Capítulo 47 | YSABELLE ALTAMIRA

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Grecia sonrió y siguió ayudando a Lucy a terminar su tarea de geografía. Pasar el tiempo con la pequeña la ayudaba a no pensar y extrañar a Adam.

—Ahora, haz la suma —dijo, levantándose de la silla para dirigirse a la cocina.

Lucy asintió, moviendo los pies, mientras centraba su atención en el cuaderno delante de ella.

—¿Quieres kétchup o solo mayonesa en tus hot-dogs? —preguntó, mientras le servía un vaso de jugo.

—Kétchup —exclamó la pequeña.

Sonriendo, Grecia terminó de preparar los hot-dogs y fue a sentarse nuevamente al lado de Lucy, depositando el plato en la mesa. —Bien, descansemos un poco —dijo, cerrando y apartando los libros—. Tienes que comer, luego, continuaremos con la tarea.

Media hora más tarde y con los deberes escolares ya terminados, Grecia se sentó en el sofá con Lucy a ver dibujos animados.

Carolina apareció minutos más tarde, llevando con ella la libreta de planeación que había estado utilizando desde hacía meses.

—Acuérdate que hoy tenemos la cita con la florista —señaló, mientras daba un sorbo a su lata de Coca-Cola.

—¿Puedo ir? —preguntó Lucy, coloreando su libro de dibujos.

Grecia le sonrió. —Claro, cariño.

—También tenemos lo de la prueba del vestido de las damas —siguió Carolina—, debemos concretar la cita con el servicio de catering y además...

—Tranquila —interrumpió la castaña—. Carolina, no me presiones y no me pongas más nerviosa de lo que ya estoy.

—Lo siento, pero es que, hablé con las hermanas de Adam y ambas me dijeron que no iban a poder viajar para probarse los vestidos y eso me tiene al borde del colapso nervioso, te imaginas que no les queden, ¿qué haríamos?

—Supongo que ellas sabrán arreglar ese problema.

—No. No lo creo... Por cierto, ¿has hablado con Adam?

—Sí, ayer por la noche... Me dijo que volaría a Atlantic City.

—¿Qué? —exclamó la morena—. No juegues, Grecia.

—No lo hago, eso fue lo que él me dijo.

—Tiene que ser una broma, aún no me ha enviado las tallas de sus amigos.

—Hablando de eso, me pidió que te dijera que los chicos iban a comprar sus propios trajes.

Carolina parpadeó. —¿Estás jodiéndome?

Grecia negó. —Carolina, entiende... Esos hombres son dueños de grandes empresas, tienen dinero y poder, es obvio que no querrán comprar su ropa en una tienda de segunda mano.

—No es tienda de segunda mano —señaló—. Sabes bien que es una boutique de prestigio.

—Lo sé, pero ellos...

—Ya, da igual. Lo único importante es que tengan sus trajes para ese día.

📕🏫

Estaba volviéndose loca. Todo había sido un ir y venir constante y, por primera vez, agradeció que Adam le hubiese dejado el auto, de lo contrario, ya estaría más agotada de lo que estaba.

—También tenemos este arreglo, es una combinación de alcatraces y rosas blancas —explicó la florista, mostrando el arreglo en cuestión.

La nariz de Grecia se frunció. Sí, le gustaban los alcatraces y las rosas, pero ella quería algo más neutro, su mirada vagó por toda la florería hasta que vio un arreglo hermoso que le hizo abrir los ojos de par en par.

TKO [Knockout Técnico]© |TERMINADA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora