Dark Paradise.

[47]

Al ver a Agust frente a mí entro en evidente pánico.
Él me sonríe con toda la maldad posible que puede demostrar y yo doy un paso hacia atrás con sumo cuidado.

—¿Por qué eres tan tonta? —Agust me toma del cuello y hace presión sobre mí—. Nunca fue tan fácil engañar a alguien.

Comienzo a quejarme por la falta de aire y golpeo insistentemente su brazo con mis manos.
Con facilidad me levanta del suelo poco a poco mientras pataleo y rasguño su mano sobre mi cuello.

Una sombra negra aparece entre nosotros y alcanzo a reconocer el rostro de Yoongi.

Con una mano sujeta el brazo de Agusta logrando zafarme de él y con la otra me lanza hacia la orilla con un gran impulso.
De pronto siento un par de brazos sobre mi cuerpo. Jimin me sujeta justo antes de chocar con la gran piedra que sirve de muro casi en la orilla del lago. De no ser por él, me hubiera dado un gran golpe debido al impulso con el que me había lanzado Yoongi.

—Quédate aquí —me ordena Jimin sin perder detalle de lo que está pasando en medio del lago y se va rápidamente, dejándome lejos de ellos.

Me pongo de pie y observo todo, como una simple e inútil espectadora.

Agust tiene a Yoongi del cuello, mientras que éste lucha desesperado por soltarse.
Jimin envuelve a Agust con sus alas, haciendo así que suelte a Yoongi, pero a los pocos segundos se libera de Jimin y lo manda al suelo.

Escucho un crujido y veo una grieta formarse debajo del cuerpo de Jimin.

—Jimin... no... —Hablo en un murmuro y llevo ambas manos a mi boca.

Una nube de humo negra se forma por debajo de Jimin y traspasa su pecho haciéndolo quejarse del dolor.
Poco a poco la misma nube lo levanta hacia Agust y lo toma del cuello al igual que a Yoongi.

Sujeta a Jimin con tanta fuerza que parece que en cualquier momento le puede desprender la cabeza.
Yoongi extiende sus alas tomando por sorpresa a Agust y logra soltarse de él. Éste deja caer a Jimin sobre el hielo haciendo así la grieta más grande.

Agust los mira fijamente y les sonríe con cinismo, parece incluso feliz de haber llevado las cosas a este nivel.
Se ve como si nada, no luce cansado y parece ejecutar cada movimiento con un mínimo esfuerzo.
Por otro lado, Yoongi se ve muy agotado y débil. Es como si el simple roce de Agust le robara todas sus fuerzas.

De un instante a otro aparece frente a Yoongi y lo sujeta del cuello.
Lo deja caer al suelo y pone un pie sobre su espalda para mantenerlo así.
Agust toma el ala derecha de Yoongi y la desprende como a una simple y vieja hoja de papel.

Escucho un ensordecedor grito por parte de Yoongi y comienzo a llorar.

—No... no... —Hablo con un hilo de voz y avanzo hacia ellos.

Piso lentamente y con cuidado el hielo, ya que ahora está más frágil.
Miro hacia abajo, con el temor de quebrar la capa sólida que me protege de las profundas aguas.

—A mí... a mí... mátame a mí —le suplico a Agust conforme avanzo hacia él—. Por favor...

Agust me mira con una sonrisa llena de maldad y satisfacción al escuchar las palabras que tanto deseaba que salieran de mis labios.

Estoy totalmente envuelta en pánico y detesto haber caído en su vil juego.
Pero no puedo quedarme a ver cómo lastima a Yoongi y a Jimin frente a mis ojos, y si lo que tengo que hacer es dar mi vida por ellos, lo haré sin dudarlo. Es lo único que puedo hacer.

—Con gusto, será un placer —me dice y levanta a Yoongi del cuello—. Sólo déjame terminar con estos dos primero.

Lanza a Yoongi hacia mí con mucha fuerza y tan rápidamente que no alcanzo a esquivarlo o a reaccionar.
Yoongi al chocar conmigo me da un fuerte abrazo y me gira para cubrirme del impacto contra la gran roca, sin embargo debido a la fuerza y velocidad termino golpeando mi costado derecho contra la misma.