Lily:Despertamos en nuestro último día del finde, aunque hoy es mi cumple no quiero repetir lo del viernes porque pasé mal día y tarde.
Jhon no está,ni aquí ni en el baño. Me preparo y bajo con la esperanza de que me prepare el desayuno. Oh, qué imbécil, es mi cumple y ni me acordaba.
Todos cantan la canción de cumpleaños feliz mientras Alex trae una tarta con velas.
Yo:Chicos, muchas gracias.-abracé de nuevo a todos.
Desayunamos y cogimos una porción de tarta. Luego hicimos planes para hoy: cenaríamoa fuera y luego volveríamos a casa. Era mi cumple, pero también el último día de estas mini-vacaciones.
Fuimos a cambiarnos y recoger las maletas, una sirvienta se pasaría mañana a recoger todo.
Alex:Bueno, ten tu regalo-dijo sacando una cajita. Dentro había un bonito colgante. Él me lo puso y no resistí a besarle, era muy detallista.
Denver:Oye, menos mimos y más fiesta.
Yo: Bueno, por mi cumple os haré de cocinar algo rico, ¿sí?
Alex:No, es tu día.
Yo:Pero me apetece.
Alex:Está bien, pero a la noche vía libre.
Jhon:¿Necesitamos comprar algo?
Alex: No, hay de todo.
Jhon:Vamos a dar una vuelta para despedir el lugar.
Hacemos una barbacoa fuera y aprovechamos que la casa es solo nuestra para ducharnos juntos.
Alex:¿Te ha gustado el finde?
Yo:Por supuesto, deberíamos venir más a esta casa.
Alex:Siento no haberlo contado.
Yo:Me lo explicaste en su momento y lo entendí, tranquilo.
**********************
Dr.Alex :
De nuevo el caso de una mujer maltratada, mil flashes sobre la primera vez que vi a Elisabeth me inundan la mente.
Yo:¿Qué tenemos?
Enfermera:Mujer, 18 años, está embarazada y tras la paliza el bebé ha sufrido múltiples contusiones.
Todo el equipo nos vestimos con la indumentaria y explicamos qué vamos a hacer. Tras 2 horas, sacamos al bebé de la barriga y analizamos su estado: es muy grave.
Enfermera:Es un bebé de 8 meses y está muy afectado.
Yo:Debemos salvarlo.
Intentamos arreglar el daño sin que pase mucho tiempo, pero en vano. El cabrón que ha hecho esto ha matado al niño y la madre se ha salvado por muy poco. Me desvisto y me voy al baño. No puedo parar de llorar, ha sido muy duro para mí. Alguien llama a la puerta, es Jhon.
Jhon:Ey, tío, me he enterado de lo que ha pasado. Tranquilo -me abraza.
Yo:Es muy duro ver cómo pierdes a una persona en tus manos, y más viendo que se trata de una mujer maltratada.
Jhon:Lo sé, pero tienes que salir y enfrentarte a todo.
Yo:Se lo diré yo a su madre cuando despierte.
Voy a la cafetería, me compro un té para relajarme. El pecho está angustiado y me cuesta respirar. Han pasado 3 horas desde la operación y creo que ya estará despierta. Sorbo el último trago y voy a la habitación. Ella está magullada por todos lados, incluso con la cabeza vendada. Me mira.
Paciente:¿Y mi bebé?
Yo:Lo hemos perdido, no pudimos hacer nada- comienza a llorar y aunque no es profesional, la abrazo.
Paciente:Mi bebé -toca su barriga.
Yo:Ha sido tu pareja el autor de este daño,¿no?
Paciente:Sí...
Yo:Necesitas ayuda, bonita. ¿Llamaste a tus padres?
Paciente:No, ellos no saben nada.
Yo:Pero deben saberlo, ese cabron se pudrirá en la cárcel y necesitas ayuda moral y psicologica. Tus padres van a ayudarte, eres muy joven.
Paciente:Llevas razón, muchas gracias.
Nos despedimoz y pido que una psicóloga la revise para ver cómo se siente.
Me cambio y voy a casa, son cerca de las 6 y no tengo ánimo para nada.
Elisabeth:Ey, vaya cara- me da un corto beso. No puedo aguantarme y me derrumbo en sus brazos. Nos sentamos en el sofá y cuento lo ocurrido.
Elisabeth:Has hecho lo que estaba en tus manos, tranquilo.
Yo:No entiendo cómo hay tantos malnacidos así.
Elisabeth:¿Puedo preguntarte algo?
Yo:Sí.
Elisabeth:Este tema te afecta mucho,¿es por mí o porque has vivido algo cercano?-me quedo en silencio.
Yo:No puedo soportar que haya maltratos, de ningún tipo. Me afecta mucho por ti, sé cómo lo has pasado.
Elizabeth: Voy a ir a un centro de mujeres maltratadas con la clase, es parte de un proyecto.
Yo:¿Podrás estar bien?
Elisabeth:Tú me ayudaste, ahora me toca a mí.
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Las marcas de una flor
Romance4 años metida en esta tortura. Cuando comencé con él todo era alagos, regalos, detalles tras detalles, palabras que se las llevaron el viento. Luego vinieron los insultos, las prohibiciones, el no salir de casa. Lo más fuerte son las peleas. Me llam...