sé si lo que hago o digo, sé que esta conversación me confunde. 

-Sólo digo lo que veo, eso es todo - miro por el rabillo del ojo que empieza a desvestirse para meterse dentro del traje que tanto lo caracteriza. 

Pero mi humor no es bueno ni malo, sólo está lleno de histeria por sus palabras. 

-Y ¿quien se quedará con Athan? - pregunto porque de seguro Fausto podría venir pero no podría ocuparse del penthouse. 

-Contigo, eres la madre, deberías empezar a ocuparte de tu hijo - detengo la mano que movía para mirarlo por fin a los ojos.