Oportunidad

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—¡Estás hermosa Val! —exclama Juliana desde el marco de la puerta de su habitación.

Valentina voltea hacia la puerta. —¡Corazón...! —dice y encuentra la mirada amorosa de la morena, sus ojos brillaban— Ven.

Juliana, cierra la puerta tras de ella y se acerca, coloca sus manos en la cintura de la castaña.

—Amor, tú también estás muy hermosa. —dice llevando las manos al cuello de Juliana y le da un suave beso.

—Val, no sé de dónde puedes sacar esas ideas de que yo pueda tener ojos para otra mujer —le da otro beso tierno y la hala por la cintura más su cuerpo—. Eres tan maravillosamente hermosa... la mujer más linda que han visto mis ojos. Confía en mí. —dice y la besa.

—Perdóname, no quiero que toquemos más el tema —le da otro beso—. Te prometo no volver a desconfiar de ti... Aunque —lleva su índice a la nariz de Juliana muy sutilmente teniendo sus frentes juntas—, yo no desconfío de ti, sino de Kate. Ella quiere contigo Juls, entien...

—Ssshh... —toma el índice de Val y lo lleva hasta su boca—. No hablemos más del tema. Tú eres mi chica entiende, esperé mucho para tenerte y no te voy a cambiar por nadie. —le susurra y besa, apretando su cuerpo hacia ella.

El beso fue tierno, los labios de Juliana buscaban transmitir castamente lo que sentía, los movimientos de sus labios encajaban a la perfección. Valentina abrió un poco más su boca y deja entrar la lengua de su novia, quien sin dudarlo se da paso con determinación y pasión. El beso fue subiendo de tono, pasa de ser tierno a apasionado, Valentina clava sus dedos en el cabello azabache y sutilmente le da una correspondencia profunda a ese beso, que consigue alborotar más allá de la piel.

Se separan para tomar aire, lo necesario, ahora era Valentina que toma el control del beso, desesperadamente candente, generando que la morena comience a realizar un par de maniobras por su cuerpo. La temperatura iba en aumento, se encaminan hacia la cama donde se acuestan, Juliana sobre Valentina, sin despegar sus labios, el beso flameante las estaba abrasando en sus centros de pasión, el danzar de sus lenguas estaba descontrolado.

—Te amo Val. —susurra mientras recupera aire.

—Te amo tanto corazón... —corresponde Valentina y prosigue con el beso apasionado.

Juliana mueve su rodilla acomodándola en la entrepierna de Valentina, haciéndola gemir, lo cual la excita sobre medida, lleva su mano hasta el muslo de la rubia haciendo un leve y sutil ascenso por debajo del vestido, la morena siguió sus besos ahora por el cuello de Valentina, pequeñas lamidas consiguieron más gemidos, sus dientes mordieron el lóbulo de la oreja y succiono con pasión, así como la parte en la que Valentina que la desarma, bien conocido por su amante.

La mano de la morena consigue acceso a su centro totalmente húmedo y suspira, para empezar a crear el juego de caricias que le hagan entrar en mayor calor, esta vez acelera el ritmo, e intensifica su trabajo en el cuello, la lengua y sus dientes hacen enloquecer de pasión y deseo a la castaña que se abandona a su merced.

—¡Oh...! Juls... ohh...

Consiguiendo su cometido, decide introducir su pasión en Valentina, utilizando un ritmo desenfrenado y de manera constante acelera la caída de su amante en los preámbulos de una tórrida ola de placer, su respiración se acelera, y se hace paso a besar unos de sus senos. La castaña arquea su cuerpo y cierra sus ojos, entrando a la cúspide final, su cuerpo es sacudido por pequeñas convulsiones, los dedos de la monera quedan aprisionados con el orgasmo que le generó, sintiendo agradablemente el resultado de aquella sesión de pasión.

—Te amo corazón... dice Valentina con la voz entrecortada.

La morena sigue besando lentamente, y baja la intensidad de sus movimientos, para nivelar sus pulsaciones, suelta su seno, y sube a besarla lentamente por unos minutos, hasta que suena el celular de Juliana.

Complicity (Terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora