CUIDADO CON LO QUE DESEAS (Ragoney)

Capítulo 66 - Melodía

Después de mi cumpleaños, se empezó a complicar la cosa. Vinieron los exámenes finales, los trabajos en masa, las noches sin dormir y la preparación para la selectividad. Lo que redujo mi vida social a recibir de vez en cuando la visita de Ago a casa y las quedadas con las chicas para estudiar en la biblioteca. Y al fin, llega. El último examen, el de inglés.

Ne: ya está, amigaaas! Lo hemos superado
Ra: por fin, qué tortura de semana
Ne: qué tal os ha salido?
Ra: yo creo que bien
Miri: a mí fatal, en la parte escrita sólo puse: "hello, my name is Miriam" *ríe*
Ne: no te puedo creer *ríe también*
Ra: yo sí

Y con el fin del curso, viene la fiesta de final de curso. Y con la fiesta de final de curso, viene el concurso de canto. Estoy en casa decidiendo qué ponerme y me decanto por una camisa blanca por dentro de unos pantalones negros y unos zapatos del mismo coñor. Igual es demasiado...

Ago: *abriendo la puerta* venga, que llegaremos tarde
Ra: *poniéndose una mano en el pecho* que susto, Ago, podrías haberme pillado desnudo
Ago: *ríe* te me vas a poner mojigato después de haber follado en todas las habitaciones de esta casa?
Ra: no lo hemos hecho en todas
Ago: pues ya tenemos tarea para el verano
Ra: *se sonroja* idiota...

Se me queda observando detenidamente.

Ra: qué? Es demasiado?
Ago: no, que va, estás guapísimo *sonríe* es que sigo sin creerme que seas real y que estés conmigo
Ra: pues ya sabes lo que se siente *ríe*
Ago: vamos, anda

Y, como ya es costumbre, me tiende la mano y vamos paseando hasta el instituto. Los "espectadores" van llegando poco a poco y tras el telón veo a mi familia al completo, con Pedro incluido. Y junto a ella a un montón de gente más.

Ra: *nervioso* yo me voy de aquí
Ago: ni de coña
Ra: has visto cuánta gente hay?
Ago: sí y todos van a caer a tus pies en cuanto abras esa boquita *le da un toquecito en los labios con el índice antes de posar los suyos sobre estos*

No sé cómo lo hace, pero lo hace. Unas palabras suyas y un simple gesto y consigue tranquilizarme. Va a empezar el concierto y Agoney se va al público. Bueno, más bien lo echan. Entre todos mis compañeros hay mucho talento, lo que hace que me ponga más nervioso aún. Van pasando uno a uno hasta que por fin llega mi turno. Salgo sin mirar a nadie y me siento en el piano. Siento que el corazón se me va a salir del pecho. Inspiro. Expiro. Y con la mirada busco al canario. Lo veo, me mira, me sonríe, le sonrío. Cierro los ojos y empiezo a tocar. Pienso en todas las veces en las que la he tocado en su casa. Con él al lado, después o antes de estar acurrucados en la cama. Y todo es más fácil. La canción me sale sola. Cuando acabo, gran parte del público me hace una ovación y yo suelto un tímido gracias antes de que me estalle la cabeza debido a lo roja que se está poniendo.

Su: cariño, lo has hecho muy bien *le da un abrazo*
Mire: los pelos de punta
Ra: jo, muchas gracias *sonríe*
Al: estoy muy orgulloso de lo que has hecho ahí arriba

Hablamos durante los minutos de la deliberación y, finalmente, la directora del centro anuncia al ganador.

Noe: ha sido complicado, pues este año hay mucho nivel, pero el ganador o ganadora del concurso de este año y el privilegiado o privilegiada que podrá repetir su actuación es... Raoul Vázquez!

Toda mi familia, Nerea, Míriam y Roi se ponen a gritar. Dios, que vergüenza. Subo al escenario y me dan un pequeño trofeo.

Noe: quieres decir unas palabras?
Ra: sí, claro, pero antes...

Cojo el trofeo y lo estampo contra el suelo con todas mis ganas. La gente, incluida mi propia familia, se sorprenden. Hasta Agoney que sabe leerme siempre como un libro abierto se ha quedado extrañado por mi acto.

Ra: sé que muchos, o más bien todos, estáis pensando: qué hace este tío? Tranquilos, tiene una respuesta lógica y sencilla. Yo vivo para la música, no sólo es mi hobby sino que pretendo vivir de ella. Y como futuro músico, me parece una falta de respeto convertir la música en una competición. La música no es para conseguir trofeos, la música es para compartirla, para disfrutarla, para hacerte oír... Así que el mejor premio de la noche me lo he llevado tanto yo mismo, como el resto de personas que han subido aquí. Porque el mejor premio es ser oído. Así que muchas gracias, pero si aquí la música es sinónimo de rivalidad, yo paso de tocar para vosotros

Le devuelvo el micrófono a Noemi que sigue sorprendida y bajo donde me reúno con mi gente.

Ago: *abrazándolo con fuerza* Dios, me encantó lo que hiciste ahí arriba, me has puesto cachondisimo
Ra: *ríe sonrojado* Ago, por favor...
Ne: *ríe* si es que tanto tiempo con Agoney te ha acabado pegando eso de ser revolucionario...

Le río el chiste a Nerea y voy a por algo de picar del "catering". Ago me acompaña.

Ago: Raoul...
Ra: dime
Ago: quiero contarte algo
Ra: *se mete un canapé en la boca* pues cuéntamelo
Ago: he decidido que voy a dejar el trabajo en el parque infantil y voy a intentar dedicarme a la música. Sea como sea: en bares, enseñando a niños y niñas a tocar el piano, lo que sea
Ra: y eso?
Ago: tú... tienes razón, la música se vive y se comparte y yo quiero trabajar con esa sensación. Quiero ser músico
Ra: pues siento decepcionarte, pero no vas a poder...
Ago: qué? Por qué?
Ra: porque no se puede ser músico cuando ya eres la propia música
Ago: ya tardaba en salir la moñada de turno *ríe* gracias, Raoul. Por todo, desde que apareciste en mi vida todo cambió. Gracias de corazón
Ra: gracias a ti, mi amor, gracias a ti

Cerramos la conversación con un gran abrazo. Nuestros latidos acompasados luchan por seguir el ritmo del otro. Y es que al fin y al cabo ambos somos músicos y hasta nuestros corazones crean melodías. Y cualquier melodía que cree al lado de Agoney, es la más bonita del mundo.

FIN 💜💛
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Bueno pues muchísimas gracias por haber llegado hasta aquí, por todos los comentarios y por todo el apoyo, espero que la hayáis disfrutado tanto como yo y nos vemos mañana con la introducción de una nueva novela que creo que os va a gustar 🌚