Capítulo 03.

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Veo como mamá coloca la mesa y me da una mirada que significa que tengo que ayudarla

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Veo como mamá coloca la mesa y me da una mirada que significa que tengo que ayudarla. A veces no entiendo por qué tiene empleados.

—Mamá, ¿Cuándo llega papá? —pregunto.

—Esta semana, Ada. —Responde.

—Busqué una diseñadora de vestidos de boda, Ada

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—Busqué una diseñadora de vestidos de boda, Ada. —Oh no mamá, no comiences con esa estupidez—, Y me gustaría saber cómo quieres tu vestido.

Veo la cara pálida de Ada, sé que ella quiere casarse conmigo, pero a mí no me importa una boda, no quiero casarme, esa loca idea de mis padres para sellar su negocio me tiene harto. Siento que tengo más para dar y no truncar mi vida casándome.

—Ada contesta a Caroline. —Le regaña su madre.

—Yo...yo no sé, Caroline —se encoge de hombros y mira a Clara en busca de ayuda. Esta, está concentrada en su comida que no la mira en absoluto.

—Bueno no importa Ada, pero ya debes ir pensando. —Dice mi madre con un dejo de advertencia.

Siento que cada vez está más cerca esa maldita boda, mis padres saben que no me interesa casarme, pero insisten y me pone del mal humor. Observo como Ada y Clara se levantan, se despiden de todos. Ada ni me mira, eso es peor, ya sé que hoy me vio con la arrastrada de Carley, pero no entiendo porque se pone así.

Como si no lo supieras. Dice esa voz en mi cabeza.

Una vez que ellas han salido, me levanto y aviso que iré a una fiesta. Mis padres asienten en silencio, pero la cara de los Derzy es de incomodidad y aspereza.

Me vale.

Me sentía tan incómoda en aquella cena, me gusta la idea de casarme, pero me pone mal saber que a Paulho no le interesa

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Me sentía tan incómoda en aquella cena, me gusta la idea de casarme, pero me pone mal saber que a Paulho no le interesa. Manejo hacia la casa de Tom, con Clara y George en el asiento trasero.

—Vayan a un hotel, Clara —les digo de broma.

—No seas grosera, Ada. —Dice Clara.

Cuando por fin llegamos a la casa de Tom, miro la cantidad de autos que están rodeando la casa, empiezo a buscar un lugar donde estacionar. Al final lo encuentro y los tres empezamos a caminar por el patio de la casa.

—Cambia esa cara, Ada —dice mi amiga saltando.

—Ada, Adita, Ada, ya tendrás tu Adito. —Dice George.

Estúpido. Digo en mi mente.

—Cállense par de idiotas. —Reclamo.

— ¡ADA! —Esa voz me descoloca y me tenso de inmediato.

Volteo y me encuentro a Paulho corriendo hacia mí, pero detrás de él está la pelirroja Tania. Es que este imbécil sigue con una y otra. Me adentro con Clara y George a la fiesta rápidamente. Allí hay música que retumba en mis oídos, están los chicos del instituto bailando en el centro de la casa, hay un mini bar y allí es a donde me dirijo, pero Clara me detiene. Las luces me marean y los cuerpos sudorosos se pegan en constante movimiento.

—No dejaré que vayas a la barra. —Dice Clara gritando en mi oído.

—Clara déjame ir, prometo no emborracharme otra vez. —Grito.

— ¡Promiti ni imborrichirmi itri viz! —me imita— Eso dices siempre Ada, no quiero tener un accidente estúpida.

Clara tiene razón, yo no me controlo con el alcohol, no sé porque y peor si estoy mal, ahí sí que no mido las consecuencias.

Después de una hora de tanto bailar, siento mi boca seca, le digo a Clara que iré al baño, pero no es así, me voy directo a la barra.

Pido algún trago de la noche una vez que llego a la barra. El barman me da el trago y me lo tomo de un sorbo. Pido otra copa y cuando el chico me la trae, intento con pesadez levantarme, pero al instante mi cuerpo se estrella con otro y mi copa sale disparada hacia el suelo.

—Oh idiota es que acaso no ve... —Me fijo en la persona y mi cuerpo se congela. El chico es tan guapo que no tengo palabras para decir algo más.

—Realmente lo siento, pero mi primo está borracho y no quiero que haga alguna estupidez. —Dice preocupado el chico de unos increíbles ojos grises.

¿Quién es este Dios sayayin?

—Yo...yo... —Ay no tartamudees Ada, ¡no! — Yo lo siento, no vi hacia donde iba y... ¿quién es tu primo?

-—Es Tom, y lo estoy buscando... —una voz en una de las mesas llama la atención de todos e interrumpe al chico.

—QUERIDOS AMIGOS, BIENVENIDOS A LA MEJOR FIESTA DEL MUNDO —dice Tom elevando su mano en alto en forma de triunfo. Las personas gritan ante tal acto —AHORA QUIERO PRESENTARLES A MI PRIMO DEL ALMA... ¡PRIMO! ¿DÓNDE ESTÁS?

El chico de ojos grises mira con consternación a su primo.

—Creo que te llaman amigo... —me interrumpe.

—Perdón por no presentarme, soy Logan Ford —dice estirando su mano para estrechársela—. Llegue hoy en la tarde porque se me adelantaron los planes y...

—PRIMO ALLÍ ESTAS, ACÉRCATE LO —otra vez Tom lo interrumpe.

No por favor Tom, ahora no, es demasiado guapo, no lo llames. No.

—Soy Ada Derzy, mucho gusto. —Estrecho su mano. De inmediato mi cuerpo se estremece al sentir su contacto.

—El gusto es mío, preciosa. —Dice sin soltar mi mano—. Bueno debo irme, espero volver a verte algún día.

Algún día...

Se retira en busca de Tom que sigue llamándolo, veo como todos prestan atención a Tom y las chicas se quedan en shock al ver a Logan.

Él es mío. Digo en mi mente.

—ÉL ES MI PRIMO DEL ALMA. —Dice Tom y se empieza a reír. Ford aprovecha en bajarlo de la mesa y es gracioso ver a un Tom dormido en la espalda de Ford, este lo lleva arriba y la fiesta continúa...

Me dirijo hacia el baño, una vez dentro voy hacía el espejo y veo mi aspecto, mi maquillaje corrido...

¡Que horrible! ¿Así me vio Logan?

Me arreglo un poco y cuando estoy lista salgo del baño...

Mala idea.

Paulho aparece en mi campo de visión.

FUE POR TI.©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora