Lazo Accidental [Junghope]

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Jungkook salió del aula caminando hacía la cafetería, pues estaba completamente seguro de que Yugyeom se encontraba allí y no se equivocaba, el bonito beta de cabellera grisácea se encontraba en una mesa charlando con sus amigos bromeando bastante animado y una sonrisa se dibujó en los labios del castaño, Yugyeom era un chico bastante lindo, y seguramente muy pronto encontraría a alguien que se sentiría feliz de compartir el resto de sus días con él.

Soltó un suspiro y caminó hasta la mesa en la que se encontraba el chico, las risas de sus amigos cesaron quedando solo sonrisas burlonas hacía el joven beta.

—Yugyeom, ¿podemos hablar?—Preguntó rascando su nuca como muestra de nerviosismo.

—Por supuesto—Respondió el beta poniéndose de pie, salieron de la cafetería y caminaron hacía el aula de historia, ya que le había comentado a Hoseok que en cuanto terminará de hablar con el peligris lo esperaría allí.

—¿De qué quieres hablarme?—Preguntó el joven con una pequeña sonrisa y un atisbo de curiosidad.

—Bueno, yo...—Soltó un suspiro.—Ya no podemos seguir saliendo—Expresó con simpleza, él nunca había sido bueno con las palabras, además, el nerviosismo que sentía, no estaba ayudando en absoluto.

—¿Qué? ¿por qué?—Preguntó su contrario mostrando decepción en su expresión.

—Uh, yo estoy cortejando a Hoseok—Explicó—¡El acepto ser mi omega!—Bien, quizás el tono emocionado y la sonrisa no habían sido la mejor opción.

—¿Hoseok?—Cuestionó Yugyeom cambiando su semblante decepcionado a una autentica cara de molestia.

Yugyeom y Hoseok siempre se habían llevado muy bien, ya que el omega sabía a la perfección los sentimientos del beta hacía Jungkook e incluso le había ayudado en algunas ocasiones, sin embargo, aquello cambió desde el momento en que Jungkook marcó al omega pelirrojo. En esos momentos Yugyeom estaba odiando con todo su ser al omega que en algún momento consideró un amigo.

—Pero él no te gusta, soy yo quien te gusta—Fue lo único que dijo el beta con un tono bastante molesto.—Lo que estas diciendo no tiene sentido, ¡él es solo tu mejor amigo!—Casi grito mientras su cara tomaba un color rojo.

—Si Yugyeom, eres un chico muy lindo y divertido, no puedo negar que me gustas—Una sonrisa victoriosa se dibujó en los labios del beta.—Pero no te amo—La sonrisa se borró casi al instante.—Amo a Hoseok—Confesó, y no podía sentirse más aliviado de admitirlo finalmente.—Seré sincero contigo, no estoy consciente de en que momento sucedió, solo sé que quiero estar con él—Sonrió cálidamente.

—No Jungkook, nosotros podemos intentarlo, yo soy mejor para ti que él—Las palabras de Yugyeom sorprendieron a Jungkook.

—Vete antes de que sea tarde—La advertencia de su lobo fue fuerte y clara, sin embargo, Jungkook no la escuchó.

—No Yugyeom, mi lobo no se siente atraído por ti, eso solo sería una perdida de tiempo para ambos, gracias por todo y me disculpo por haberte hecho perder el tiempo—Se disculpó con bastante calma.

—Muy bien, te aplaudiría, pero no es momento, repito, V-Á-M-O-N-O-S.—Volvió a insistir su lobo.

Yugyeom no dijo nada, en cambio se acercó a él, tomó las mejillas del castaño entre sus manos y plantó un beso en sus labios, Jungkook estaba bastante sorprendido dando la espalda a la puerta, el único que se percató de que había sido abierta fue Yugyeom, quien al ver al pelirrojo, sonrió en sus adentros, la puerta se cerró y fue separado del alfa de un empujón.

Miró a Jungkook sorprendido, dándose cuenta de que sus ojos habían cambiado de su hermoso color negro a un brillante color lila.Un gruñido bastante potente le hizo temblar.

—No vuelvas a intentarlo o te juro que me olvidare de tu condición de beta y voy a acabar contigo.—Obviamente no era Jungkook, sino su parte lobuna, Yugyeom asintió ante la amenaza y salió sintiendo sus piernas temblar, pero aún así se permitió sonreír sintiéndose satisfecho.

Conocía el carácter de Hoseok y sabía que no permitiría que Jungkook volviera a siquiera respirar el mismo aire que él, si no podía tener a Jungkook, entonces, Hoseok tampoco lo tendría.

[ ... ]

El timbre que indicaba el final del receso sonó y Hoseok no llegó al aula, Jungkook se encontraba nervioso, confundido y preocupado, pues, sentía que algo no andaba bien. Salió del aula de historia y caminó hacía los casilleros en espera de ver al omega allí, cosa que no sucedió, en su lugar se encontró a Minho, quien parecía que se le lanzaría encima en cualquier momento.

—Echaste todo a perder, espero que estés feliz—La mirada cargada de odio que le dedicó Minho era sorprendente, sin embargo, a pesar de que Jungkook esperaba discutir con aquel alfa, este solo se marchó, proporcionándole un empujón.

Decidió no tomarle importancia y casi corrió hacia el aula de literatura, necesitaba ver a Hoseok y contarle que ya había dejado las cosas claras con Yugyeom, pero grande fue su sorpresa al llegar al aula y notar que el pelirrojo no estaba allí.

—Hola Jungkook—Saludó Jimin con una sonrisa relajada mientras abría su cuaderno.

—Hola Minnie, ¿sabes dónde esta Hoseok?—Preguntó preocupado, incluso se había percatado de que la pareja del omega no estaba allí, cosa que le sorprendió bastante.

—Lo vi hace un rato, se veía bastante mal, Yoongi se quedo con él, no te preocupes.—Le respondió Jimin con simpleza volviendo a lo suyo.

Pero el castaño no se sentía tranquilo, ¿qué había pasado con Hoseok?, ¿por qué estaba con Yoongi?, ¿tanto le había afectado dejar a Minho?, soltó un suspiro pesado y decidió llamarlo, sin obtener respuesta, al no encontrar forma de comunicarse con el pelirrojo, decidió esperar a verlo aparecer por la puerta del aula, o en el caso de que no lo hiciera, hablaría con el cuando volviera a casa.