El bosque lll •Sacrificio•

Capítulo 12 -•- Toma mi mano

         Los chicos salieron pero no a buscarla, no se los permitieron, la dejarían tener su espacio, se quedaron en las puertas del Castillo esperando que volviera... Caroline se había adentrado al bosque como todas aquellas veces en las que había querido desaparecer un momento y así lo hizo pero con la diferencia de ya no querer volver al castillo. Esquivando ramas y algunas otras golpeándole el rostro, se adentro al bosque y se detuvo hasta que ya no sabía en qué parte del bosque había quedado.

          Se detuvo para tomar un respiro, se recargó en un gran pino con la respiración entre cortada ¿Y si Dante de ahora en adelante la ignoraba? ¿Y si ahora más que nunca su vida empeoraba más?

           —Regresemos al salón ella va a volver, siempre lo hace.

           —A veces nos cansamos de lo mismo y queremos cambiar de rumbo ¿Qué pasará si no vuelve?

           —Lo hará —aseguró Mari sin saber lo equivocada que estaba, Caroline no pensaba así.

           Con un suspiró todos regresaron. En uno de los pasillos se desviaron con la escusa de ir por algo de comer, salieron con sigilo para ir directo al bosque, sobre todo Dante que tenía que ir por Caroline, por su amor, quería escuchar con atención cada uno de los momentos con él... lo que ambos querían ser y hacer.

          Caroline golpeó el tronco con fustración tratado de sacar todo con cada golpe, dejó de golpearlo hasta que una rayo de luz salió de su puño y lo partió por la mitad, algunos árboles se encendieron de la nada,  y con cada paso que daba dejaba llamas como huellas.

         Llegó el punto donde Dante se separó dejando a Michael con Ashley para tratar de abarcar más el bosque.

          —¿Y cómo te sientes? —preguntó Ashley con gran curiosidad al ver a Michael cómo si nada después de estar... muerto.

          —Bien, muy bien a decir Verdad, era tan desesperante estar ahí, tan asfixiante, todo lo malo se juntaba y no había nada bueno, era como estar atrapado en mi interior de una forma terrible. —Era todo lo que Caroline había sentido cuando lo trajo a la vida.

            —Pero... ¿Sigues siendo tú, no es así?

          —Pues eso supongo... —dijo más a modo de pregunta.

          —¿Pero si eres tú? —seguía con su desconfianza.

          —¿Es que no me ves?

          —Puede que seas alguien más en el cuerpo de Michael, uno nunca sabe —se encogió de hombros.

          —El Ashley bueno me da miedo, estás siendo muy atento y no estoy acostumbrado por tu parte.

           —Ni quien se preocupe por ti, solo estoy preguntando para proteger a mi hermana.

          —Awww... el Ashley malo desaparecio y causa mucha ternura —Michael pellizco sus mejillas, Ashley apartó sus manos de un manotazo—. Ya no hay más Ashley malo, solo Ashley bueno —dijo como si le hablara a un cachorro.

           —Mira estúpida zanahoria, —Michael se sobresalto— una cosa es que proteja a alguien y otra muy distinta es mi tolerancia; es escasa y lo estás empeorando.

          —Por eso decía que seguía sin meterme contigo...

          Las hojas que ya habían caído y estaba cercas crujían bajo sus pisadas y era lo único que se escuchaba con el silencio que habían creado, a Ashley le gustaba, a Michael no.