Capítulo 89

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Arafat estaba revisando la guantera de la camioneta, Behati estaba en el asiento trasero acomodandose para el viaje. Le llamó la atención escuchar pasos de tacones acercándose, era Skyler yendo hacia ellos extrañada por ver maletas.

—¡Mamá!— Behati se bajó de la parte trasera de camioneta y fue hasta ella para abrazarla, Arafat se quedó de pie sin decir nada.

—Hasta que por fin logró verte cariño— la abrazó

—Hoy iremos a la casa de descanso, me llevará a conocerla..

—Si ya veo...

Arafat fue hasta ellas.

—Fue una sorpresa— arqueo una ceja —¿que te trae por aquí?

—habíamos quedado a esta hora, ¿no te acuerdas?

—Si...

Behati, movió la mano de Arafat

—¿Mamá puede venir con nosotros?

—No lo sé, a lo mejor ella está muy, muy ocupada

—¿eso es cierto mami?

—No cariño, iría pero la esposa de tu padre se le pondrán los pelos de punta si se entera

—¿porque no podemos llevarnos bien?— dijo Behati, mientras se iba a la parte trasera de la camioneta.

Arafat y Skyler intercambiaron algunas palabras más, llegaron un acuerdo en el cual sólo estaría unas cuantas horas y después Skyler se marcharía. Tratarían de llevarse bien solo durante la cena y por su hija, ya faltaba poco tiempo para irse de nuevo a México.

El cambio de clima era increíble, pasaban de un sol incandescente y un calor abrasador a un cielo nublado y ráfagas de aire frías. La carretera estaba húmeda, los pinos formaban un hermoso paisaje y por supuesto nunca olvidaría aquella desviación para ir al chalet, donde una vez fue su refugio de todo.

Nada habia cambiado en el interior, los muebles seguían en el mismo lugar, la cocina, los olores a canela y vainilla. Los recuerdos llegaron a su cabeza, las fotos, las malas noticias y la gran mayoría era malos momentos.

—¿Estas bien?— preguntó Arafat tocandole el hombro

Skyler se sobresaltó al sentir su tacto, su mano estaba tibia y lo miró.

—Si todo está bien...

—¿Lo recuerdas?

—Como olvidarlo, hay muchos recuerdos que me han venido de golpe a la mente y siento que todo pasó ayer— se pasó una mano por la frente

—No debiste de haber venido, no quiero que te pongas...mal— dijo que voz suave

—Estoy bien.

Skyler estaba disfrutando de su postre, un volcán de chocolate con fresas por encima y jarabe extra de chocolate, en ese momento no existía nada más que ella y el postre. Para ella el chocolate durante el embarazo, era como un jodido orgasmo. Behati ya se habia levantado de la mesa y fue a la cocina para dejar el plato ahí, Arafat miraba a Skyler disfrutar de la comida, tal y como lo hacía cuando estaba embarazada de Behati.

Arafat volvió el tiempo en su memoria, estaba con Skyler cepillandole el cabello, ayudándola a vestirse, atarse los zapatos y nuca dejar de mimar el abultado vientre donde Behati estaba teniendo 8 meses de crecimiento.

Volviendo a la realidad, ¿cómo coño te embarazas por accidente?, ¿se cayó encima de un pito cuando iba de compras?.




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