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--¿Qué es amor, Jimin? --susurró Taehyung con la mirada en sus dedos, sobre la taza en sus manos--. ¿Cómo sé si amo a alguien? --se corrigió.
--Amor es solo una palabra, ¿sabes? --dijo, sin prestarle demasiada atención a la conversación porque Taehyung no parecía muy interesado en ello-- Para mí, amor es sentir. Es curioso en realidad porque se lo pregunté a Yoongi, después de una noche de sexo y dijo que amor era pasión. Se lo pregunté a NamJoon también, luego de una siesta y dijo que amor era satisfacción.
--No lo entiendo.
--Todos tienen una perspectiva de amor distinta, una situación y un pasado diferente. ¿Qué es amor para ti?
El pelirrojo le sostuvo la mirada y Jimin detuvo la caricatura mostrándose en la pantalla de su móvil. Sintiendo al menor acurrucarse a su lado, aún con la taza de café en sus manos.
--No lo sé, Jimin. ¿Cómo podría saberlo?
El rubio negó.
--¿Qué hay de NamJoon hyung y yo? Amor fraternal, Taehyung. Muy independiente del tipo de amor que sientas ahora, gozaste de uno siempre.
Jimin suspiró, rodeando al menor con uno de sus brazos cuando supo que este no tenía intenciones de hablar, pero sí que esperaba que el rubio continuase.
--El amor que siento por ti es diferente al que siento cuando Yoongi está cerca porque hay tipos de amores, Taehyung, y no hablo precisamente de los de preparatoria --rió, sintiéndose en paz al ver al menor sonreír y removerse hasta hallar un lugar cómodo sobre sus piernas.
Jimin le arrebató la taza blanca antes de sostener ambas manos y ¿por qué no decirlo? Taehyung se había convertido en su prioridad ese último mes.
El pelirrojo llevó las rodillas a su pecho, encogiéndose ante el tacto directo en la piel, manos frías. Manos como las que abusaron de él esa tarde.
Suspiró, no alejándose del rubio porque era algo necesario si tenía pensado volver a la universidad en dos días, aunque sólo se tratara de una sugerencia por parte de su doctora durante su última sesión.
--Dijo que creía amarme. ¿Cómo pudo incluso acercarse a esto? --suspiró, no siendo necesario que se señalase a sí mismo para hacerle saber al rubio de qué se trataba--. Y no importa en realidad si no fue una pregunta porque yo debí darle una respuesta. Quizá es la razón por la que no ha llamado y yo... --contuvo el aire--. ¿Si ya es muy tarde y dejó de sentirlo? Sé que me aseguró que nada había cambiado, pero ¿cómo puedo creerle si siento tanta repugnancia por mí mismo?
--No puedes, por eso debes superar esto primero, ¿bien? Y te prometo que todo acabará pronto. Iremos a la playa, compraremos mucho helado y quizá tú y Jungkook puedan tener un final feliz en algún momento, pero no ahora porque debes curarte para no lastimarlo y él probablemente deba deshacerse de aquella duda antes de intentar algo. ¿Cómo suena eso?
El pelirrojo asintió, consciente de que sus ansías por obtener algo de Jeon Jungkook podían esperar, pero no de las lágrimas que escaparon de sus ojos por razones que no pudo entender inmediatamente.
Verlo, quizá sentir su toque por encima de la ropa una última vez. Era lo único que deseaba y nada más que eso.
Y probablemente no debería llorar frente a Jimin, quien ya no se sentía capaz de escuchar más llanto esa tarde.
Presionó los labios, se suponía que era el soporte de Taehyung, no podía permitir que sus sentimientos interfiriesen en el consuelo que estaba brindando.
--No más, ¿bien? --limpió con la yema de sus dedos las lágrimas en las mejillas contrarias--. NamJoon está convencido de que mejoras cada día, deja que goce de esa felicidad.
La puerta fue cerrada tras el hombre, quien sonrió al verlos sobre el sofá, alzando la bolsa de comida china en sus manos.
NamJoon se estaba haciendo cargo de Minjae, para ser más específicos, de la demanda por abuso sexual que hace algunas semanas pudo ejercer en su contra. Había incluso hablado con el director Jeon para que las calificaciones de Taehyung no se vieran frustradas en toda aquella situación. Estaba tan agotado.
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--Siempre es un gusto verte --sonrió la rubia, apartando el mechón sobre su rostro y sacudiendo las manos frente al rostro del pelinegro al no recibir respuesta.
--Me gustaría poder decir lo mismo.
Jungkook bufó, siempre dando un paso atrás cuando la chica amenazaba con invadir su espacio personal.
--Esta mañana oí que abrió una cafetería cerca de aquí. Me dijeron que es maravillosa y creí que podríamos ir a... --sé detuvo al notar la falta de atención del azabache en ella. Bufó, encontrando los ojos del menor en el pasillo siguiente.
El pelinegro lanzó sus libros al casillero frente a él y llevó las manos a su propio cabello para tirar de este en cuanto la campana dio por terminada su jornada.
--¿Qué se supone que haga? --se burló de sí mismo. Demasiado turbado cuando Taehyung captó su mirada y alzó una ceja hacia él.
Jungkook llevó una de sus manos a su sien y le dedicó un saludo militar al joven, quien sonrió apenas antes de seguir en lo que hacía.
El pelirrojo dejó salir un suspiro cuando sintió su corazón golpear con fuerza en su pecho, acomodando su largo abrigo porque aunque estuvieran en verano, él sentía el frío golpearlo.
--Deténme, Manoban --susurró el pelinegro, sintiendo los hombros tensos de repente--. Estoy a punto de hacer una locura.
--¿Debería? --la chica presionó los labios, conteniendo el aire en sus mejillas cuando Jungkook negó con la mirada fija en el lugar donde el pelirrojo había desaparecido.
Jungkook corrió hacia el pasillo, hallando la evidente cabellera roja del menor por sobre todos aquellos estudiantes, rodeados de personas que no dudaría en juzgar sus acciones.
--Jung...
Jeon rodeó las caderas contrarias con una de sus brazos, tomó el mentón del chico y guió su rostro a la dirección correcta para juntar sus labios y saborear aquello que desplazaba a cualquier otro placer que Jeon Jungkook pudiera llegar a sentir.
Y poco fue decir que sintió al menor deshacerse en su tacto, sobre sus labios y en su respiración.
"¿Qué es amor para ti?"
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CLOSE YOUR MOUTH //KookV
Fanfic--Prométeme que vas a estarlo --habló con dificultad mientras oía sus pieles chocar bajo las sábanas. --No puedo. Taehyung se retorció en el colchón con las piernas separadas y lágrimas amenazando con seguir cayendo. --Solo... Tú --el pelinegro fue...