Box. | Laughing Jack

23.

TOBY'S

Unos segundos más tuve que esperar para que él me abriera, su rostro claramente hacía ver que no estaba nada contento de verme y mucho menos de recibirme en su pocilga, pero me dio igual. Me importa una mierda que no me quiera ahí, yo vengo a lo mío y punto.

— ¿Vienes a pedirme disculpas, enfermo? – preguntó sarcástico.
— Vengo a preguntarte sobre Stevie – aclaró, ignorando su fracasado intento de ofenderme.
— ¿En serio? ¿No te quedó claro que yo no te diré nada sobre tu amada novia?
— No lo es; no vengo a preguntarte sobre quién es, qué hace aquí y para qué la quieren, yo mismo me daré cuenta – repito, haciéndolo reír. Imbécil. –; vengo a preguntarte sobre su llegada.
— Es tan chistoso verte tan confiado de que realmente vas a saber algo de esa niña – sigue burlándose de mí hasta el momento en que me deja pasar a su pocilga de lugar. –. Creí que ya sabías como vino Stevie aquí.
— No. Sé que ya tenía unas semanas antes de ir a mi habitación, pero no sé nada más de eso.
— No hay nada de misterio en eso. Estuvo durmiendo conmigo la primera semana que llegó y luego decidió salirse porque yo le doy miedo – contó despreocupado por el tema. –, paso unos cinco o seis días buscando compañero de cuarto hasta que llego al tuyo y ahí se quedó. Eso es todo.
— Eso lo sé.
— Entonces no entiendo porque mientes diciendo que no sabes como vino aquí Stevie.
— Sí, eso te pregunte, no te pregunte donde se quedó al llegar aquí ni te pedí que me contarás la historia que ya sé sobre como llegó a mi habitación – afirme con sarcasmo. ¿En serio pensaba que su técnica barata de manipulación iba a funcionar conmigo? Por favor, yo me sé todo eso. – ¿Cómo llego ella aquí?
— Yo la traje.
— Lo sé. ¿Cómo la trajiste? ¿Le hiciste el favor a Jack de secuestrarla?
— Toby, no me puedes hacer sentir culpable de algo tan pequeño como un secuestro – vuelve a burlarse. –. Se que ahora te sientes como… “normal" con Stevie al lado, pero ambos sabemos las cosas que hemos hecho, y ambos sabemos que no entramos en la categoría de “normaidad" que manejan aquí – me sonrió con malicia.
— ¿Cómo la secuestraste? – sus ataques personales son tan patéticos…
— Solo lo hice. La encontré tirada medio muerta sobre un montón de vidrio. – Por eso tiene marcas en la espalda. – Ella debería de estar agradecida conmigo porque la salve, si no la hubiera encontrado estaría descompuesta en alguna parte del bosque – escupió con rencor… interesante.
— ¿Por qué dices que estaba muriendo?
— Porque se estaba muriendo. Ella es humana, ningún humano aguantaría tantos golpes y heridas profundas en su cuerpo, menos si sangran.
— Ella estaba herida cuando vino… ¿y la curaste?
— Me dio pesar, por eso lo hice… Ja, aún recuerdo que trato de matarse cuando se vio en el espejo de mi habitación.
— ¿Se quería matar?
— Sí… todo porque no le gustaba como se veía, algo muy patético. Se iba a enterrar un pica hielo en la herida que tiene en el cuello, justo en medio de la equis, pero la detuve y trate de hacerla entrar en razón o una mierda así me dijo Jack que hiciera.
— ¿En una equis? – pregunté tratando de parecer que no sabía de lo que hablaba, pero claro que he visto esa cicatriz en su cuello.
— Agh, sí, la de su cuello. Es una gran estúpida, la herida estaba recién cosida y quito algunos puntos cuando se paso el pica hielo. Hasta trato de moverse rápido… es que es tan idiota, no pudo hacerlo ni porque estaba recién cosida su herida.
— … Adiós, me aburrí.

Sin darle tiempo de decir algo a Jason, salí de su taller y caminé adentro de la casa. Tenía información suficiente para resolver mis dudas. Ahora solo tenía que contarle a Stevie y ver su reacción.

Fui a buscarla al cuarto de los chicos, pero solo me encontré a Bryan sentado en el piso. Creo que apenas se está despertando.

— Bryan, ¿y Stevie?
— No tengo idea, me acabo de despertar – contestó levantándose del suelo. –. Maldito Tim, se mueve y patea por las noches y para poder medio dormir me tuve que tirar al suelo.
— Yo ya sabía eso – me burle de él y salí de la habitación.