Katherine sufrió bullying en su anterior escuela, y prometió núnca más dejarse pisotear.
Logan, el maldito bad boy que detesta Katherine, odia a todo el mundo pero Kate es una gran excepción.
Ellos son opuestos, en todos los sentidos.
Pero en esta h...
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Mí cara quedó perpleja al leer el reto, y por eso, Logan vino rápidamente a mí lado. Yo le tendí mí papel para que lo leyese, él apretó su mandíbula y me observó.
— No la harás.
— No lo haré.— afirmo. Él asiente y camina hacia Sam, la coordinadora del evento, la cuál los ojos se le desorbitaron al darse cuenta que el mísmismo Logan Brown estába a su lado. Ellos tienen una conversación bastante extensa, durante todo ese tiempo, mis amigas cumplieron sus retos; Lou tuvo que beber 5 shots de tequila, Clark tuvo que quedarse en ropa interior por cinco minutos en una habitación con un desconocido, Karen tuvo que probar una mezcla de muchos tipos de alcohol en menos de 10 segundos, a Sav le tocó la tarjeta dorada, que significa que, tendría alcohol gratis por toda la noche.
Logan, al terminar de hablar con Sam, vino hacia mí, y después de darme un corto beso, aclaró su garganta.
— Tienes que ponerte la pulsera de soltería o te vas de aquí.— dice con voz tajante. Yo abro mis ojos, ¿tan importante era ésta fiesta?.
Es una simple pulsera, prefiero mil veces ponerme una puta pulsera a que tener que llamar a mí ex, que por cierto, está loco.
— Está bien.— digo tranquila. Él frunce el ceño y se sacude el pelo nervioso.
— Kate, no sábes lo que podrían hacerte si tienes esa pulsera.
— ¿Y si yo no quiero?
Logan larga una risa fría.
— Te lo harán igual.
Antes de que se marche, agarro su hombro y giro hacia mí. Quedámos muy cerca, mí vista se desvía a sus labios deseables, pero no, ahora tengo que hablar y no besar.
— Estaré siempre contigo, si tengo a Logan Brown al lado, no creo que quieran poner su vida en peligro.— la respiración de Logan, la cuál estába rápida hace unos segundos, se estabilizó y me tendió una sonrisa.
— Está bien.— me da un corto beso y vamos hacia Sam. Tenía la maldita pulsera en sus manos, ella me parecía buena onda, pero la sonrisa falsa que tiene me hizo dar cuenta que no lo era, para nada.— Pónle la pulsera.— ordena fríamente.
— Muchos chicos me han pedido que la tengas.— me guiña el ojo y yo rodeo los ojos.
— Lástima que sigo estando de novia con Logan, ¿verdad, amor?— le digo acariciando sus músculos, Sam parece que le saliese humo por las orejas, y Logan me larga una sonrisa extraña al escuchar que le dije "amor".
— Claro que sí, bebé.— mí corazón se estremece siempre al escuchar esa palabra, lo mismo me sucede cuándo me dice Bruja, no sé todavía la razón.
— Aquí tienes.— dice Sam tajante, me coloca la pulsera y me la ata tan fuerte que hace que pegue un grito ahogado.
— Sál, Samantha.— dice Logan poniéndose en el medio de las dos. <<¿Acaso la conoce?>> me pregunto al ver como le hace caso al instante que mí novio le ordena. Logan se acerca hacia mí y me alivia un poco el dolor cuándo me desata un nudo de la pulsera.— Era una amiga mía.— larga después de un buen tiempo.