Capítulo 10 Incontro in ritardo

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Notas:

Shinai: es una espada hecha de madera generalmente son usadas por delincuentes es muy similar a una katana, como la que usa Sasuke en el anime

BPM (Beats per minute): significa pulsos por minuto para la música ese es un rango bastante alto.

***

En la casa de los Namikaze nada en sí había cambiado. El ambiente se respiraba tranquilo y los mellizos se disponían a ir a sus habitaciones a ensayar, ellos tenían que practicar diario o de lo contrario perderían habilidad.

Era algo natural para ellos por lo que en realidad no tenían que hacerlo forzosamente. En la casa habían tres salas de música que estaban reforzadas contra el sonido por lo que una vez que entrabas no podías escuchar nada desde adentro hacia afuera y viceversa. Naruto e Ino usaban la misma sala para fines comunes pues Ino aprovechaba la música de Naruto como acompañamiento para su canto. Cuando comenzaban podían tardar practicando casi todo el día, pero ese dia solo habían prcticado por un par de horas. Justo cuando iban saliendo del cuarto de música se toparon con Iruka que se sorprendió por lo breve del ensayo.

-¿Ya terminaron de practicar?-Cuestionó curioso y sorprendido el moreno.

-¡Si! –Dijeron al unisonó ambos chicos mientras desviaban la mirada para evitar ser interrogados más tiempo, se sentían avergonzados pues ellos eran los primeros en reprender a cualquiera que se tomara a la ligera la música.

-....- El moreno noto la tención en ambos chicos, así que solo se limitó a sonreírles mientras les decía.

–Si van a casa de Shikamaru-kun asegúrense de que Kakashi no les vea, será muy complicado mantenerlo tranquilo-Dijo el moreno sonando un poco gracioso por el tono que usó.

*

Para los chicos la razón del comentario era desconocida, no imaginaban una razón por la que su padre se opusiera a que ellos visitaran la casa de Shikamaru. Era raro pensaban, pero para Iruka que conocía a su esposo mejor que nadie era obvio que saber que sus pequeños estuvieran creciendo no le hacía mucha gracia al pelo gris, pero eso era algo que los menores no tenían por qué saber.

Kakashi era muy infantil cuando se trataba de proteger a los rubios, para el seguían siendo unos niños inocentes e ignorantes acerca de muchas cosas pero era ovbio ahora que sus chicos estaban empezando a enamorarse e Iruka les apoyaría en todo, eventualmente Kakashi lo aceptaría pero tomaria algo mas de tiempo para él. Por lo que no pudo evitar recordar, la noche anterior en la que Kakashi con lágrimas de cocodrilo se le colgaba del cuello, mientras chillaba que sus bebés ya estaban creciendo, postura que adopto después de que Deidara se fuera a una fiesta solo con una de las cantantes de la presentación y que aun no había regresado pues se había quedado a dormir en la casa de sus anfitriones, sin añadir el que Ino y Naruto aparecieran un rato después en compañía del chico Nara.

Los rubios ajenos a los pensamientos del moreno se limitaron a mirar curiosos las caras que hacia su padre, siempre era raro verle en esa faceta pues siempre sentian que pasaba algo que ellos no notaban cuando su padre hacia esas caras. Sin más preámbulos se fueron a casa del Nara para encontrarse con sus nuevos amigos.

***

Mientras tanto cerca de la casa de los Uchiha. Los tres hermanos se habían detenido por su desayuno cotidiano en el combini que había de camino a casa de Shikamaru. Itachi les había regañado por comer siempre comida pre conservada, a lo que los gemelos le refutaron que era deliciosa y que tenía muchas proteínas, Itachi solo dejo salir un suspiro de frustración incluso si ellos tenían razón debían alimentarse bien, sus pensamientos se vieron interrumpidos debido a un grupo de matones que sin darse cuenta les habían rodeado, la gente que salía de la tienda volvió al interior asustados por la apariencia de los sujetos que les acechaban, algunos preocupados por lo que esos matones le pudiesen hacer a aquella jovencita que era acompañada por los dos jóvenes morenos, no podrían protegerla ellos les superaban en número pensaban aterrados. De entre todos ellos resaltaban cuatro, eran la misma basura que habian acosado a los rubios antes, al parecer no habian tenido suficiente con la paliza anterior. Solo que a diferencia de antes no venían solos...

Acorde GemeloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora