Las marcas de una flor

Capítulo 36:

2 años después :

Lily:

Estoy super nerviosa, al fin llegó el día: hoy me graduo. Hice las prÁcticas en un centro de mujeres maltratadas y estaré con un contrato ya que les gustó cómo lo hacía. Dios,me encanta.

Maquillo mi cara a conjunto con mi vestido. Repaso mi peinado y pongo mis finos tacones. Salgo del baño y me reuno con Alex.

Alex:Estás preciosa,nena-dice dejando un leve beso en mis labios.

Yo:Luego puedes quitarlo, si quieres-susurro en su oído.

Alex:No serán por ganas.

Yo:Hoy conocerás a mis padres,¿Nervioso?- mis padres han venido a la ciudad. Se quedan en un hotel, pues no tenemos sitio en la casa y además no es mía.

Alex:Tenía ganas de ello.

Nos subimos en el lujoso co he que Alex conduce. Hoy estarán mis amigas, Alex, mis padres y hermana y es lo que yo quería.

Alex:Voy a aparcar.

Bajo del coche y encuentro a mis padres y Mía. Corro hacía ellos y los abrazo y beso.

Mamá:Dios, estás hermosa cielo.

Yo:Tenía muchas ganas de que llegara el día.

Papá:Siempre hemos estado muy orgullosos, pero hoy mucho más.

Mía:¿Y ahora?

Yo:Ahora a trabajar duro.

Veo que Alex viene de lejos. Se acomoda su lujoso traje y yo le sonrío.

Yo:Viene Alex, ahora os lo presento- digo a mi familia en lo que voy a alcanzarle. Le ofrezco mi mano y vamos a mi familia.

Yo:Mamá,papá,Mía, este es Alex, mi pareja.

Todos se saludan. Mía me hace gestos e interpreto que le da el visto bueno. Acompaño a los 4 a sus respectivos asientos y yo voy con mis compañeros.

Todos mis compañeros suben uno a uno conforme les llaman, les ponen sus bandas y hacen la foto. Yo hago igual y veo a mi familia orgullosa, realmente orgullosa.

Mamá:Cielo, hemos hablado con Alex y podemos ir a cenar todos. No nos pilla muy lejos volver a casa.

Yo:¿No os quedáis?

Papá:Preferimos volver a casa, estaban algo caro los hoteles.

Yo:¿Entonces cenamos?

Alex:Conozco un restaurante que pone buenas mariscadas.

Papá:Os seguimos con el coche.

Alex y yo subimos en el coche y salimos del aparcamiento. Luego vamos donde él pensó y me quedo boquiabierta al ver que es uno de los restaurantes más lujosos de la ciudad.

Dr.Alex:

Elisabeth:¿Estás loco? Mis padres no saben que eres...rico-dice preocupada.

Yo:Nena, hay que darles buena impresión.

Elisabeth:¿Qué les digo?

Yo:Que hemos pagado la cena tú y yo.

Elisabeth:Claro, como si una cena de más de 200€ pudiésemos pagarlo.

Yo:Bueno..tarde o temprano tendrás que decirlo.

Ella se molesta ante mis palabras. Es algo evidente que saldrá a la luz, incluso cuando viesen el apartamento. Ella baja sin decir nada y se dirige a ellos. Sus padres miran extrañados el lugar y ella creo que les excusa el porqué vamos ahí.

Yo:Pediré que nos pongan en un buen sitio, con vistas a la ciudad.

Padre Elisabeth:Pero hijo, es algo caro...

Yo:No se preocupe, esto corre a mi cargo.

Madre Elisabeth:Ni hablar, esto tiene que ser nuestro.

Yo:No, y no hay nada que discutir. Vayamos dentro.

Nos sentamos en mi sitio favorito y luego pedimos la comida. Mía mira los precios y se queda extrañada.

Yo:¿Qué tal si brindamos? Por Elisabeth, que no se detiene por nada.

Brindamos y después de la cena pedimos el postre. Noto que Elisabeth está distante, pues en las típicas preguntas que se hacen a las parejas, ella a penas contestó.

Después de la cena pago y ellos lo agradecen. Montan en su cochen y parten a su hogar. Elisabeth sube al mío sin decir nada.

Yo:¿Enfadada?

Elisabeth:Joder, normal.

Yo:Pero si ni han sospechado.

Elisabeth:No me gusta que uses de manera tu dinero-dice seria.

Yo:venga nena, es un día alegre- agarro su mano.

Llegamos a casa y ella enseguida quita su vestido dejandome ver su ropa interior conjuntada y terriblemente sexy. Me acerco agarrando su espalda y besando su cuello.

Elisabeth:No, estoy enfadada- suspira.

Yo:Perdóname, pensé que sería lo mejor.

Elisabeth:Como me bombarden a preguntas mañana...no sé qué decir.

Va al baño, yo me quito el traje y voy en boxer a lavarme los dientes, cuando la emcuentro en el lavabo sentada cepillando su pelos. Me acerco a ella y me rodea con las piernas.

Nos besamos con furia y acabo cogiendola para llevarle a la cama. Una vez ahí nos metemos debajo del edredón y en cuestión de segundos me inteoduzco en ella.

Nuestro ritmo acelera y con él los gemidos. Acabamos en un climax que nos ha agotado y nos tumbamos en la cama.

Yo:Nena-me abrazo a ella- te amo.

Elisabeth:Yo también. Voy a ducharme, mañana tengo que firmar el contrato definitivo.