Los Miserables- Bughead

Capítulo 1

Riverdale 1860

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El bello pueblo de Riverdale había sido reconocida en varias partes del estado gracias a uno de los más importantes y bien administrados viñedos de la "Hacienda Jones", que había logrado crear uno de los mas bien premiadas y ya famosas botellas de vinos "Serpents". 

El pueblo en general, era  grande y se encontraba en una bella zona cerca de la playa, donde se podía apreciar el mar. Sin embargo, las personas ya no solían hablar de eso, de lo único en que estaban interesados, solía ser del gran éxito que había adquirido Fp Jones como el principal dueño de todo aquello, y sobre todo, de su bien parecido y soltero hijo: Jughead Jones.

Si bien Jughead, era un chico bastante guapo y ahora con todo el éxito, también se podía considerar heredero de una gran fortuna, a diferencia de Fp Jones, su padre, que era considerado un hombre bastante amable y agradable con toda persona que aparecía frente a él, Jughead era todo lo contrario. 

Era bastante conocido por ser un chico frívolo, grosero, mezquino, amenazante e indiferente... y para nada nadie lo consideraba una persona agradable.

Jughead Jones, había demostrado en varias ocasiones, que las necesidades, inclusive de sus empleados, no eran su problema. Había humillado cantidades infinitas a las personas por cualquier mínimo error que cometiesen, hacía que su palabra fuera la ley, y si no estabas de acuerdo con eso, podías comenzar a guardar tus cosas y salir por las buenas, antes de que él te pateara el trasero.

Jughead Jones se creía el dueño de la vida de cualquier persona que pasase frente a él. Sobre todo, después de aquella fortuna que los Jones habían comenzado a hacer convirtiéndose en la familia más poderosa de Riverdale.
Para ser exactos, o como las persona solían llamarlo en el pueblo, Jughead Jones era un ser humano despreciable. Un miserable.

De su vida privada no se tenían muchos datos. Los trabajadores de su hacienda, no estaban de ninguna manera autorizados para hablar de nada de lo que sucedía en ella. Pero para ser conscientes, las personas del pueblo creían que era incluso peor, es decir, si ya se comportaba así en público, en su propia casa, nadie podría pararlo.

~Bughead~

Jughead bajó de su auto seguido de su compañero de trabajo y mano derecha: Kevin Keller. Era el único chico lo suficiente cercano para saber todos los pasos y momentos de la vida de Jughead. Habían estudiado juntos en el extranjero, así que cuando Jughead tuvo que regresar para hacerse cargo del negocio familiar, no dudo en hacer su socio a Kevin. De hecho, era el único que a veces, en ocasiones especiales, veían que le sonreía y no trataba de forma tan indiferente.

─Saldré en un momento Sweet Pea, mantén preparado mi caballo. ─ Jughead ordeno de forma seria a su chofer. El pelinegro asintió y lo espero pacientemente.

Jughead entró a la hacienda seguido de Kevin, e inmediatamente diviso a su joven dama de llaves: Josie.

─Buenas tardes Joven ─ saludó ella mientras también le seguía los pasos. Jughead ni siquiera se molestaba en detenerse para saber lo que su empleada quería decirle. ─Hay novedades. Verá, su padre...─ hasta el momento en que Jughead escuchó que era en relación a su padre, de inmediato se frenó.

─ ¿Qué hay sobre él?─ preguntó preocupado.

─Ha estado peor de salud. Le hemos dicho que le llevaremos al centro médico, pero no ha querido ─ Josie habló sin mirar directamente a su Joven Jefe.

─Yo hablaré con él ─ Jughead hizo un gesto a Kevin para informarle que esperase en lo que él buscaba a su padre.

Kevin asintió y junto a Josie, observaron marchar Jughead.