25.

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He pasado buscando a Stevie por horas. Entré al grado de desesperación en que voy al pueblo que está relativamente cerca de la cabaña para buscarla entre la gente (obviamente cubierto), llegando hasta a preguntarle a la gente por ella, describiéndola físicamente. Nadie me supo decir si la ha visto o no, a pesar de que su físico es bastante distintivo y peculiar: alta, delgada, pelo blanco un poco debajo de los hombros, nariz puntiaguda, ojo izquierdo celeste y ojo derecho blanco, cara bonita y busto razonablemente grande. Stevie no pasa por desapercibida, aparte de que es físicamente hermosa y envidiable, su caminar es característico y siempre tiene rostro serio... ¡es que es imposible que nadie la haya visto!, con lo casi inaguantable que es verla por más de tres segundos.

Me desespera esta situación... ¡no puede ser que haya desaparecido de la maldita nada! Es que... no sé ni dónde buscarla con claridad. Ella es muy miedosa y desconfiada, de ningún modo pudo haberse ido con alguien..., pero tiene sus ataques de amnesia (o cuando le borran la memoria, ya ni siquiera estoy seguro de que es)... no me quiero ni imaginar que haya olvidado quién es y se haya perdido en el bosque.

¿Qué se supone que tengo que hacer? No sé si irme a la cabaña o dormir en algún lugar aquí en el pueblo... es que no tengo idea de qué hacer.

No pude más. Entre al bar donde suelo venir cuando estoy en este pueblo y me fui a sentar en la barra. Pedí una cerveza y en cuanto me la dieron le di unos buenos tragos. Pase mis manos por la cara repetidas veces, frustrado y... no entiendo cómo me siento. Odio esta situación, nunca me he sentido tan frustrado como ahora... no la soporto más. Me termine la botella de cerveza de un solo trago y pedí otra más. No tengo planeado embriagarme ni nada por el estilo, de cierto modo estoy trabajando y tengo que mantenerme sobrio para seguir buscando a la estúpida chica de pelo blanco. Luego de dos cervezas más, pagué y me fui de ahí no sin antes preguntar por un hostal o motel donde poder quedarme a dormir.

El hostal quedaba algo al centro del pueblo, pero de igual manera no se veía muy habitada la zona donde estaba. Se llama "Hostal Bon R êve" (y dale con el francés); el lugar queda en la esquina de la calle que lleva al camino del bosque, por fuera no se veía nada mal para su precio y comparado con otros lugares de aquí. Deje de estudiar cómo era el lugar y entré a la recepción rápidamente ya que el frío se comenzaba a sentir.



— Buenas tardes, bienvenido – me saluda la recepcionista del lugar con bastante entusiasmo en sus palabras. –. ¿Se le ofrece alguno de nuestros servicios?

— Sí, quisiera una habitación – respondo indiferente, aún con tratando de controlarme para no frustrarme más.

— Por supuesto, ¿cuántas noches desea la habitación?

— Solo una.

— Perfecto, ¿incluirá desayuno para mañana?

— No.

— Está bien... su habitación será la número 22 – me indica antes de entregarme la llave. – Que disfrute de su estadía. – sonreí a medias y me fui a buscar la habitación 22.



Estaba en medio del segundo pasillo izquierdo, casi al final. Entre y cerré la puerta con seguro para poder quitarme la barba con delicadeza y echarme a dormir un rato. La habitación era de un tamaño normal, una cama unipersonal, un mueble con un televisor y dos mesas de noche a los lados de la cama eran lo primero que veías al entrar; el baño estaba a parte y también tenía un tamaño normal.

Box. | Laughing JackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora