Proyecto de rehabilitación de villanos.

Arco 01:(XVII)

Arco 01:El coronel Alfa es demasiado cruel(XVII)

[Vértigo]

Apretando sus manos con impaciencia, Su Yun mira a la pantalla con un atisbo de esperanza en sus ojos. Sabe lo que significa, pero aun así su corazón espera que algo cambié esta vez.

Estaba justo en medio de la cantina del cuartel, rodeado de hombres sudorosos que acababan de finalizar su entrenamiento matutino. El ambiente habitual del edificio fue sustituido con un silencio extraño, todos, ya fueran soldados o miembros del personal, no podían apartar la mirada del "cristal" que transmitía información del especializada del ejército.

En la pantalla se mostraban una serie de coordenadas y un complejo nombre científico. La criatura, cuya existencia a sido cuestionada en diferentes ocasiones y que fue tomada como una leyenda por muchos. El pináculo de la evolución Zerg, una reina variante clase emperatriz.

Su aparición significaba un jaque para la humanidad, a pesar de que en siglos de guerra solo había sido avistada dos veces. En esas dos ocasiones los humanos estuvieron al punto de exigirse. Y de que manera no, las fuerzas Zergs tenían una estrecha jerarquía, un determinado número de soldados, guardianes y obreros seguiría a una reina, esta tendría el poder de abrir agujeros para expandirse y buscar recursos en otros planetas. Ese simple sistema de organización ya era un problema para las fuerzas de defensa, cuando se sumaba a le ecuación una criatura que podía comunicarse con todas esas facciones separadas por la amplitud del espacio y unirlas bajo su voluntad absoluta se creaba un monstruoso ejército masivo del cual solo podían huir.

Por suerte, aprendieron de sus errores pasados, y esta vez pudieron localizarla a pocas horas de que rompiera su cascarón, podría ser eliminada mucho antes de que fuera un problema mayor. Según las estimaciones de los científicos más renombrados del Imperio, con la muerte de la emperatriz y el corté del vínculo invisible que la conectaba con su raza, los Zerg entrarían en su momento más vulnerable visto nunca. Esa era la oportunidad perfecta para eliminarlos del dominio humano se una vez por todas.

—¿Reina?

Susurró un hombre, su figura alta alcanzó al objeto que causó su extrañeza en tan sólo unos pocos pasos. Tocó la superficie fría, como si fuera a recibir respuesta de ello, su expresión cambio y alzó la pulsera en su mano derecha. El interfaz inteligente lo contactó con la mujer de inmediato.

—Lili, ¿es cierto?

La voz del hombre era gruesa por naturaleza, pero ante esa clase de situación no pudo evitar hacer un tono agudo, más que un orgulloso soldado parecía un niño perdido. La Beta era la única persona que podía contestar a sus dudas, la veracidad de la noticia. Algo tan bueno como lo que acaba de escuchar, es difícil de creer.

—Después de tanto... nosotros por fin tenemos una oportunidad.

Con la voz temblando, y a penas logrando pronunciar una oración coherente por la emoción que nacía en su pecho, confirmó lo que todos esperaban y Su Yun más temía. La raza de los Zergs, después de haber probado fuerzas con la raza humana por siglos había cometido un error. Esa pequeña brecha podía significar la victoria de la humanidad. Los pequeños asentamientos ya no tendrían que temer y los compañeros que perdieron en las décadas que sirvieron al ejército podrían ser vengados de una vez por todas.

El deseo de terminar con la guerra que duró milenios, el bien de los familiares que se encuentran lejos y el deber que los une como defensores de la humanidad; esas eran las principales razones por las cuales todos los hombres en las sala luchaban o apoyaban a su manera la batalla contra la raza invasora. Ante un rayo de esperanza tan grande justo en frente de ellos, no podían contener su felicidad. Abrazos entre hermanos de combate, lágrimas de alivio y alguno que otro grito eufórico de quien quería ir en ese mismo momento al planeta Xeon y acabar con la reina él sólo.