DESPREVENIDA *COMPLETA*

CAP. 32

AGUA FRÍA

Pov Miranda:

Por fin es viernes. Parece que han sido meses desde la última vez que he podido decir eso. Y pensar que el viernes pasado odiaba a Will... Que vueltas da la vida.

Me levanto de la cama y me alisto para irme al colegio. Hoy Will no me puede acompañar ya que me a dicho que tiene asuntos que atender antes de ir al instituto, si es que acaba yendo.

Bajo las escalera y me encuentro a un Marco sonriente hablando con Toni. Me gusta que se lleven bien ya que son mis únicos amigos.

— Hola holita.

— Hola Mir, ¿Que tal andas? —Me saluda Marco dándome un tierno abrazo.

— Hola —Susurra Toni.

Lo miro sin saber qué hacer. Yo lo aprecio mucho y no quiero que se largue de mi vida así que tengo que hablar con él sobre Will antes de nada. Aún tiene el ojo morado. También se pueden distinguir unas heridas que me habría gustado sanar.

— Toni...

— Yo me voy a beber mi café mañanero...—Dice Marco y se dirige a la cocina dejándonos completamente solos.

— Miranda, quiero que seas clara conmigo... No estoy para chorradas de instituto.

— Lo sé... Aún no lo tengo del todo claro pero eres muy importante para mí. Quiero que sigas siendo mi amigo.

— ¿Amigo? ¿Acaso besas y te restriegas contra todos tus amigos? No lo entiendo... Pensé que te gustaba. —Dice y un atisbo de dolor se ve en sus ojos

— Toni, ahora mismo quiero conocer a Will... Pero eso no quiere decir que te quiera fuera de mi vida. —Digo acercándome más a él.

— ¿Por qué Will? ¿Por qué tiene que tener todo lo que yo quiero?... —Susurra y puedo ver como los muros que empecé a derribar en su momento, se empiezan a levantar de nuevo.

— No puedo decidir en mis emociones... De verdad.

— ¿Cómo? Eso lo dices porque no lo conoces de verdad. ¡Es un puto monstruo! ¡Miranda, es un traficante! ¿Cómo es que no puedes ver en lo que te estás metiendo? —Empieza a gritar inconsideradamente.

— Él no es malo. Nadie lo conoce como yo lo hago. —Digo a la defensiva intentando sonar serena. Él suelta una carcajada.

— No lo conoces ni por un mes... Miranda... ¿Que te crees? ¿Crees que va a cambiar por ti? ¿Como en toda película romántica? ¿Tu la buena y él el malo que tiene un corazón? ¡Venga hombre, por favor! ¡Que ni tu eres buena ni él tiene corazón!

— ¡No es verdad! Lo nuestro es real... —Ya no sé si le estoy intentando convencer a él o a mí misma.

— ¿Enserio Miranda? ¿Un traficante? ¿Tú te crees que no ha matado a nadie o a hecho algo más que traficar con una substancia que destroza vidas? ¿Sabes lo peor? Que a mí me da igual él porque ya lo conozco de sobra. Lo que me duele es que haya pensado que eras... distinta.

— Toni...—No puedo evitar empezar a llorar.

— Creía que eras esa chica a la que le apasionaba la lectura y quería cambiar el mundo. No esta chica que va detrás de un puto traficante por ingenua... —Y con esas palabras sale.

No se si sigo respirando. No me importa. Ha sido como un jarro de agua fría, demasiado fría. No me importaría lo que dice si no supiera en el fondo que... es verdad. Estoy intentando algo que no tiene un futuro. No quiero estar con alguien que sigue a su padre cómo títere. Aunque me haya mostrado algo de su alma. No puedo seguir con esto. Estaba tan en trance que ni siquiera me estaba enterando de donde me metía. Drogas, narcotráfico... no es algo de lo que quiera ser partícipe.

Sin poderlo remediar, me caigo al suelo y me quedo ahí, perdida en mis pensamientos. No sé cuándo dejé que se metiera tanto dentro de mi piel. Se me hace imposible pensar que todas sus caricias serán recuerdos enterrados, que todas las risas reprimidas caerán en el olvido... que todo por lo que me ilusionaba... se ha esfumado.

Pero tiene que ser así, seguro que encuentro a alguien que me haga olvidarle. Espero darme cuenta de que todo lo que me hace sentir, cualquier otro puede hacerlo. Y espero, ante todo, poder acabar con esto lo antes posible...

Lo último que recuerdo es ver a Marco correr hacia mía. Parece que me está gritando pero ya no le oigo. Por detrás viene Jack corriendo y ahí es cuando todo se vuelve negro.

Pov Will:

Me dirijo hacia el hospital. Me llegó una llamada de parte de Marco insultándome y amenazando hace unos minutos. Al principio no sabía de lo que hablaba pero luego dijo que ahora Miranda estaba en el hospital por mi culpa y que si me acercaba me partiría la cara o algo así. Tras oír lo de Miranda dejé que el móvil cayera mientras corría hacía mi coche.

Me adentro en el hospital y antes de llegar a la recepción, un Jack furioso me intercepta.

— ¿Dónde está? —Pregunto perdiendo los nervios.

— No la vas a ver. No quiere verte. No quiere formar parte de tu vida. Le das asco. Lo sabe todo. Ahora se ha dado cuenta del tipo de persona que eres... Aléjate de ella ¿Entiendes?

No, no lo entiendo. No le he contado ni la mitad de cosas que he hecho pero estábamos en el buen camino. Esperaba hablar con ella este sábado para contarle más cosas... Pero me ha dejado... Sabía que lo mejor que podíamos hacer era alejarnos el uno del otro pero, si esto es lo correcto, ¿Porque duele tanto?