➴ ❝ ¡No soy un pasivo! ❞┊Taekook.

❨ 20 ❩

Maratón (3/5)

Al final, Suga y Jungkook terminaron llegando a tiempo. El azabache realmente no confiaba mucho en que la bicicleta fuera tan rápida.

Ambos caminaron hasta la entrada de la casa, y al estar frente a la puerta, se miraron mutuamente.

-Supongo que debo dejarte solo aquí.-Dijo.-Suerte mocoso.

Jungkook abrazó a su mejor amigo con una sonrisa nerviosa y asintió.

-Gracias hyung, cuídese camino a casa.-Jungkook vió a Yoongi asentir e irse caminando a la bicicleta.

Esperó a que este partiera para poder respirar hondo y tocar el timbre. Comenzó a jugar con sus dedos, esperando a que alguien le abriera.

Y ahí estaba él.

Taehyung abrió la puerta y le sonrió.

-¡Jungkookie!-El castaño lo abrazó, y este simplemente correspondió.-¡Te extrañé mucho mucho!

Se separaron y se tomaron de las manos.

-Tae, nos acabamos de ver ayer, ¿No te acuerdas?-Contestó.

-Veinticuatro horas es mucho tiempo, Kookie.-El mayor infló sus mejillas, con el ceño fruncido. Jungkook rió y besó suavemente su moflete.

-Claro que no, lo que pasa es que eres muy pegajoso.-Taehyung asintió y lo tomó por la cintura.

-Pasa, adentro esta Yerim y mis mamás.-Sonrió, tratando de tranquilizar a su novio, el cuál sentía que quería ir al baño de los nervios.

El azabache asintió y pasó, mientras Taehyung cerraba detrás de si la puerta.

-Vamos, lo más seguro es que estén en la sala.-Comentó el castaño mientras rodeaba sus hombros con un brazo, guiándolo.

Lo admitía. La casa de Taehyung era bastante amplia y era muy muy bonita, tenía un diseño moderno pero no aburrido. Había fotos, pinturas y algunas decoraciones además de una gran pecera encima de donde se encontraba la televisión.

Finalmente llegaron a la sala, y efectivamente, ahí estaban todas.

-¡Hola, cariño!-Exclamó alegre la que parecía ser la mamá de Taehyung.-Soy Kim SeulGi, la mamá de Tae, ¡Es un gusto conocerte!

La castaña acercó su mano a la de él y el la estrechó suavemente, con una de sus sonrisas de conejito.

-Mucho gusto, señorita Kim.-Contestó un poco nervioso.

-Yo soy la madre de TaeTae, Kim JooHyun.-Dijo la muchacha que estaba junto a la más alta.-Pero si gustas, puedes decirme Irene, ¡Es un gusto tenerte en nuestro hogar! Taehyung nos suele hablar maravillas de ti.

Un rubor se extendió por la cara de ambos jóvenes.

-Madre..-Susurró entre dientes el joven castaño, causando algunas risas en la azabache.

-Lo siento, Tae suele ser muy penoso.

-Bueno,en eso estoy de acuerdo...-Susurró con una sonrisa, desviando la mirada.

-¡Jungkook!-Murmuró el castaño avergonzado.-Ya deténganse, por favor.

El menor lo abrazó por el torso, con una adorable sonrisa.

-No tienes nada de que avergonzarte.-Dijo, mientras observaba el pequeño sonrojo en el rostro del castaño a causa de la pena.

-Mi madre solo me está haciendo lucir como un tonto.-Contestó, mirando de reojo a su madre, quien rió.