Siempre, Liam. (Promises #2)

Capítulo 1: Pero no era ella.

NOTA IMPORTANTE: EL LIBRO COMIENZA EN LA TEMPORADA DECEMBRINA, ES DECIR, NAVIDAD Y AÑO NUEVO. ESTE FUE EL PERIODO EN EL QUE LO ESCRIBÍ POR LO TANO ME INSPIRÉ EN ESTO, SIN PENSAR QUE LA PUBLICACIÓN SERÍA BASTANTE DESPUÉS Y PODRÍA QUEDAR DESFASADO EN EL TIEMPO. ASÍ QUE POR FAVOR DISCULPEN SI LEEN UN CAPÍTULO SOBRE LA NAVIDAD EN FEBRERO, ESPERO QUE DE IGUAL MANERA PUEDAN DISFRUTARLO.

Capítulo 1: Pero no era ella.

Sidney y yo habíamos comenzado a salir hace unos tres o cuatro meses, nos conocimos en un evento de la empresa en la que trabajo, instantáneamente tuvimos química y luego de tres meses de salir juntos, y luego de mucho pensarlo le pedí que fuera mi novia. Me costo mucho volver a sentir algo por alguien, y ni siquiera todavía me sentía apto para sentir algo por alguien más. Por alguien más que no fuera ella, siempre ella.

Solo me faltaban seis meses para terminar mi carrera, cuatro años me habían bastado. Mi ritmo era estresante, entre la universidad donde debía conseguir altas calificaciones para mantener mi beca, y mi trabajo, no tenía mucho tiempo de relax. Y a decir verdad, lo agradecía, no me gustaba pararme a pensar, desde aquel día había buscado todas las maneras de mantenerme ocupado todo el día.

Definitivamente esto iba a ser un problema en mi relación con Sidney, quizá no lo sea ahora, ya que es muy reciente, pero estoy seguro que con el tiempo se cansará de esto, y no la culpo. No debe ser bonito salir con una persona que no está segura de sus sentimientos, que tiene un pasado amoroso fuerte, obsesionado de los estudios, el trabajo y el ejercicio, y que no para un segundo. Y no hablemos de los fines de semanas, donde no podemos salir ya que todos los domingos juego en el equipo de lacrosse de la universidad, por lo que los sábados es cero alcohol o grasas para mi.

La única manera en la que podía entender por qué me soportaba, era porque su estilo de vida no era muy diferente. Sidney es modelo, no una muy grande, pero si hace algunos trabajos. Por lo que constantemente se encuentra con agendas apretadas, horarios raros y muchos viajes. Su Instagram había explotado cuando blanqueó nuestra relación, cabe aclarar que sin mi permiso, pero no es algo que me molestara tanto.

Por alguna razón, me sentía culpable de que ella se enterara de mi nueva relación, no se muy bien por qué, supongo que entendería que debo seguir adelante, pero no estaba listo para que ella piense que voy a seguir adelante. No cuando, claramente, no puedo ni quiero salir adelante. Pero me convencía a mi mismo de que debería hacerlo, de que tenía que volver a ser feliz, aún cuando en este momento no me imagino contento sin ella a mi lado, era algo que debía superar.

Diariamente me preguntaba que sería de su vida, ¿tendría ella pareja? ¿Habrá terminado su carrera? ¿Trabajará? Muchas veces pensé que ya a este punto podría estar casada y con hijos, si así lo quisiese. Había preguntado varías veces por ella a nuestros amigos, pero no creen que sea lo mejor para ninguno de los dos saber del otro, y les hice caso, no quise volver a saber de ella. No pregunté por ella, no la busqué, jamás entre a su perfil de Instagram. Bueno, lo último es mitad cierto, lo he hecho un par de veces, sigue siendo la mujer mas hermosa del mundo.

- ¡Liam! ¿Tienes planes el viernes a la noche? - me pregunto mi jefe cuando estaba por terminar mi jornada laboral. A decir verdad me daba gracia que me lo preguntara porque más bien era un "no me importa si tienes planes, cancélalos". Negué con la cabeza. - Perfecto, tenemos una cena con futuros socios y me gustaría que nos acompañaras. Desde el sábado comienzan tus vacaciones de navidad.

Por dentro grité de felicidad, me sentía feliz de poder finalmente tener un descanso y volver a Santa Monica para ver a mi familia y amigos. Los veía dos veces al año, en las vacaciones de verano y en las de hoy invierno, y a veces en algún fin de semana largo en donde no tuviera partido ni horas extras en la oficina. No poder verlos tan seguido definitivamente me había hecho apreciar más los momentos que pasamos juntos, y muchas fueron las veces donde el estrés me ganaba y tenía ataques de ira por no poder tenerlos cerca, que solo me calmaban ir un rato al gimnasio.

- Por supuesto, señor Cook. - asentí, tomando mi bolso del gimnasio.

- A la nueve te pasará a buscar el auto por tu departamento, tienes permiso a salir una hora antes de la oficina, sabes cómo funciona.

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Sydney había cocinado unas verduras debido a nuestras estrictas dietas, y le agradecí que haya tenido la comida lista cuando llegue del gimnasio, había sido un día agotador. La vi ahí, pasearse por mi cocina haciendo nuestra cena y no pude evitar sentir que no era correcto, que no quería que esté aquí.

No me malinterpreten, Syd es una chica increíble. No sólo es extremadamente hermosa por fuera, sino también era bonita por dentro, era muy buena persona y me gustaba estar con ella. Pero al mismo tiempo, me daba remordimiento saber que no le estaba entregando el cien por ciento de mi, que cuando estaba con ella mi mente pensaba en otra, era inevitable. Por más escapatorias que busque todavía no estaba listo para estar comprometido con alguien más.

Me daba rabia saber que me gustaba como me hacía sentir, pero que era solo atracción, no había amor. Era pura chispa, simpatía. Luego de ella me prometí jamás estar con una mujer solo por atracción física, pero había caído de nuevo. Era hermosa y tenía un cuerpo de infarto, me caía bien y nos llevábamos de lo mejor, pero no era ella.

Unos brazos serpentearon por mi espalda desnuda por la reciente ducha y se apretaron en mi. Lentamente me giré y agarré su diminuta cintura, acercándola a mi, y la besé. Besé sus rosados y gruesos labios con intensidad, con pasión y ella parecía dispuesta a ello. Tomé su cuerpo y lo acorralé en la mesada del baño antes de subirla a esta.

Mis manos masajearon sus piernas, su cintura, su espalda, su cuerpo entero mientras el contacto de nuestros labios no perdía energía. Sus uñas acrílicas pasearon por mis brazos y espalda haciéndome estremecer, lo que parecía darle gracia. El cuerpo híper tonificado y delgado de Sydney me seguía el ritmo, me rodeaba con rudeza para mantenerme cerca.

La besé y toque con fuerza, con furia y pasión, como me gustaría hacerlo con ella. Besé y toque a Sydney como me gustaría hacerlo con Scarlett.

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•Multimedia: Sidney Williams (Yasmin Wijnaldum)

Primer capítulo de la segunda parte de esta duologia, decidí nombrarla Promises. ¿Cómo lo ven? Como pudieron leer, esta narrada por Liam, ¿les gusta esto?

Por otro lado, quería informar que decidí que voy a actualizar los días martes y viernes.

Quiero saber, ¿qué piensan qué pasó entre Scarlett y Liam?

-S.