Ultraviolence

Capitulo 28

Mi peor problema en la mañana es cuando me quiero volver a dormir, porque aún tengo el sueño "atravesado", pero por algún extraño motivo no puedo hacer. Aja, si. Ahora tenía más que ese problema, el pesado brazo de Arafat estaba abrazando mi cintura, mi cabeza estaba recostada sobre pecho y su otra mano agarraba la mía.

Con un leve movimiento de piernas me aseguré de que mis pantalones estuvieran en su lugar..

Ok, si, si lo están.

—Buenos días— dijo Arafat con voz ronca

Levanté la mirada y el tenia los ojos entreabiertos, quizá le lastimaba la luz del sol.

—Buenos días, perdón te he despertado— susurre

—Ya estaba despierto, solo no quería despertarte a ti.— murmuró

—Arafat...¿Ya viste como estamos?— hablé en voz baja, me sentía quizá apenada ó avergonzada...no lo sé tenía un revoltijo en el estomago, de seguro mis mejillas estaban rojas.

—Si, te hubiera soltado pero tu mano lleva tiempo aferrada a la mía.

Por el rabillo del ojo pude ver una ligera sonrisa.

—Discúlpame— me solté de su mano y me incorpore sentandome en la cama, me estire un poco y me levanté. —¿que haremos hoy?— pregunté mientras caminaba a buscar un toalla

—regresaremos pero antes necesito hablar contigo— él también se levantó de la cama, se dirigió a mí y me llevó afuera de la "habitación".

—¿Que sucede?— pregunté entre cerrando los ojos por la claridad del sol.

Arafat parecía estar más bronceado de lo normal, su cabello azabache esta revuelto y su ceño estaba fruncido, parecía que era algo muy importante lo que él quería decirme.

—Voy a ir directo al grano, tu y yo sabemos que nuestro matrimonio fue para "saldar" la tradición— inhalo aire —pero hay algo que no te he dicho aún

—¿Que cosa...?— arquee las cejas

—hace un tiempo yo estuve casado..

Mi cara debió de ser épica.

—antes de que digas algo ó me golpees escuchame— pidió —estaba casado con la hija del pueblo enemigo, con el tiempo mi madre presionó a mi ex esposa con tener un hijo, lo intentamos y lo intentamos pero no obtuvimos éxito. Mi madre me suplicaba que tomará a otra muchacha del pueblo pero yo me negué...

—Ludmila...— susurre —¿es a quien le dedicabas esas palabras?—

—Si— asintió —Ludmila al sentirse presionada y escuchar las palabras de mi madre....

—Aja...

—Ella se suicidó, arrojándose del acantilado que ves cada mañana al despertarte en Turquia— una sombra de dolor pasó por su mirada.

No dije nada, porque aún estaba sin poder digerirlo. O sea que si Asad jamás hubiera robado a su hermana, yo ni siquiera estaría en estos momentos...pero mi pequeña hermana Sara, estaría casado con Arafat..

—Lo único que puedo decir...es que no puedo creerlo— me hice el cabello hacia atrás

Él jugueteo con sus dedos, puse los ojos en blanco y hablé:

—¿Hay algo más?... ¿Verdad?— dije con los ojos cerrados, por mi incredulidad

—Si— su voz aterciopelada me hizo sentir vacía —Un tiempo después de la muerte de Ludmila, yo...— pareció tomar fuerzas —estoy en una relación aparte de la nuestra

—¿Que?— pregunté

—Perdón por no haberte lo dicho...

—¿como pudiste casarte conmigo?

—Sky...

—¡No Arafat!, o sea en tu vida tienes 3 mujeres. Porque apuesto a que no has podido olvidar a Ludmila ¿o si?

—No...

—¿¡entonces!? ¿Porque estas con tu actual pareja?

—Ludmila era una mujer que yo adoraba tanto, y ahora con Lía pensé que podría rehacer mi vida de nuevo. Pero luego llegaste tu...

—¡No!, ¡yo no llegué!. ¡A mi me engañaron y por culpa de mi disque hermano!. ¿No te pones a pensar?...

—Skyler

—¡cállate!, ¿no te da vergüenza?. ¡Casarte conmigo, espiarme en el baño y abrazarme!...cuando tienes otras mujeres en tu vida

—Si, soy una verdadera mierda...

—eres más que eso...me das asco Arafat

—Escuchame por favor...

—No voy a escucharte porque al final de cuentas, yo no tuve la necesidad de meterme contigo porque yo quisiera si no por que me han puesto un arma en la cabeza, me han obligado...y tu has aceptado

—Yo...yo pensé que realmente empezabas a quererme, pero no es así, solo juegas conmigo...soy tu bola de estambre..