Los Miserables- Bughead

Capítulo 55

Las clases continuaron hasta que fue la hora de salida. 

Antes de que Jughead pudiese atravesar el estacionamiento, fue rodeado nuevamente por los mismos chicos de la clase. 

-¿Ha dónde crees que vas, bastardo? Si aun no hemos acabado contigo- sonrió Bret liderando a los demás chicos. 

Jughead intentó esquivarlos pero ellos se lo impidieron.

-No creas que lo que pasó en clase te libera de nosotros. No tienes a Andrews o alguno de tus criados aquí para que te defienda- sonrieron mientras comenzaban a empujarlo.
Jughead no quería verse envuelto en cualquier clase de peleas. Ni siquiera le importaba si hablaban mal de él. Solo quería regresar a casa.

-Bret, Bret, Bret... te dije que dejaras de meterte con el chico- Archie apareció con una sonrisa. 

-Y tú por qué no dejas de meterte donde nadie te llama- Bret frunció el ceño molesto. -Deja que nuestro bastardo pueda defenderse solo- Bret motivó a Jughead. 

Jughead intentó lanzar un puñetazo pero Bret lo esquivó con facilidad.

Jughead ni siquiera sabia pelear. 

-Débil... ahora es mi turno- sonrió Bret. 

Archie volvió a involucrarse y todos comenzaron a golpear a Archie que aunque lograba esquivar a algunos, por otro lado estaba siendo medianamente golpeado por el resto de ellos.

Jughead estaba pasmado en su lugar sin saber muy bien que hacer. Por un lado, ya se había dado cuenta que ni siquiera era bueno para golpear y por otro, ni siquiera consideraba a Archie un conocido. Sabía quién era pero de ahí a que alguna vez se hubiesen hablado... no más. Aunque estaba sorprendido sobre como el pelirrojo parecía estar defendiéndolo.
Cuando Archie cayó al piso y comenzaron a patearlo, fue que Jughead decidió intervenir.
Empujó como pudo a algunos cuantos e intento colocar de pie a Archie.
Se escucho algunas voces de profesores que se dieron cuenta de la situación.
Jughead sintió como Archie lo jalaba de la camisa y ambos salían corriendo.

Tras correr algunos metros los chicos tomaron el atajo de la playa.
Jughead se dejó caer en la arena con la respiración agitada. Recién se daba cuenta que necesitaba hacer mas ejercicio.

-¿Estas bien?- Archie se acercó con una sonrisa. 

-Sí... gracias. ¿Por qué me has ayudado?- preguntó Jughead. 

-Lo habría hecho por cualquiera. No te preocupes. Bret siempre se comporta como un idiota- Archie rodó los ojos. 

-Gracias- susurro Jughead.

Archie no contesto. 

-Como sea. Esperemos que nadie nos haya reconocido o tendremos problemas mañana. Pero por ahora... regresemos a casa.- Archie comenzó a caminar. 

Jughead se limitó a seguirlo unos pasos atrás.

Recién estaban entrando a la hacienda. 

-¡¡Archie...!!- se escuchó un grito femenino tras ellos. 

Una pequeña morena corría rápidamente hasta colocarse a su lado. 

-Hola, Ronnie- sonrió Archie cuando la morena se colocó a su lado.

-¡¡No me has esperado para regresar a casa!!- se cruzo de brazos Veronica.