Siempre, Liam. (Promises #2)

Capítulo 29: Jamás la olvidó.

Capítulo 29: Jamás la olvidó.

- ¿Todavía están intentando convencerla? - me preguntó Tyler esa sábado por la mañana.

- Creo que van a tener que vigilarla hasta el último segundo - respondí.

El día de la boda del hermano de Scarlett había llegado, y había sido casi imposible convencerla de no vestirse de sus dos únicos colores: negro y blanco que para su desgracia eran los únicos que estaban prohibidos en todo casamiento. La ceremonia comenzaría a tarde y culminaría en la madrugada del día siguiente, pero ahora nos encontrábamos en una sala de clínica esperando a entrar a la primer ecografía (de la que nosotros seríamos parte) de Tayce. Las chicas en este momento, intentando hablar de otra cosa que no sea el pequeño feto que veríamos en un par de minutos, le explicaban por millonésima vez a mi novia porque no podría usar aquellas tonalidades y la alentaban para que use el atuendo que Ariel le había obligado a comprar la semana anterior.

- Ni siquiera quiero ir a ese estupido evento - repitió.

- Es la boda de tu hermano, Scar.

- No es su boda, es de Samantha.

Antes de que cualquier tuviera que verse obligado a responder, una doctora con su típica bata blanca nos invitó a entrar al consultorio, sintiéndose un poco intimidada por la cantidad de personas que éramos. Supongo que no es la costumbre tener a nueve individuos dentro de una salita como aquella. Sin embargo, la señora de pelo castaño corto y unas cuantas arrugas a causa de su edad avanzada, nos hizo pasar y se aseguró de que estuviéramos cómodos.

Parecía una escena casi surreal ver a Tayce, la sarcástica y rebelde Tayce acostada sobre una camilla, con su blusa subida hasta el final de sus pechos dejando ver un nada abultado por el momento vientre bronceado. No podía contener la sonrisa, al igual que su novio, y toda su cara brillaba hasta sus ojitos marrones que mostraban que no podía contener su emoción. Su pelo marrón oscuro hacía un contraste fuerte con el blanco de la camilla, y era acariciado en un gesto nervioso por Jayden.

La mano de Scarlett no había abandonado la mía y a cada momento la apretaba más fuerte. Se mordía los labios y era, como siempre, la que más inquieta estaba.

La doctora hacía preguntas de rutina, en las que no estábamos muy interesados, e intentaba explicarle a la futura madre ciertos procedimientos o pasos a seguir. Finalmente, esparció sobre su estómago aquel gel, que siempre me habían explicado era gélido, y comenzó a apoyar el aparato conectado al ecografo. Instantáneamente, la pantalla que había estado apagada hasta aquel momento, inició a desprender la imagen de su utero y algunos pitidos y sonidos propios de este llenaron el anterior silencio.

Todos en la sala, menos la doctora, parecían estar conteniendo la respiración, demasiado ansiosos hasta para exhalar. Nos indicaron que aquellas pequeñas manchas que se veían en la pantalla eran el pequeño futuro bebé que era tan diminuto, que apenas alcanzaba a verse. Confirmo que realmente Tayce cursaba un embarazo de ocho semanas y no siete, y que el minúsculo individuo estaba en perfecto estado de salud.

La carita llena de lágrimas de Tay la hacía parecer más pequeña de lo que era, y hasta me pareció raro verla llorar, pero luego comprendí que la mayoría estaba así, excepto por Chad, Tyler, Charlie, Scarlett y yo quienes sosteníamos una sonrisa risueña. La pelirroja, cuyo cabello resaltaba como fuego en la sala blanca, trataba de contenerse a sí misma y a Logan.

- ¿Estás llorando? - me preguntó Scarlett, sorprendida.

- Tal vez - contesté, cuando sentí mis ojos ponerse húmedos.

No sabía por qué estaba tan conmovido, pero el momento había sido realmente emotivo y ver a Jayden no poder contener sus sentimientos realmente movió algo dentro de mi. Jamás me había importado demostrar mis emociones, si quería llorar lo haría, al igual que si quería gritar o sonreir, por eso no me privé de hacerlo en aquel momento.