MY BLOOD |NarryStoran|

32.

— Niall tienes que ir a recoger tus cosas de ese departamento — hablo Harry persiguiendo a Niall por el pasillo de su casa.

— Clyde estará allí y no creo que sea buena idea — se dio la vuelta para mirarlo.

— Yo estaré contigo ángel, no te pasara nada — mostró una sonrisa.

— Hazz.... y-yo...

— Iremos hoy y no quiero un no, por respuesta — dejo un beso en la mejilla del menor y se dirigió a la cocina.

Habían pasado varios días desde que Niall salió del hospital, se encontraba viviendo con Harry desde entonces y ni siquiera pasó por el departamento.

Pero hoy lo haría y estaba muy nervioso, tenía miedo por Clyde, lo conocía perfectamente y estaba seguro que no lo dejaría ir tan fácilmente, temía que algo le pase a Harry.

Unas horas después ambos se encontraban en el auto dirigiéndose al departamento de Clyde por las cosas de Niall.

— H-Harry volvamos a casa, no quiero estar aquí — hablo en cuanto Harry estaciono el auto.

— Ni, no te preocupes, será rápido, si quieres solo sacamos ropa y luego venimos por tus cosas.

— Tengo miedo Hazz.

— ¿Y eso? — lo miró y tomó la mano de Niall — Estoy contigo Niall, nada va a pasarte.

— Tal vez no a mi pero p-puede pasarte algo a ti... Harry, Clyde es un narcotraficante peligroso, tiene varias armas en el departamento, las guarda debajo de la cama y tengo miedo que p-pueda pasar algo.

— No pasará nada ángel — acarició su mano — Vamos rápido antes que se haga tarde — dijo y salió del auto junto con Niall.

Después de unos minutos llegaron al último piso, en donde se encontraba el departamento de Clyde, no sabían si tocar o no la puerta, pero sabían que si tocaban no abriría o no los dejaría entrar así que decidieron entrar sin más.

Cuando entraron al departamento estaba un desastre, había muchas cosas tiradas en el piso destrozadas, no había rastro de Clyde por ahí así que pensaron que había salido o algo por el estilo así que se adentraron al departamento y Niall se dirigió a la habitación para sacar su ropa, mientras que Harry se quedó en la sala cuidando la puerta si es que Clyde llegara.

Al entrar a la habitación se dirigió al armario, comenzó a sacar toda su ropa y la puso en una maleta que tenía en el mismo armario.

— Oh, pero mira a quien tenemos aquí — Niall se quedo quieto en su lugar sin moverse. — Te estuve extrañando amor — los pasos de Clyde se acercaban cada vez más a Niall.

— Clyde....

— ¿Dónde mierda estabas? — lo agarró del cuello y lo empujó a la pared acorralándolo.

— Y-Yo.... est...estaba... — hablo apenas y no pudo completar la frase ya que había comenzado a toser, el agarre de Clyde era fuerte.

— ¿Qué es todo esto? — dijo mirando su maleta — ¿Piensas irte y abandonarme? — apretó el agarre en su cuello.

Niall no respondió, pues tampoco podía con el agarre de Clyde en su cuello, la respiración le estaba faltando y cada vez comenzaba a ponerse débil.

— ¡RESPONDE INFELIZ! — lo agarró del cabello y lo tiro a la cama, Niall comenzó a toser desesperadamente.

— C-Clyde por favor no me hagas dañ... — antes que termine Clyde se subió en su encima y le dio una bofetada.

— No voy a dejar que te largues de aquí como si nada ¿Me escuchaste? — Las lágrimas de Niall comenzaron a salir. —  ¿¡ME ESCUCHASTE!?

— Si Clyde —- hablo llorando.

— Bien, más te vale idiota, que conmigo no se juega — cuando termino de hablar la puerta se abrió.

— Ni, ya acabast.... — Se callo al ver a Clyde encima de Niall — ¡Suéltalo! — ordenó

— Oh, Incluso viniste con tu nuevo amante... ¿¡NO ES ASÍ!? — dijo y comenzó a golpear a Niall.

— ¡N-No Clyde por favor déjame! — gritó Niall.

— ¡¡¡DÉJALO IMBECIL!!! — Harry corrió hacia Clyde y lo tiro al suelo.

— ¡ERES UNA MIERDA NIALL, UN MALDITO INFIEL ASQUEROSO! — gritaba Clyde intentando soltarse de Harry, quien lo estaba agarrando en el suelo.

— Perdóname Clyde.... y-yo te am...— antes que Niall acabara, Clyde logró zafarse de Harry y busco algo debajo de la cama, en cuanto lo encontró se levantó y apunto a Harry con un arma.

— Niall sal de la habitación — pidió Harry

— ¿Q-Qué? ¡No! — Dijo mirándolo, no iba a dejar que le pase algo.

— Sal Ahora.... — lo miró — Por favor — Niall dio una última mirada a Clyde y salió con las lágrimas cayendo por sus mejillas.

Al salir corrió a agarrar el teléfono y llamar a la policía, tenía miedo, mucho miedo y no sabía si hacerlo o no, aún quería a Clyde, pero en ese momento Harry le importaba más así que lo hizo...

— Clyde baja el arma — pidió Harry acercándose a Clyde con cuidado, Clyde comenzó a reírse.

— Pensé que éramos amigos Styles, no era necesario traicionarme de esa manera.

— No lo quería hacer.... Clyde escúchame.

— ¿Ah no? ¡TE DEJÉ A NIALL PARA QUE LO CUIDARAS, NO PARA QUE TE LO COJAS!

— Clyde.

— ¡CONFIÉ EN TI MALDITA SEA! — cargo el arma — Le metiste cosas a la cabeza para apartarme de él ¿No?

— No lo h...

— Pero no dejare que te lo lleves, cometiste un gran error en enamorarte de él — Harry miró a otra parte evitando mirar a Clyde — ¿Crees que no me di cuenta?

— Eres un peligro para él

— ¿Y crees que tú no? — comenzó a reírse como psicópata. — Mataste a tu prometida junto con tu hija no nacida, hiciste eso para librarte o q...

— Cállate Clyde — lo miró molesto — Yo no las mate, fue un accidente — En ese momento, las palabras de Clyde habían lastimado mucho a Harry, sus lágrimas estaban a punto de salir, pero tuvo que ser fuerte y no mostrarse vulnerable a los ojos de Clyde.

— Los accidentes no ocurren, espero que te hayas despedido de Niall porque de aquí no sales vivo — segundos después se escuchó un disparo.

Cuando disparó Harry se había movido a un lado para evitar que le dispare, en cuanto lo vio la puerta se abrió rápidamente.

— ¡Policía, no se muevan! — entraron tres policías con armas apuntando a ambos.

Se acercaron a Clyde ya que el tenía el arma y lo agarraron bruscamente evitando que dispare de nuevo.

— Esto no se va a quedar así Styles — dijo mirándolo con odio mientras le colocaban las esposas detrás de su espalda. — ¡Voy a vengarme! — gritó mientras lo sacaban de la habitación.

— ¿Hazz estas bien? — Niall corrió hacia Harry y lo abrazo.

— Si Ángel, ¿Tú estás bien? — lo miró acariciando la mejilla del menor.

— Si — asintió con una sonrisa sincera y volvió a abrazarlo.

N.S