Los Miserables- Bughead

Capítulo 44

— Soy la única y Escucha bien ¡¡Única dueña y señora de esta casa!!— Betty deslizó una sonrisa en sus labios.

— Tú qué haces escuchando... ¡Fuera!— indicó Cheryl al darse cuenta de que Veronica también sonreía burlona. 

— No, no, no... tú no puedes ordenarle eso. Ya te dije que tú no puedes dar ordenes aquí.— Betty se cruzó de brazos.

— No creo que tengas que seguir fingiendo. Sabes que sé la verdad... además, yo siempre venía a la habitación de Jughead cada noche desde que estoy aquí en la hacienda. ¿No crees que es demasiado humillante?— Cheryl se cruzó de brazos orgullosa.

— Por supuesto que creo que es demasiado denigrante. Tener que ir en busca de un hombre comprometido.— Betty sonrió 

— Fue mío cada noche Betty. Venía a buscarlo y él siempre me recibió gustoso. Mientras que tú...— Cheryl alzó un poco la voz. 

— ¡¡Mientras que yo no tuve la necesidad de buscarlo!! Esa es la diferencia entre tú y yo, Cheryl. Recuerdo como tuve a Jughead más de una vez en mi cama, en mi habitación porque él fue quien me buscó. Así que dime ¿quién debería sentirse humillada?— Betty alzó una de sus cejas. 

— Eres una...

— Ten mucho cuidado con lo que dices y haces de ahora en adelante. Porque si crees que voy a dejar que sigas haciendo lo que quieras estas muy equivocada. — Betty se acercó amenazadoramente a Cheryl — Sobre todo, espero que te quede claro que no quiero verte cerca de mi esposo. No te quiero cerca de lo que me pertenece. Porque entonces, Cheryl... me encargaré de acabar contigo.— Betty soltó con molestia.

— Soy yo la que acabará contigo.— amenazo Cheryl. 

— Eso ya lo veremos. Recuerda que ahora no soy más la Betty que conociste. Ahora soy mucho más inteligente y poderosa. Pero por sobre todo, estoy casada con Jughead Jones. Y te guste o no, ahora él me quiere a mi.— Betty deslizó una sonrisa.

— ¡No tengo ninguna objeción a eso!— Jughead entró con una enorme sonrisa en sus labios.  

— ¡Esto no se queda así!— Cheryl le dedicó una mirada de odio a Betty y abandonó la habitación indignada. 

Veronica se apresuro a abandonar igual la habitación dejando a la pareja sola.

Betty se llevó una mano a la frente. No sabía que había sido exactamente eso o siquiera de donde había sacado el coraje para decir todo aquello.

— ¿Qué ha pasado?— preguntó Jughead acercándose. 

— Cheryl venía a buscarte, al parecer ustedes tienen la costumbre de encontrarse aquí. — Betty alzó ambas cejas. 

— Por supuesto que no...—  Jughead notó la puerta del closet abierta y varias prendas de Betty acomodadas. — ¿Te mudas?—  alzó una de sus cejas divertido. 

— Sí. Creo que si seguiremos con el matrimonio debemos compartir habitación o si no, entonces todos se darían cuenta de que algo anda mal.— Betty se encogió de hombros. 

— Bueno, de verdad me siento encantado al saber que tendré compañía en esta habitación. — Jughead trato de contener su emoción. 

— Pensaba decírtelo pero parece que estabas ocupado con Kevin.— Betty explicó. 

— No, esta bien. Me ha encantado la sorpresa.— deslizó una sonrisa en sus labios. 

— Hay algo que quiero pedirte. — Betty quitó la mirada. — Me gustaría que le dijeses a Cheryl que nuestro matrimonio va enserio. Ella sabe la verdad y no me gusta.— se cruzó de brazos.