Lazo Accidental [Junghope]

[29]

Un suspiro lleno de pesar escapó de los labios del omega justo después de que secó las lagrimas que todavía caían por sus mejillas, se levantó del suelo de manera lenta y sacudió sus ropas cuidadosamente, no quería regresar a su habitación, sería tan deprimente pasar el resto de su día recordando que él fue el causante del problema que casi los mata tanto a él como a su mejor amigo.

—¡Esto no puede ser verdad! ¡Dígame que es una broma por favor!—Exclamó una voz conocida y el omega frunció el ceño con extrañeza, observando a dos personas acercarse con pasos tranquilos.  

—Quisiera estar bromeando Seokjin, pero no es así.—Mencionó un hombre de mayor edad con pesar ante la manera en la que el omega se tomó la noticia de su nueva condición.

—No, no, mis padres me van a matar si llegan a saberlo— Expresó su contrario deteniendo sus pasos con una expresión de total terror y Hoseok abrió los ojos con sorpresa al reconocer la bonita cabellera de tonalidad rosa.

—Lo siento Jin, pero no es algo que puedas ocultar—Comentó el mayor dando una palmada en la espalda del menor.—Recuerda que debes comer y dormir adecuadamente, cuídate mucho y nos vemos en dos semanas—Sonrió con amabilidad y se marchó con pasos tranquilos, dejando al menor en medio del pasillo, quien estaba a nada de romper en llanto ante la desesperación que sentían.

 —Seokjin—Hoseok lo llamó en voz baja mientras caminaba en su dirección con pasos lentos, el omega lo observó con sorpresa pero no evitó correr hasta el pelirrojo para abrazarlo, ocultando su rostro en el pecho del omega, quien trastabillo por la fuerza que su contrario impactó con él.

—Hoseok, Yoongi me habló de lo que pasó ¿Cómo te sientes? ¿Jungkook está bien?—Cuestionó con preocupación para después separarse del abrazo y sostener con firmeza el rostro del pelirrojo, frunciendo el ceño al notar lo pálido que el joven se encontraba.—Los demás vendrán cuando las clases terminen.—Comentó soltándolo y tomando de nueva cuenta una distancia prudente.

—Todo está bien—Respondió Hoseok con simpleza.— Mejor dime, ¿qué haces aquí a estas horas?, tú deberías estar en clases ahora—Aseguró y el cuerpo del contrario se tensó.

—¿Podemos hablarlo en un lugar más privado?—Pidió el pelirosa  y Hoseok asintió, guiándolo hasta su habitación. Yoongi ya no estaba allí, seguramente había ido por un café o algo por el estilo, así que no tenían de que preocuparse.

Ambos se sentaron en la cama y se mantuvieron en un silencio bastante incómodo, mientras Seokjin miraba el sobre amarillo tamaño carta que llevaba en sus manos.

—Bueno, sabes que mis padres no siempre estuvieron muy de acuerdo con mi relación con Namjoon.—Habló con la intención de explicar lo que hacía en ese sitio y el pelirrojo lo miró con curiosidad.

—Si lo sé—Respondió mirando el sobre que el pelirosa sostenía.—Creo que ninguno de nosotros olvidará lo que pasó cuando tú y Namjoon hicieron oficial su noviazgo, tu papá en especial lo tomó exageradamente mal.—Comentó recordando como aquel día tan hermoso se convirtió en un recuerdo perturbador e incómodo.

Jin dejó escapar un suspiro.—Cuando se enteraron de la marca fue algo peor, mi padre me golpeó—Contó en un susurró agachando la cabeza para que el pelirrojo no lo viera llorar.—Namjoon no lo sabe, así que, por favor no se lo digas.—Suplicó.

—Bien, no le diré nada.—Prometió el pelirrojo sintiéndose bastante enfadado, ¿cómo podía el padre reaccionar de una manera tan inmadura ante una situación así? ¡Él era consiente de que Seokjin y Namjoon eran destinados, ¿cómo podía ser tan inconsciente?!—Pero dime, ¿te ha vuelto a golpear?, ¿te ha amenazado o algo por el estilo?—Preguntó realmente preocupado, pero el pelirosa negó repetidas veces.