Las normas pautadas iban a tener una cierta modificación, haciendo el uso del adagio, de que "las reglas se hicieron para romperse", iban Juliana y Valentina conscientes de ello, la morena le recalcó a Valentina que la acompañaba porque se moría por estar con ella, pero que no cambiaba en nada las fechas estipuladas, menos después de todo el avance alcanzado por ambas.
La rubia estaba clara, que aquel fin de semana era un bendito escape a esa pausa interpuesta por su novia, sin embargo, no le afectaba aceptar la aclaración hecha por ella, ya que reconocía que violar lo pautado sería no tenerle consideración a su novia y algo había aprendido en más de un en estado de "pausa" y era que Juliana no hacía o decía nada por capricho, todo era por una justa razón y aunque sabía que la amaba infinitamente no podría abusar de aquel amor.
Este fin de semana iba a ser entonces una especie de burbuja para ambas, lo necesitaban, les urgía, a flor de piel sentían la ausencia de la una y la otra; sin complicaciones todo estaba claro.
Ya en el avión, a pocos minutos de aterrizar en Cancún, Nayeli va revisando y concertando la agenda.
Llegaron a Cancún y fueron trasladas al hotel, cuando Juliana se enteró que Valentina tendría tres horas de entrevista en el lobby del hotel, le pidió que esa noche prefería ir directo a su habitación que ir a acompañarla, y así poder terminar de enviar unos correos y organizar unos asuntos con su equipo. Llegaron a mutuo acuerdo que el día siguiente a partir del ocaso estarían juntas.
Las chicas iniciaron su día, iban a aprovechar el día de sol, desayunaron y se prepararon para ir hacia el área de piscina, por ser invitadas de Valentina tenían acceso a todos los servicios del hotel, que era un complejo inmenso.
—Juliana –Naye la tuteaba siguiendo indicaciones de la morena–, ya dejé a Valentina en el set, estoy libre... ¿qué prefieres que empecemos a hacer? —pregunta con mucho entusiasmo.
—Pues yo también estoy libre ya, podemos empezar con ir a la piscina, que desde aquí me parece alucinante, tomamos algo y luego a la playa, ¿te apetece? —pregunta sale del vestier y se termina de acomodar vestido blanco playero que lucía espectacularmente.
—¡Claro! Lo que desees —aclaró emocionada—, Valentina me pidió que te acompañara y que nos divirtiéramos hasta más no poder.
—Vamos a por ello... —dijo sonriendo.
Se dirigieron a la piscina principal, en uno de los sectores, estaban apartados para la filmación del comercial, desde las tumbonas donde se sentaron las chicas a comenzar y apreciar del sol y unas bebidas refrescantes, podían ver a Valentina, que no dudó en fijar su mirada en Juliana cuando se instalaban, luego sintió un vaporón recorrer todo su cuerpo al ver cómo le lucía aquellos trajes de baño que dejó a lucir luego de deshacerse del vestido blanco. Su novia lucia despampanante y aunque tratara de disimular le costó mucho dejar de mirarla.
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Complicity (Terminada)
RomanceEl reencuentro de Juliana y Valentina en la ciudad de Nueva York, reanimará ciertos lazos afectivos que tenían muy ocultos, dando un giro inesperado a sus vidas, y a sus carreras, famosas. Todo les irá cuesta arriba, no sólo por los terceros, sino...