Capítulo 4:

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Lily:

Veo un rato la tele, Denver no podía faltar más a la Universidad, después de clases vendría. A mí también me hubiera gustado estudiar algo, pero a los 18 años y tras acabar el instituto, elegí irme con Martin.

Llaman a la puerta y doy paso a que entren. ¿Será el doctor que tengo asignado? Mi sonrisa cambia al verle a él,  a Martin.

Martin:Hola mi princesa. -me deja un beso en la frente y un ramo de flores.

Yo:Hola.-bajo la mirada.

Martin:No he podido venir antes, he estado muy ocupado. ¿Cómo estás?

Yo:Mírame la cara, mira mi costilla- digo subiendo el camisón.

Martin:No es culpa mía, me empujaste.

Yo:Martin, ¿tú me quieres?

Martin:Pues claro, ¿cómo te atreves a preguntar?

Yo:Me maltratas, yo...yo

Martin:¿tú qué?

Yo:Es mejor que lo dejemos.

Él se levanta alterado de mi lado y me mira con cara amenazante.

Martin:Ni se te ocurra decirlo en broma-agarra mi cara- tú no vas a dejarme nunca,¿me escuchas? ¡Nunca! O sino te mataré.

Comienzo a llorar, me hace daño, sin que se de cuenta pulso el botón para que venga la enfermera y corriendo llama a seguridad.

Martin:¿Qué has hecho maldita zorra? Te acordarás de mí, tú nunca me vas a dejar.

Lo echan de allí y comienzo a llorar por una crisis de ansiedad.

Enfermera:Respira. Voy a por agua.

Ella corre a por agua y no me atrevo a calmarme. El doctor Alex entra y corre al verme en este estado.

Doctor:¿Qué pasa,Elisabeth?- dice moviendo mis brazos. Yo sin palabras y sin poder respirar,no contesto. Él me abraza y acaricia mi cabeza. "Shh, tranquila", me susurra.

Entra la enfermera y bebo el agua.

Enfermera: Ha venido su pareja y le he encontrado agarrando su cara y amenazandola. Los de seguridad lo han sacado.

Yo:Que le prohiban la entrada a ese hombre en el hospital.

Enfermera:Sí, han tomado ya sus datos.

Me tranquilizo más. La enfermera se va y me quedo con el doctor.

Doctor:Yo no soy psicólogo, pero puedo ser tu amigo y que hables conmigo.

Dr. Alex:

Elisabeth:M-me ha amenazado al querer dejarlo. Me ha dicho que me matará.

Decido abrazarla otra vez. Se le ve muy vulnerable y necesita apoyo.

Yo:Has dado el primer paso. El segundo es denunciar e irte lejos de él.

Elisabeth:No tengo nada, mis padres no lo saben.

Yo:Ya pensaremos en qué hacer. Ahora estate tranquila porque no va a volver más.

Elisabeth: ¿Cuándo me darán rl alta?

Yo:En 3 días. Luego solo volverás para revisar de que todo cicatriza bien. ¿Tienes tu documentación? Podré cambiar tu cartilla sanitaria para que te atienda yo.

Elisabeth:Mierda, está en su casa. ¡Joder!

Yo:Tranquila. Relájate, quedaré con un amigo hoy y veré qué podemos hacer. Tengo que irme.

Elisabeth:Doctor...muchas gracias.

Yo:No las des. Solo quiero que te cuides. -ella asiente y me sonríe.

Envío un mensaje a Corbin, él es policía y necesito que me ayude con este asunto. Hemos quedado por la tarde.

Corbin:¿Y bien? -le cuento la historia punto por punto para que me de una solución o al menos me guíe. -Si él tiene su documentación es algo chungo, no se puede tener una orden de un juez para entrar a por ello. Tendrá que ir ella, será la única a la que le deje entrar.

Yo:La pondremos en peligro.

Corbin:Pero es lo único que se puede hacer. Luego puede ir a cualquier oficina de mujeres maltratadas y podran ayudarla.

Yo:Joder...bueno, gracias por todo.

Nos despedimos. ¿Y si pasásemos de ir a por ello e hiciéramos uno nuevo? Tendría que hablarlo con ella.

Las marcas de una florDonde viven las historias. Descúbrelo ahora