Capítulo 26

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NATHAN: Eso es bueno ¿no? Has estado aquí un semestre y no conoces lo que yo ya conozco de la ciudad, o tal vez si, ¿tienes algún lugar que me recomiendes? 

___: mmmm creo que conozco uno.

NATHAN: entonces te sigo cuando terminemos esto ¿te parece?

___: totalmente de acuerdo – dijo con una sonrisa en los labios.

Ninguno había podido parar de reír durante las dos horas que estuvimos en esa biblioteca, nunca había encontrado tanta diversión en un lugar como ése, supongo que es porque nunca antes había compartido mi tiempo con una persona como _____... autentica.

Llegamos al restaurant-bar donde la morena me había guiado, era grande y en forma de “L”, en la parte frontal estaban solo las mesas del restaurant para quienes no tenían pensado beber, digamos un área más tranquila, por el otro, estaban mesas pero con otro ambiente, un poco más animado. En éste lado había un primer piso además de la planta baja, claro está; En la parte superior había una gran terraza que parecía estar techada por series de luces blancas, todas muy juntas casi tapizándola por completo. 

Antes de llegar a la terraza tendrías que pasar por la barra donde un chico y una chica preparaban bebidas con una habilidad y rapidez que solo testificaba práctica, noches de trabajo, más práctica y muchas más noches de preparar bebidas ajetreadamente. Al parecer ese bar era muy concurrido, sin embargo, yo no había escuchado hablar de él, porque estaba un poco lejos del campus, supongo. Prefiero pensar eso a que era un completo antisocial que no conocía la ciudad en la que vivía, aunque en todo caso se podría haber justificado ya que no tenía ni seis meses ahí.

Al cabo de unos minutos la hostest nos asignó una mesa en la terraza. El lugar tenía un tema algo playero para variar, buen ambiente y estaba lleno de gente de nuestra edad, unas cuantas personas mayores, pero todo dentro de lo normal. Pasamos toda la cena riendo y de nuevo una lagrima de risa rodó por su mejilla y un impulso me llevó a acercarme a ella, 

_____ dejó de reír para mirarme fijamente y dejar de morderse el labio inferior, ¡Benditos impulsos!

Cada vez se daban con mayor frecuencia y ¿el factor común? ____. Ella había estado presente en todos y cada uno de mis más recientes impulsos.

Sus ojos me contemplaban, pendientes de mi respiración, la cual trataba de ocultar pues se aceleraba inconstantemente, la sangre se calentaba dentro de mi cuerpo, sentía el corazón en la garganta… 

***: ¿Listos para ordenar?

¡Que camarera tan más oportuna! (nótese mi ola de sarcasmo) no lo podía creer, ¡sencillamente no era posible! Todo el día esperando un momento como éste y soy interrumpido por una camarera y la pregunta más boba de todas. Si ve que estoy a punto de besarla ¡¿para qué demonios se acerca?! Pero en fin, no hice más que cerrar los ojos mientras pensaba todo esto, no sería justo de mi parte ya que la mujer solo hacía su trabajo. Inoportunamente pero lo estaba haciendo y no la podía culpar.

Retomé mi lugar y me recargue en el fondo de la silla prácticamente sin respaldo por cierto, pedimos un par de bebidas exóticas que ____ tenía ganas de probar y unas botanas, en realidad no moríamos de hambre pero eso no nos caería nada mal.

NATHAN: nunca había venido aquí, supongo que es porque está lejos del campus.

____: o porque eres un antisocial – una sonrisa se le dibujó en el rostro. Maldición, esta mujer me leía la mente ¿o qué?

NATHAN: esperaba que no fuera por eso, pero tengo algo a mi favor, soy nuevo en la ciudad, eso me justifica ¿cierto?

____: claro que no, no es pretexto para perderse de un lugar como éste. No salgo mucho pero cuando lo hago vengo aquí, nadie del campus viene a este lugar. Es… Agradable.

NATHAN: bastante, ¿por qué te gusta estar lejos de los de la universidad?

____: no es que me moleste, no pienses eso – se aceleró a responder- es sólo que veo esas caras todos los días. Es bueno desprenderse de eso de vez en cuando… Yo creo.

NATHAN: tienes razón, aunque hay rostros de los cuales uno no se quiere desprender – dije mientras me recargaba hacia adelante para estar más cerca de ella- eso dicen, ¿tú qué opinas?

____: que quien lo diga muchas veces puede tener razón.

¿Será que había notado el por qué lo dije? ¿Se habría dado cuenta de que lo decía por ella y me estaba contestando la indirecta? ¿O solo lo decía por seguirme la corriente y no parecer descortés? Otra posibilidad era que lo dijera con la misma intención que yo, pero refiriéndose a alguien más, ella juraba que no era lo suficientemente hermosa o buena onda o interesante como para que alguien se fijara en ella y a decir verdad no había escuchado que otro hombre la pretendiera o estuviera interesado en ella, lo cual me resultaba completamente incomprensible y a la vez me alegraba. Me aseguraba cero competencias, por lo tanto de alguna u otra manera tendría que fijarse en mí.

Dios, esos pensamientos normalmente no van conmigo, ¿qué me estaba pasando? Yo soy el que confunde a las mujeres, no ellas a mí, tenía mi séquito de admiradoras en la universidad actual y había dejado bastantes atrás en mi antigua ciudad y escuela. 

Cosas que pasan supongo, la vida puede dar muchas vueltas, pero apostaba que lo que me llamaba la atención de ____ era lo familiar que me parecía, desde el primer momento en que la vi supe que ya la había conocido. Solo que me resultaba terriblemente imposible recordar de dónde. Y siempre que estaba con ella el preguntar dejaba de ser opción ya que sencillamente lo olvidaba.

_____ comenzó a mirar sobre mi hombre y entrecerró los ojos para fijar la mirada, ella estaba buscando a alguien, ¿le habría dicho a alguien más que viniera esta noche con nosotros?

___: oh por Dios, está aquí,

NATHAN: ¿quién? –pregunté a la vez que intentaba girar para averiguar de quien se trataba.

____: ¡no voltees! Creo que ya nos vio. __ sonrió a manera de saludo y la duda me consumía.

NATHAN: en serio quiero saber quién nos vio.

____: viene hacia acá.

NATHAN: y no me dirás de quien se trata ¿cierto? – comenté ya resignado.

___: ¡hola, estas aquí!

Kiss...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora