¡Deja de ser un bebé! (Jimsu) [WATTYS 2019]

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(Pov. Jimin)

Mirar precisamente esa escena no estaba en mis planes, sí bien habíamos invitado a Hyungsik a cenar fue para aclarar sus dudas y cuidar de Yoon.

Pero, jamás imaginé que llegara a dicho lugar a abrazar directamente a YoonGi, a mí YoonGi. No sé si me ignoro o no me noto pero, no le importó abrazarle frente a mi.

¡Dios! Yoon, me alegro de que estés bien — hablo sin soltarle — En la mañana, cuando saliste corriendo yo... ¡Dios! Juro que enloquecí — confesó — Sí te hubiese pasado algo, yo no sé que hubiera hecho.

YoonGi se removió incómodo entre sus brazos, algo que Hyungsik creo noto porque le soltó de inmediato y le sonrió — Lo siento por irme así pero, lo siento — se disculpó con voz baja.

¿Porque no pasamos a cenar? — pregunté, tomando la mano de YoonGi.

La reservación constaba de una mesa privada, adornada con manteles beige y café, en el centro un par de velas aromáticas, acompañado de un florero con un pequeño pez hasta el fondo.

Hemos pedido pasta blanca con pollo en trozos y verduras salteadas y un poco de vino blanco — le comenté a Hyungsik y miré a YoonGi quien estaba a mi lado — para ti he pedido jugo de uva.

YoonGi sonrió y asintió — ¿No va a brindar con nosotros? — preguntó Hyungsik.

Reí ante su comentario y negué — No puede, lo hará con jugo — le dije amablemente y sentí el fuerte apretón en mi mano.

YoonGi estaba hermoso esa noche, su pancita no se notaba tanto pero, ambos sabíamos que ahí dentro estaba el fruto de nuestro amor, portada una camisera blanca con botones apelados, junto a un pantalón negro que se ajustaba a sus piernas pero, más flojo de su cadera, su piel resaltaba entre las telas y sus delgados labios estaban humectados debido al bálsamo que se había colocado.

Se recargo en mi hombro escondiendo su cara en la curvatura de mi cuello, pude sentir el roce de su nariz contra mi piel y su respiración pausada — ¿Ustedes, hm.. ustedes dos? — preguntó Hyungsik, se podía sentir el nerviosismo en su voz.

Asentí — Somos pareja — afirme a su pregunta, al tiempo que YoonGi besaba mi cuello.

Yo, no lo sabía — respondió y suspiro — ¿Puedo saber desde cuándo? — preguntó curioso.

YoonGi se separó de mi para poder mirarle — Desde que nos vimos la primera vez en el departamento de Taehyung — le respondió para sonreírme después.

Hyungsik pareció meditarlo y asimilarlo — ¿Porque no me lo dijiste? Todas estas semanas he estado invitandote a salir pensando en que también me correspondías — le dijo a YoonGi quien pude notar su sorpresa.

Yo creí que lo hacías porque querías mi amistad, ¡Por dios! Cómo voy a querer una cita sí estoy a meses de ser papá —  respondió con leve molestia en su voz.

Mire a YoonGi quien se notaba molesto, sus ojitos amenazaban con llorar, tome su mano y besé su cabeza — Tranquilo Yoonie, estoy aquí — susurré.

Se abrazó a mí, su respiración cambio a ser agitada pero, no lloro, solo no quería verle — ¡Dios Yoon! Honestamente pensé que estabas engordando, no que vinieras con encargo — respondió de forma despectiva.

Mire a Hyungsik, podía dejarle resolver las cosas y que diera sus puntos de vista pero, jamás iba a permitir que ofendiera o tratara mal a mi pareja — Lamento no haberte aclarado las cosas antes, tal vez invitarte a cenar fue un error pero, tómalo como una despedida porque después de lo que has dicho, ni loco te dejare verlo — respondí lo más calmado que pude.

La sonrisa que se dibujó en su rostro fue clara — ¿Al menos es tuyo? — preguntó y sabía perfectamente a que se refería — De no ser así, no gastes tu tiempo en defender a alguien que solo calienta y se va — dijo y me miró directamente.

No negaría que estaba molesto, quizás mucho más que eso pero, no debía mostrarme agresivo, eso no era lo correcto y no le haría bien a Yoon — Retirate, antes de que mande a sacarte — respondí con voz gruesa.

¿Te caló? Dicen que las verdades incomodan y quizás esta sea una — comentó y bebió de su copa.

No voy a permitir que un patán como lo eres tú, venga e insulte a mi pareja, mucho menos a mi hijo, porque lo es y estoy completamente seguro, conozco a Yoon, lo que digas no afectará lo que tengo con él — respondí y negué — No espero que lo entiendas, un gilipollas como tú no lo hará pero, no te quiero ver cerca de él o de mí, vete de una vez .

Tal sólo piénsalo, han sido solo tres semanas, no creo que tú pareja este de tres semanas también — respondió con voz tenue y una sonrisa en su rostro.

No tengo porqué darte explicaciones, te vas o te mando a sacar — ordené y llamé a seguridad con un gesto de manos.

Tres hombres de alta estatura, cuerpos trabajados se situaron a mi costado, dispuestos a acatar mis órdenes — No hace falta, no voy a rebajarme a que la prensa me capte en un escándalo y por alguien insignificante — dijo para levantarse y salir del lugar siendo escoltado por los tres guardias.

Mire a mi pareja, que seguía abrazado a mi  y con su cara escondida en la curvatura de mi cuello, acaricie su espalda — Yoonie, todo está bien, no te sientas mal amor — susurré.

Alzó su cabeza, encontrando su mirada con la mía — Minnie, y sí él tienes razón — Me dijo pero, inmediatamente negué — Y sí de verdad soy insignificante — pude notar sus ojos llenándose de lágrimas, sabía que solía tener inseguridades pero, le afectaba más que terceros le atacarán.

Deposite un beso en su frente — No lo eres, eres el ser más hermoso y comprensivo que pueda existir, te amo porque en tí no hay maldad, siempre entregas tu corazón y amistad sin pedir nada a cambio y tú mi amor, mereces el universo entero — dije para besarle — Quita esa carita triste, que Hyungsik no vale tanto como para que estés así, vamos a disfrutar la rica cena ¿Sí? — pregunté.

Lo ví asentir y comenzar a comer, no sin antes susirrarme un ligero te amo y darme un beso en la mejilla, provocando un sonrojo en sus mejillas.