Capítulo 43

37 1 0
                                    

-Miki: ¿la borrachera? Me refiero a los gritos y los gemidos que acabaron como a las 3 de la madrugada. Espera...¿no fuisteis vosotros?
-Adriana: ¿pero cómo vamos a ser nosotros? Si Carlos en ese momento no era consciente ni de su nombre.
-Carlos: ¡oye!
-Miki: no sé, yo pensé que erais vosotros porque como Carlos me echó de la habitación y estaba besándote con tantas ganas...
-Adriana: pues no, yo a éste no lo toco ni con un palo.
-Carlos: pues el otro día en la piscina no me decías lo mismo -dijo acercándose a mi peligrosamente-
-Miki: esta conversación se está poniendo muy intensa así que yo voy a irme de aquí -dice girando la esquina y saliendo de la cocina-
-Adriana: ¡No Miki! No me dejes sola con él... ¿Qué tal tu noche con Julia? Que poco se habla de lo juntitos que estáis vosotros dos...
-Miki: yo con Julia nada, nos llevamos bien sí, pero tampoco hemos tenido oportunidad para conocernos mejor, así que por lo pronto no se ha podido dar el caso, aunque me gustaría la verdad. Me parece una chica super interesante.
-Adriana: eso lo soluciono yo rápido. A ella siempre le ha hecho ilusión ir a la playa de noche. Si la llevas podéis hacer como una especie de picnic en la arena o cenar en algún chiringuito. Y con eso ella ya es la más feliz del mundo.
-Miki: me gusta la idea, pero prefiero que sea una sorpresa. Proponedle una cena de chicas o algo Alba y tú, y sin que sepa nada la lleváis y ya allí nos encontratremos.
-Adriana: perfecto, le echaré una bolsa con algún bikini por si os bañáis después, lo agradecerá.
-Miki: yo también llevaré uno. Voy a comprar las cosas para el picnic, a las 9 nos vemos en la playa que estuvimos el otro día, ¿si?
-Adriana: allí estaremos.
-Miki: hasta luego chicos, y gracias por la idea!
Miki sale disparado por la puerta de casa no sin antes coger su cartera y las llaves.
-Carlos: tienes las mejores ideas del mundo - dice Carlos volviéndose a acercar a mi, dejándome atrapada entre la encimera y él-
-Adriana: soy la mejor consejera del amor.
-Carlos: ¿ah sí? Pues creo que necesito tu ayuda...
-Adriana: cuéntame...
-Carlos: verás, hay una chica, que a mi me gusta muchísimo, pero es un poco cabezona y no quiere que seamos nada hasta que no nos conozcamos más, pero a mi me gusta tanto lo que he conocido de ella que daría lo que hiciera falta porque fuera mi chica, pero no se cómo convencerla...¿tienes alguna idea?
-Adriana: bueno, puede que a esa chica también le gustes pero necesita asegurarse un poco más de que eso que tengáis puede funcionar, necesita garantías -suelta, sabiendo que toda la conversación iba con segundas-
En ese instante siento que el agarre de Carlos sobre mi se hace más fuerte y el espacio entre ambos casi inexistente, fundiendo sus labios con los míos en un beso que me parece de lo más tierno. No podemos evitar el contacto entre nuestros ojos al separarnos, son como un imán del que no puedo separarme por mucho que quiera.
-Carlos: ¿te parece suficiente garantía, o quieres que te de más?

EfímerosWhere stories live. Discover now