La fiesta había inundado inmediatamente sus oídos con música, la intensa luz que iluminaba el salón de baile por un momento lo cegó. Odiaba las fiestas. Alcanzo a notar como sus hijos menores se tensaban inmediatamente después de reconocer a su madre y a él. No era de extrañar esa reacción, pues sus tres hijos no la habían visto desde hacía más de un año, Mikoto se mantenía muy ocupada por los negocios de su editorial, había estudiado periodismo con la esperanza de convertirse en una corresponsal internacional, sueño que la llevo a crear una empresa editorial al no encontrar oportunidad en ninguno de los periódicos más reconocidos de Japón, y convertirse en la directora de la misma, razón por la cual rara vez la veían pero cada que regresaba a casa era como si solo se hubiese ausentado por un día, pues siempre saludaba a sus hijos como si estos no se sintieran como extraños cada vez que la miraban.
Estaba claro que para los tres chicos su presencia era irrelevante, pues desde muy pequeños se independizaron por la ausencia de su madre, en cambio la responsabilidad de educarlos había caído en su hija mayor, quien con ayuda de Itachi habían suplantado el papel de padres para los gemelos.
Pues los mismos respetaban más a su hermano que a él, Incluso si esto debería molestarlo, no lo hacía pues sabía que era lo mejor en esas circunstancias, el matrimonio que mantenía con Mikoto era solo de apariencia y ella misma lo aceptaba, tal vez en algún momento antes de casarse con ella imagino la pequeña posibilidad de ser una familia y de amarlo, incluso Mikoto se lo había insinuado un par de ocasiones, pero eso era imposible, el jamás podría corresponder ese sentimiento ahora muerto en su esposa.
***
Mikoto se había acercado a Itachi primero mientras este le sostenía la mano y depositaba un beso en ella acompañado con una reverencia de respeto, los gemelos más renuentes que obedientes, se acercaron unos minutos después de ser llamados por su hermano, ya que no habían reaccionado a la presencia de su madre. Fugaku llego justo a tiempo para escuchar el estoico saludo de ambos chicos y la reticencia que mostraron al notar su presencia, no pasó desapercibida para su madre. Era más que evidente que no lo soportaban.
-Ha sido mucho tiempo, madre...- Dijo Sakura mientras se inclinaba en una reverencia, Sasuke repetía el proceso mientras decía- No esperábamos verla esta noche...
-Era evidente, que no...- Respondió algo melancólica por la indiferencia e incomodidad de sus hijos para con ella, no era fríos, pero si distantes y eso a pesar de ser su culpa dolía, lo peor de todo era esa asquerosa actitud imperturbable que los hacía tan parecidos a su padre, tan arrogantes y seguros que era imposible penetrar a la primera la pared invisible que les separaba.
Comenzó a recordar las acciones que desencadenaron las actitudes de sus hijos de ese modo...
**
Cuando se embarazo por primera vez de su esposo su ilusión de crear una familia enseguida se destruyó, ya que Fugaku le dijo en incontables ocasiones que ya era hora de que hubiera un heredero, Fugaku jamás le había prestado ninguna atención mientras estuvo en cinta con saber que su heredero crecía sano era más que suficiente, y ella misma comenzó a desarrollar cierta indiferencia por su hija cuando esta nació inmediatamente fue dejada a cargo de una institutriz que la crio y se ocupó de cuidarla mientras, ella se dedicaba a alcanzar su sueño, abandonándola en el proceso.
Cuando la volvió a ver, la niña tenía cuatro años, era preciosa de cabello y ojos negros como la noche rasgos que compartían su esposo y ella en la niña y por un breve instante se sintió orgullosa de que fuera su hija, pero su perpetua lejanía la hizo darse cuenta de que la niña no la llamaba "mama" sino que se dirigía a ella como Oku-sama*, era formal con ella pero jamás sintió la necesidad de acercarse a ella por alguna caricia, en cambio las recibía todas de su institutriz, y supo que era demasiado tarde para recuperar a su hija, por lo que decidió intentarlo de nuevo con Itachi lo mantuvo con ella a donde iba, pero no paso del primer año de vida del niño, pues su vida ajetreada no le permitían cuidar de él y nuevamente lo dejo a cargo de la misma mujer que había cuidado de su hija, pero está enfermo y pronto se vieron con la realidad de que había muerto, después de todo era una mujer mayor, sus hijos tenían 6 y 2 años respectivamente cuando ese evento desafortunado aconteció sobre sus vidas, la lloraron, la enterraron y entraron en duelo como si en realidad fuera su propia madre la que había muerto.
ESTÁS LEYENDO
Acorde Gemelo
FanfictionPara Sasuke y Sakura la música no solo era un tabú del cual no se debía hablar en presencia de su padre, ni tampoco significaba una forma de revelarse a él. Siendo gemelos y los menores de la casa Uchiha no habían muchas cosas de las que ellos debie...