Nos vamos al salón donde nos ponemos Buscando a Nemo, ya que solo encontramos pelis de Pedro. Bueno, para qué engañarnos, a nosotros nos gusta más que al niño... Nos acurrucamos los dos en el sofá y permanecemos en esta posición hasta que termina la peli. Como no sabemos cuando llegará mi familia, decidimos ponernos la tele, puesto que no nos vamos a arriesgar a ponernos otra película y luego quedarnos a medias. No sé cómo, pero acabamos viendo un documental sobre pingüinos, concretamente una especie llamada pingüinos juanitos. Agoney se tumba en el sofá y yo hago lo propio sobre él, que me envuelve con sus brazos y deja suaves caricias con su pulgar en mi espalda y me masajea la cabeza.
Ago: mira, rubio, ese pingüino se parece a ti
Ra: qué dices?
Ago: que si que si, son clavados, andan igual y todo. Además es el más pequeñito de todos
Ra: *ríe* mira que eres tonto...Se acaba el documental de los pingüinos y pasamos a uno del medio rural. En él nos enseñan todo tipo de técnicas agrícolas. Entre ellas, ordeñar a los animales, y aparecen las cabras.
Ago: DIOS, RAOUL, QUE ESA SÍ QUE ERES TÚ
Ra: a ver, sé que me quieres, que solo piensas en mí, que no puedes vivir sin mí... pero quieres dejar de comparar cada puto animal que sale conmigo? *ríe*
Ago: qué no que es en serio, mirale el flequillito, si es que son clavadosY entre bromas, risas y comparaciones con todos los animales que aparecen en pantalla, nos quedamos dormidos en el sofá. La siguiente imagen que veo no sé ni cómo asimilarla. Nada más abrir los ojos, me encuentro el pecho de Agoney subiendo y bajando rítmicamente mientras duerme, esbozo una gran sonrisa. Pero cual es mi sorpresa cuando, al levantar la mirada me encuentro a mis tíos y mis padres. Me da un vuelco el corazón. No puede ser, no no no no. Pero sí, sí que es real y ya no puedo hacer nada para evitarlo. Me intento separar de Agoney, pero me tiene agarrado muy fuertemente. Así que no me queda otra que despertarlo y que se coma el marrón conmigo.
Ra: *zarandeándolo y con la voz temblorosa por los nervios* A...Ago, despierta
Ago: *bostezando* qué pasa, mi amor?Vale, si quedaba alguna duda acaba de desvanecerla con eso.
Ra: *se cubre la cara con la mano* que tenemos visita...
El canario abre rápidamente los ojos y ve el panorama. Empieza a ponerse casi tan rojo como yo y me suelta de su agarre. Tarde, cariño.
Ra: a ver, esto tiene una sencilla explicación
Ago: nos pusimos a ver la tele y nos dormimos de golpe... y...
Ra: como hace frío pues...Mi madre empieza a reírse, sus carcajadas van seguidas de las del resto de mi familia.
Ra: *mirándolos a todos* qué pasa?
Su: cariño, que os hemos pillado durmiendo, no con los pantalones bajados, no hace falta que nos des explicaciones
Ra: pero... no os sorprendéis?
Ma: Raoul, por Dios, se veía de lejos
Ra: y desde cuando sabéis que soy...?
Su: desde que volvió Ago, cariño esas cosas se notan, que los padres no somos tontos. Y quien no lo ve es porque no quiere hacerlo
Ago: es que disimulas de pena, rubio
Ra: habló *imitándolo* "qué pasa, amor?"Las carcajadas vuelven a llenar el piso y no sé cómo no despertamos al niño. Qué alivio, me siento como si me hubiese quitado dos mil kilos de encima.
Ma: eso sí, Agoney, no me lo influencies que nos conocemos
Su: Manolo!
Ago: no no, tranquila, Susana, si tiene razón, soy un desastre con patas *ríe* lo cuidaré con mi vida, Manolo, te lo prometo
Ma: pues bienvenido a la familia, muchachoY sellan el pacto dándose un abrazo. Esto es incómodamente reconfortante... Pero por fin, por fin soy libre y puedo gritar a los cuatro vientos que amo a mi novio, Agoney Hernández Morales y no puedo ser más feliz.
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CUIDADO CON LO QUE DESEAS (Ragoney)
FanfictionQué pasaría si un día llega alguien inesperado para cambiar tu aburrida vida completamente? Le seguirías el juego? Nuestro protagonista, Raoul Vázquez, lo tiene claro: sí.