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Natalia:
Un brazo de Alba impactando fuertemente contra mi tabique nasal fue el causante de mi desvelo a las 9:30am.

No sabía que fuese tan inquieta durmiendo pero una vez más me sorprendió,  estuvo toda la noche moviéndose sin parar. Para nada había sido molesto ni había interrumpido mis sueños pero pude sentir cada movimiento pues en varios de ellos su codo impactaba con mis costillas levemente.

Sonreí al contemplar su perfil iluminado por la luz que se colaba entre las rendijas de la persiana. Un juguetón mechón de su sedoso cabello caía delicadamente sobre su pequeña nariz y sus labios no paraban de incitar mi locura cuanto más tiempo dedicaba a contemplarlos.

-Que ganas tengo de mirarte a los ojos y decirte que me encantas; ganas de sentir tu piel, de abrazar tus miedos , de besar tu alma, ganas de que vengas y te vengas , de que duermas en mi boca ,de que bailes en mi cama , por que contigo dan ganas de todo-susurre acariciando el contorno de su mandíbula.

Lo que ella no sabía es que todas y cada una de las palabras que salían de mi boca eran sinceras.

Alba:
El pelo de mi cuerpo se erizo con sus palabras y su tacto sobre mi piel.

Si ella supiera las ganas que tenía de cumplir cada deseo de aquella lista. Las ganas de acariciarla sin ropa de por medio y morir en el mapa de sus labios eran más grandes cada minuto que pasaba junto a ella y eso me preocupaba pues no quería generar grandes sentimientos.

-Buenos días-susurre al cabo de un rato.

-Hola-añadió en el mismo tono.

Contemplar sus rostro con rastro de sueño fue la mejor estampa con la que jamás había podido deleitarme.

"¿Cómo he podido vivir sin esto?"Pensé durante un rato.

-¿Quieres ir a desayunar?-pregunté.

-Tengo que marcharme pronto, pero podemos desayunar aquí si quieres -la primera sonrisa del día que dibujaron sus labios me la dedico a mi y mi corazón saltó en mi pecho.

Asenti con una sonrisa y me levanté para dirigirme al baño.

Estuve al menos 10 minutos arreglando mi pelo y mis ojeras causadas por el TFG que me traían de cabeza.

Al llegar a la cocina Sabela y Natalia desayunaban entre risas mientras devoraban una tostada de aguacate.

-Hola-dije entrando directamente a la cafetera.

Sabela sonrió mientras miraba como Natalia se aproximaba a mi y dejaba un beso sobre mi coronilla a la vez que abrazaba mi cuerpo contra su pecho.

-No sabía que podías ser tan bonita desde por la mañana -susurro para que sólo yo pudiese oírlo.

La mire mientras en un acto involuntario me mordi el labio inferior.

-Te he dejado echa tostadas y zumo-dijo rápidamente apartando la vista de mis labios.

Sonreí por la rojez de sus mejillas y asenti.

-Me encantaría poder acompañarte pero debo marcharme ya , mi familia viene de visita y ya sabes como es mi madre con estas cosas -añadió cogiendo su chaqueta del perchero.

La acompañe hasta el rellano de la puerta y la mire aproximarse al ascensor.

-¿Te vas sin más?-pregunte apoyada contra el quicio de la puerta.

Me miró con una sonrisa tímida en los labios y llegó hasta mi para dejar un dulce beso sobre los míos.

-Te llamaré luego Alba, estoy deseando volver a estar contigo-susurro sobre mi boca.

Clave mis ojos en los suyos intensamente y una noria de emociones sacudió mi estómago.

-Y yo-murmure.

Al cabo de unos segundos se perdió tras aquella caja de metal dejándome con la sensación de vacío que tanto odiaba sentir.

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Hola

¿Habrá charla Alba- sabela?
¿Volverán a verse pronto?
¿Qué hará Alba respecto a la declaración secreta de Natalia?

Sólo dime que me quede , pero hazlo por que si no tendré que irme.

Descubramoslo

-BLUE💙

TODO CAMBIÓ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora