Capítulo 15

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Itachi había despertado casi con el amanecer se sentía inquieto, la última semana sus hermanos se habían atenido a su orden de solo salir con él de la casa, lo que empezaba a resultar incomodo para ambos chicos, sobre todo para Sasuke el cual estaba impaciente por salir con Naruto en una cita. Y no era para menos solo podían verse en la escuela o los fines de semana que solían ir con Shikamaru a practicar.

Sabia que era cuestión de tiempo antes de que sus hermanos llegaran a su límite pero lo que más le mortificaba era que habían pasado varias semanas desde la última vez que su padre hubiese hablado con él, desde la noche que volvieron después de ser atacados en la calle ni siquiera le veía en el desayuno era como si supiera que le estaban evitando, tal vez fue demasiado obvia la mirada de resentimiento que le dedico aquella noche, no sabía pero aun era demasiado rápido para suponer que su padre no haría nada mas como la otra vez.

Incapaz de dormir más por sus preocupaciones se levanto y después de ducharse y arreglarse para ir a la universidad bajo a preparar su desayuno, sabía que a esas horas las doncellas de la mansión aun estarían dormidas ya que estaban acostumbradas a que los gemelos no desayunaran en casa y que él mismo prepararía su desayuno ellas se deslindaban de esa tarea.

Nunca imagino que se toparía con su padre en la cocina, cuando entro su padre estaba sentado leyendo el periódico con una taza de café caliente frente a él y como si se tratara de una ilusión vio a su madre con un delantal puesto cocinando lo que parecía ser el desayuno, se quedo parado justo en la entrada del lugar sin saber qué hacer.

-buenos días Itachi-kun –saludo su madre en cuanto le vio –si que madrugas ¿quieres desayunar?- pregunto mientras le miraba con una cuchara en la mano

Fugaku al escuchar que estaba ahí, bajo su periódico para comprobar su ubicación en la cocina y solo le miro escrutadoramente unos segundos para después tomar su taza de café y tomar un poco, el se inclino brevemente para saludarle con una reverencia pero no le dijo nada.

-si... muchas gracias – le respondió tardíamente a su madre que había puesto una taza de café para él en uno de los lugares vacios de la mesa.

-¿te gusta el café solo? O prefieres que le ponga crema o azúcar- pregunto contrariada la morena- me temo que no sé cómo te gusta

-sólo, está bien- respondió tomando asiento en la mesa- eso huele muy bien, pero parece que se va a quemar si no lo ves ahora mismo- dijo señalando la sartén que su madre tenía en el fuego, esta reacciono precipitándose sobre la estufa

-por eso te dije que no tenias que preparar nada...-le reprocho Fugaku a la mujer que aun se mantenía ajetreada con la comida

-¡no molestes! No es de todos los días ¡así que cállate! –Le respondió indignada- además no te quejaste cuando te preparé el café- comento esta vez despectiva

-soy perfectamente capaz de preparar mi propio café -rebatió el moreno volviendo su mirada a su periódico de nuevo indiferente

Por un instante aquella escena sumió en la melancolía a Itachi, sus padres parecían otras personas, así como estaban parecían una familia como cualquier otra que compartía el desayuno por las mañanas y sin poder resistirse se pellizcó así mismo en la pierna para saber si aquello no era un sueño, se sorprendió al sentir dolor y entender que en verdad pasaba eso. Comenzó a imaginar la escena completa, su hermana estaría junto a su madre sirviendo la comida para los gemelos riendo y bromeando entre ellos, su padre aunque serio reiría satisfecho de vez en cuando, serian al fin una familia pero aun así no podía creerlo, no debía, aquello que siempre deseo se volvía realidad ante sus ojos pero no lo era....

Acorde GemeloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora