Broken

38.- Empieza a creer.

—Ámbar, tienes que ser muy cuidadosa con todo esto.

La castaña acomodó su bolso en su hombro. Su mejor amiga puso sus ojos en blanco y Aurora siguió—. Nadie sospecha nada, pero...

—Rori, detente, ¿sí? Deja ese tema en paz— dijo con cansancio— sólo deja de mencionarlo.

Ella cabeceó en silencio y aplicó un labial beige en sus labios.

Ámbar elevó una ceja al ver una publicación en Instagram y miró a Aurora. — ¿Has hablado con Leonardo?

—No.

Suspiró.

—No, no, en realidad...Se ha pasado todo el rato hablando con Luna para la presentación en el Roller de mañana...Mateo y él se ignoran, pero bueno...Supuse que va a llegar un momento en el que quiera escucharme.

— ¿No vas a insistir?

La rubia se veía interesada.

Aurora se encogió de hombros. — ¿Para qué debería?— su voz salió triste y eso no le pasó desapercibido a Ámbar—. Si él no quiere escucharme, no voy a obligarle. Yo acepté que la foto suya y de Luna era editada...aunque no tenía las pruebas. Lo hice porque quería que estuviéramos bien, pero si él no quiere eso...entonces puede quedarse molesto todo el tiempo que quiera.

—Hace unos días hubieras echo lo imposible por que te creyera...

La pequeña Navarro soltó una risa ligera y cabeceó—. Sí, lo hubiera hecho. Pero no puedes obligar a alguien a que te crea. Tampoco a que te quiera.

Entonces tildó la cabeza y le sonrió a la rubia, de forma pícara. — ¿Cómo están saliendo las cosas con Simón? Los he visto muy juntos en el Roller.

—Practicando— Ámbar culminó por ella, poniendo sus ojos en blanco.

—Sí, pues...Jazmín estaba bastante enfadada por todo el asunto.

—No me interesa.

Admitió.

—Esto es solamente...

Aurora soltó una carcajada y rodó sus ojos, divertida. —Ya lo sé, Ámbar— le interrumpió— es solamente parte de tu famosísimo plan. Ya lo entendí, ¿estás segura de que todavía no caes por el dulce Simón?

—No.

Resopló.

Aurora apretó sus labios para no dejar escapar una sonrisa.

—Rori, lo que sea que vayas a decir, ahórratelo. ¿Me entiendes? No me interesa escucharlo. No me interesa en lo absoluto. Y si...

Le cortó. — Oye, tranquila— se ríe con fuerza. Toma el teléfono y desconecta el cargador antes de guardarlo en la gaveta de su tocador—. ¿Quieres ir al centro comercial conmigo? Tenía planeado comprar algunas cosas.

—No puedo.

Ámbar le dijo después de un rato.

Las dos salieron de la casa de los Navarros y entraron al auto. Tino le sonrió de oreja a oreja a la castaña y cuando su mejor amiga estuvo a punto de hacerle un comentario, Rori la detuvo dándole una mala mirada.

—Aquí pensando... ¿Qué vas a hacer que prefieres dejarme a mí y hacerlo? Debe ser muy importante.

Aurora sabe qué va a hacer.

Sólo quiere que ella lo diga en voz alta.

Ámbar tensó su mandíbula y al notar que la castaña le daba una mirada burlona supo que tenía que hablar y decirlo sin titubear o colocarse nerviosa porque entonces era consciente de que Aurora utilizaría eso para reforzar su supuesta "teoría" de que a ella le gustaba Simón.

Lo cual no.

Jamás.

—Simón va a ayudarme para el Open.

Soltó con tanta serenidad como pudo.

—Ah, ya.

Aurora no dijo más nada. Pero ese silencio solo mortificó a Ámbar.

—Puedes dejar de pensar que hago esto porque me gusta y empezar a creerme cuando te digo que lo hago por el plan, ¿sabes? Me irrita que no lo hagas.

—No he dicho nada al respecto.

La castaña le sonrió con gracia y Ámbar simplemente soltó un bufido.

Aurora estaba segura, a su mejor amiga le gustaba Simón.