Capítulo 50.

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Oh, oh, aquí hay una equivocación

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Oh, oh, aquí hay una equivocación.

Pienso.

Sigo observando a Logan y me divierte como está pensando. Sé que no puedo leer sus pensamientos, eso es obvio, pero sé más o menos lo que está pensando y me da risa.

¿Recuerdan aquella vez que pasó lo mismo con Lucas?

Pues, justo eso está sucediendo ahora. Y con mi primo, Fred.

─Si no llego yo, jamás dejan de molestarle. ─Sigue diciendo Fred, su voz delata la diversión que le causa todo esto.

─ ¡Pero miren quien llegó! ─Dice mi padre levantando su copa─ ¡El traidor a la sangre!

No. Esto no puede estar pasando.

Jamás pensé que papá lo compararía como uno de los gemelos y más aún que lo llamara traidor a la sangre. Como los Weasley.

Esto pasa cuando ves Harry Potter con tu papá y tienes un primo llamado Fred y lo peor, que sea pelirrojo.

─Jamás pensé vivir para ver esto ─Dice entre dientes Fred─, ¡Jamás pensé vivir para verte así, César! ─Se dirige a mi padre y sigue─ ¡Mírate, estás tan viejo!

Ahogo un grito en mi garganta al escuchar tal cosa. Fred a partir de ahora se agarrará con mi padre y más que todo, se aprovechará de su estado.

Pero yo, como buena hija, no haré nada al respecto porque esto solo sucede una vez en la vida.

Como dice Fred, jamás pensé vivir para ver esto.

─ ¡Pues...aquí me tienes! ─Dice mi padre comenzando a arrastrar las palabras. Oh Dios, esto es tan irreal─ ¡Ven a la reunión...de...chicosh!

Con eso último siento que no puedo más y comienzo a reírme al igual que todos. ¡Que novedad!

─ ¡La comida ya está lista, pasen a servirse! ─Grita mi tío Arthur.

Oh, como lo olvidé. Soy la primera en acercarme a la parrilla. Cojo un plato y con pasos rápidos me dirijo hasta la mesa donde se encuentran las brochetas. Con una especie de cuchara me sirvo dos brochetas frutales sin introducirlas en el chocolate, observo algo más y veo la carne. Uff, con mucho cuidado me sirvo tres brochetas de carne y voy hacia la salsa. Después me dirijo hacia la abuela y me sirvo todo lo que me ofrece.

Hoy ingiero hasta parecer embarazada.

Auch.

Siempre con la costumbre de bromear con lo malo que me pasa.

A lo lejos observo una mesa y me encamino hacia allá. Me siento y cuando estoy a punto que comer, la voz de Clara me interrumpe.

─ ¿Piensas comer todo eso sola?

FUE POR TI.©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora