CLOSE YOUR MOUTH //KookV

CAPÍTULO 4

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Cuando llegó a la cafetería, vio a Jimin y a Sooyoung en una de las mesas más alejadas, sin embargo, decidió no acercarse, debía hacerle pensar que no lo perdonaría así de fácil como pensaba.

Cuando terminó el almuerzo se dio cuenta que todos se habían marchado.

Corrió hasta su casillero y luego hacia su clase respectiva.

Entró silenciosamente, esperando que con suerte el profesor Min no lo notara, pero no existía algún universo alterno en el que este pasara por alto su tardanza.

--Kim --Min pronunció su nombre sin siquiera girarse y Taehyung solo pudo pensar que ya lo esperaba.

--En efecto --respondió el chico pelirrojo mirando a su tan querido profesor. Nótese el sarcasmo, claro.

--No es necesario que entre de esa forma, que quede claro que lo vi apenas puso pie dentro de mi salón de clases --sonrió fingido--. Que no vuelva a ocurrir o tendrá consecuencias para usted.

--Como sea --dijo Taehyung restándole importancia. Min no era su profesor favorito, no era el favorito de casi ninguno, pero su clase y su forma impecable de enseñar era la razón de que aún tomaran su clase.

--¿Qué dijo?

--Que lo lamento.

Dicho eso, Taehyung caminó entre los estudiantes y los asientos, uno al lado del otro. Todas ocupadas, en el fondo del salón había una silla vacía, se dirigió hasta ella,pero algo lo dejó perplejo.

Jeon Jungkook.

¿Debía compartir aire con él? Aún su rostro se veía hinchado, y aquello provocó que Taehyung sonriera, después de todo, Jimin había hecho un buen trabajo.

--¿No piensa sentarse? --reprochó Min, no tuvo otra opción que sentarse junto a él. Ignoró su mirada como pudo y se dedicó a tomar apuntes en la libreta en sus manos.

Cuando supuso que había escrito lo suficiente, se giró hacia el pelinegro, tal vez intentando encontrar aquello por lo que lo consideraban superior.

No lo encontró.

--Soy atractivo, ¿o no? --preguntó Jungkook y el pelirrojo estuvo a nada de soltar una carcajada.

--Nunca pensaría así.

--¿Quieres apostar?

"A este paso, morirás sin haberte arriesgado a nada"

Sus palabras permanecían en su mente como si fuera el recuerdo de algunos días. Iba hacerlo.

--Bien --sonrió--. Ni siquiera tienes que intentarlo, será una pérdida de tu valioso tiempo.

--Está es mi propuesta, si logro enamorarte en tres meses, tendrás que ser mi esclavo por lo que resta del año.

Jungkook solo quería humillarlo, hacer que todos vieran lo débil que era ante él, necesitaba ver más de aquel rostro dolido.

--Pero si pierdes me darás tu auto --continuó Taehyung y el pelinegro estuvo a punto de contradecir, pero estaba demasiado seguro de que ganaría. ¿Qué tan difícil podía ser enamorar a Kim Taehyung? Uno más del montón pensó Jungkook.

--Trato hecho --el pelinegro le dio la mano, y el otro correspondió el acto.

"Si tan solo vivieras la vida al máximo"

--Hecho.

Cuando ambos pusieron atención a la clase, notaron que Yoongi los observaba fijamente.

--¿Quisieran pasar a resolver el problema del pizarrón?

--No, gracias. Estamos bien --respondió Jungkook por ambos, recibiendo una mirada desaprobatoria de Min.

--Jeon, le recuerdo que soy su mayor, más aún su maestro, y por lo tanto debería mantener un lenguaje apropiado cuando hable conmigo --suspiró--. Téngalo en cuenta la próxima vez --tomó una pluma roja e hizo un trazo en el cuadernillo.

--Como sea --dijo el pelinegro. Sí, ellos deberían dejar de agotar a Min Yoongi.

--¿Qué dijo?

--Que lo lamento --Jungkook repitió lo que antes fue dicho por el pelirrojo y todos en el salón rieron.

Yoongi iba decir algo más, pero la campana sonó anunciando la salida.

Taehyung tomó sus cosas y salió del salón, al igual que Jungkook, pero la secretaria del director los detuvo y les pidió que la acompañarán a la oficina de este.

Ambos siguieron a la mujer a través de los pasillos hasta el lugar. Cuando llegaron, descubrieron que Jimin ya se encontraba ahí y el director lo miraba fijamente.

--¿Quisieran decirme el porqué creen que están aquí? --habló el director con voz tranquila.

--Taehyung no hizo nada malo, esto es absurdo --replicó Jimin.

--Tienes razón, Park, pero está involucrado en lo que pasó, por lo que escuché fue la razón por la que pelearon, ¿cierto?

--Lo fue --habló serio Jungkook,  mirando de reojo a Taehyung, quien solo desvió la mirada, sabía que allí mismo Jungkook tendría que explicar aquellas razones.

Y pasó como Taehyung había predicho.

--Este idiota se aprovechó de mi amigo --reprochó Jimin acercándose a Jungkook amenazante.

--Él se dejó --dijo haciendo la misma acción mientras eran observados por el pelirrojo y su padre desde el escritorio.

--No tuvo otra opción.

--¡Basta! --gritó Taehyung separándolos con sus brazos, lo que menos quería era que empezara otra pelea por su culpa.

Los tres se quedaron en total silencio esperando que el director diera la última palabra.

--Lo tengo --dijo el mayor chasqueando sus dedos.

--¿Qué cosa? --preguntó Jungkook.

--Limpiarás la cafetería por una semana. Y tú, Jimin, ayudarás con la preparación del evento de la próximo mes --habló y sin reclamar los tres se marcharon con rapidez de su oficina, después de todo el sábado de Jimin había sido arruinado y Jungkook, como ya esperaba, recibió el castigo del castigo.

--Tae --lo llamó Jimin, el pelirrojo detuvo sus pasos mientras sacudía el cabello de su mejor amigo.

--¿Aún estás enfadado? --preguntó el de cabellos rubios, pero Taehyung negó.

--¿Pizza?

--Pizza --ambos chicos sonrieron y Jungkook solo pudo pensar que debía seguirlos, saber donde vivía el pelirrojo sería interesante y quizás lo ayudaría a idear su primer intento para conquistarlo.

♧

--¡Kim Taehyung! --gritó NamJoon,entrando a la habitación del pelirrojo sin tocar.

--¿Qué pasa, hyung? --preguntó somnoliento, acababa de despertar debido a los gritos de su hermano.

--Hoy pasarás la noche solo, permitiré que Jimin se quede a dormir. El almuerzo está listo, solo debes recalentarlo. También dejo dinero. Y por último, ya lo sabes...

--"Nada de chicos, además de Jimin" --pronunció el menor imitando la voz de NamJoon.

--Perfecto --dijo en una carcajada para luego acercarse y dejar un beso en la mejilla de su hermano, quien salió corriendo. Se le hacía tarde.

--¡Es hora!

--¿Videojuegos? --preguntó Jimin del otro lado de la línea, habían estado planeando lo que harían apenas se enteraron que NamJoon pasaría la noche afuera.

--Y mucho alcohol. ¿Te quedarás a dormir?

--Claro, primero debo pasar por la biblioteca a devolver unos libros que olvidé, estaré ahí en 20 minutos.

Mentir no estaba bien.

--Bien.