24. Que no sea mío, que no sea mío.

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Hola.
No, no están alucinando.
Como dije publicaré cada vez que tenga internet y pues...tengo, así que espero que disfruten su capítulo y comenten que les pareció.
Gracias por leerme y por sus bellos comentarios, los amó 😘.

- Siguiente - pidió Maise, mirando la agradable reunión padre e hijas con una sonrisa.

- ¿Quién va? - preguntó Antares.

- Yo, prima - respondió un encapuchado.

Subió a la tarima, un poco nervioso pero como le había enseñado su abuelo no lo demostró.

- Bien, Hola personas del pasado que en los tiempos ya están viejos - saludo, Que gentil ¿No creen?. La mayoría bufo.

- Mi nombre es Matheo, y si, soy hijo de una de las hermanas Greengrass - dijo sonriente, se quitó la capucha.

Todos miraron a los Greengrass mientras Tori estaba relajada *Un hijo más un hijo menos,¿Qué más da?* pensaba la castaña, además estaba segura que no era de ella, era rubio como su madre y hermana, si fuera suyo probablemente sería pelirrojo ¿Cierto?.

Ámbar miro a su marido, nadie le quitaba la sonrisa orgullosa a ese hombre de la cara al saber que su nieto llevaba su nombre, la rubia mayor sólo pudo sonreír viéndolo.

Mientras que Daphne, ay, la pobre chica si que era un lío *Que no sea mío, que no sea mío, por favor Merlín, ¡Que no sea mío!* era todo lo que la chica podía pensar cruzando los dedos.

- Si, soy tuyo...mamá - le dijo divertido el chico mirándola.

- Ay no - murmuró la chica sabiendo que se refería a ella - Espera ¿Acabas a leer mis pensamientos? - se cruzó de brazos molesta.

- ¿Qué esperabas? ¡Soy tu hijo! - le recordó, la chica al escuchar la última parte hizo una mueca, ella no queria hijos, pensaba que era de las mujeres que nacieron para no tener hijos, de esas que simplemente no tienen el don de ser madres.

- Pues, deja de hacerlo, es de mala educación - le ordenó molesta.

- Mira quién habla - se quejó Neville.

- Cállate Longbottom - ordenó la rubia.

- Pues, deja de pensar tan alto, madre - se defendió el Math.

- Yo pienso lo alto que se me da la gana - dijo la chica.

- Entonces no te quejes cuando lea tus pensamientos - dijo el chico cruzandose de brazos obviamente molesto.

- Math Basta - ordeno una encapuchada.

- Pero...- intentó defenderse.

- Pero nada, presentate de una vez - le ordenó la encapuchada, el chico miro a su madre y esta muy madura le sacó la lengua.

- Que madura eres mami - le dijo burlón.

- Gracias - le respondió la chica.

- Te apuesto 20 galeones a que la chica que lo regaño también es tu hija - le dijo divertida Pansy.

- Cállate Amelia, no digas estupideces - le dijo la chica rubia.

- No me calles, Ámbar - le dijo burlona la pelinegra.

- Como decía - las calló Math a ambas - Soy un Griffindor.

- ¿Qué? - preguntó Draco escupiendo el agua que estaba bebiendo.

- Eso, soy un Griffindor - repitió el chico.

- Me explicas por favor, ¿Cómo un chico que es descendiente de Slytherin's termina en Griffindor? - preguntó totalmente sorprendido Neville.

¡¡EL FUTURO ESTA LOCO!! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora