Era Sangrienta |Libro 1| #IncesanteDolor

Capítulo 58

Elina

—Es preciosa, Izel —digo sosteniendo a su bebé—. Felicidades.

Ella me observa con una enorme sonrisa en su rostro. Ana, Lena y Sarah acomodaban la habitación y las pertenencias de la nueva integrante de la familia; una preciosa vampiresa.

Sarah... Sabía que se me hacía conocida. Sarah Ginta, una de las gemelas subastadas junto a Ana y mi persona. Ahora es la novia de mi hermano Cody; noticia que nos tomó a todos por sorpresa.

Pero debía admitir que formaban una hermosa pareja, además de que mi hermanito es feliz junto a ella. Se nota a distancia que se quieren.

— ¿Dónde está el cobarde de su padre? —pregunta Lena.

—Aquí está. —Shannon ingresa a la habitación. Arrastra del brazo a Brend, quien mantiene los ojos cerrados. Izel se ruboriza, más de lo que ya está por el parto.

—Abre los ojos ¿Qué no eras el más macho de todos? e burlo. —él abre los ojos para fulminarme con la mirada. Antes de que me lance otro de sus típicos comentarios cargados de humor negro, observa a Izel y, por añadidura, a su hija.

— ¡Mierda! —da un brinco y estrella su hombro contra la pared. Suelto una carcajada al ver su rostro—. Es muy pequeña...

—Nació prematura a causa de la corta edad de Izel, pero estará bien. —explica Lena.

—James... —murmura Izel. Brend se acerca con sigilo y toma asiento a un lado de ellas.

Igualmente, me impresiona saber que mi guarda espaldas se llama James. James Brend.

El nuevo padre sostiene por primera vez a su hija. No por mucho, pues el muy cobarde la devuelve a los brazos de su madre. Me burlo a mis anchas, recibiendo de nuevo una mala mirada de su parte. El vampiro se nota muy nervioso. Aunque no pueda sudar, se nota en su forma de actuar lo impactado que se encuentra al darse cuenta que es padre primerizo.

— ¿Y bien? ¿Qué nombre le pondrán a la pequeña? —insiste Shannon con una sonrisa.

—Madonna Segunda será. —comenta Brend con una sonrisa burlona. Ana, Izel y yo fruncimos el ceño. Es un extraño nombre.

—Ni creas que le pondrás así a tu hija, Brend. —debate Shannon, señalándolo de forma acusatoria.

—No busques una paliza. —amenaza Lena. El aludido levanta sus manos y ríe.

—Bien, que lo escoja Izel.

—Yo... Me gusta Elif. —revela ella.

— ¡Me encanta! —digo emocionada.

—A ti te encanta todo. —asegura Shannon.

—Como el amiguito de Lucian. —era cuestión de tiempo para tener de vuelta al mismo Brend de siempre. Ruedo los ojos, acompañado de un resoplo.

(...)

— ¿Qué pasa afuera? —Izel y yo observamos con el ceño fruncido como un chico intenta dejar atrás a Brend y acercarse a nosotras. Nos encontramos dando un paseo por el parque que se encuentra frente a la mansión.

— ¡Quiero hablar con ella! —insiste el chico. Es humano. Posee cabello castaño y ojos azules.

—Brend, ¿Qué pasa? —pregunto acercándome.

—Elina, lleva a Izel adentro. Este chico tiene mucho de qué hablar. —lo sujeta del cuello de su camisa y lo mira amenazante.

— ¿Izel? ¡No, por favor! ¡Ella es mi hermana! —ambas lo miramos de golpe. Incluso Brend pareció quedar impactado ante la noticia.

— ¿Disculpa? —pregunta ella.

—Por favor, solo escúchame —relamió sus labios—. Soy sobrino de Nora Martini. Ella nunca te habló de mí por diversos motivos

—Yo no... Esto es imposible. Mi tía Nora me dijo que era hija única —comentó mi amiga, más para sí misma.

—Nos separaron desde pequeños, Izel. Fui adoptado por vampiros —intentó zafarse del agarre de Brend, pero este no lo permitió—. Hace unos días mi tía fue a visitarme. Me contó toda la verdad y me dijo que vivías aquí. La curiosidad fue más fuerte que yo y decidí venir a buscarte.

—Supongamos que ''te creo'' —Brend agitó sus dedos al decirlo—. Ahora mismo iremos con Garned y se harán una prueba. Si resulta que estás mintiendo, te golpeo, pero si resulta ser cierto, y en realidad eres el hermano de mi mujer, igual te golpeo.