La charla 2

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-Hey Aelita. Que guapa estás y...

-Déjame ya, Cameron.-se quejó la chica.

-Eh, no tienes porqué ser...

Aelita volvió a la habitación y Cameron se rió, era un divertinaje para él. La charla comenzó, el director habló primero que todos.

-Kadic ofrece todas las salidas posibles y todas las optativas. Por eso hemos traído a varios exponentes de cada modalidad. Espero que todos disfrutéis y hagáis todas las preguntas que se os ocurran.

Ulrich jugaba a un juego el móvil, se llevó un codazo de parte de su compañero de habitación, él lo miró de reojo y rodó los ojos.

-¿Dónde estabas?

-Fuera.-respondió seco.

-¿No vas a contármelo?

-Odd, tengo muchísimas ganas de oír esto, así que luego.-vaciló el castaño.

-Primero que todos, me gustaría presentar a un gran empresario de éxito. Muchos lo conoceréis ya debido a que su hijo es vuestro compañero. Tengo el gran honor de presentar a Walter Stern.

-Mierda.-resopló el castaño.

El padre de Ulrich entró en una marea de aplausos y comenzó a hablar de como había montado su empresa, maquilló toda la historia. Eso hizo que Ulrich se enfadase bastante.

-Debéis ir a por todo y ser ambiciosos en esta vida. Puedo decir y diré con orgullo aunque puede que no sea muy humilde, que mi empresa me ha convertido en lo que llevaba tiempo esperando. Se puede decir que soy oficialmente millonario. Así que chicos, no escuchéis a nadie que os diga que ese no es el camino si queréis algo de verdad. Espero que el señor Delmas, vuestro preciado director que además también es un buen amigo mío le ponga a mi hijo todas las posibilidades para que tenga un mejor aprendizaje.

Casi toda la sala se giró para ver a Ulrich, sabía que en ese momento todo el mundo se acercaría a él por conveniencia. Pero él ni siquiera sabía que era millonario. Bueno, que su padre lo era, al fin y al cabo Ulrich heredaría esa empresa algún día y tendría todo su imperio. No era el mejor momento para hablar con el castaño ya que seguía bajo el efecto de la marihuana.

Entre la gente que habló, se encontraba también un médico, un abogado, un director de cine y un músico. Cuando acabó la primera parte, decidieron tomar un descanso para ir a comer. Yumi caminaba hacia la cafetería, sintió a Aelita algo pensativa, ella la miró e iba a preguntarle, pero una mano agarró su brazo con suavidad parando su cuerpo haciendo que los demás avanzasen.

-¿Qué pasa William?

-Nada, hace mucho que no hablamos. Te echaba de menos.

-Sabes que estoy muy liada, X.A.N.A. está tranquilo y nosotros de exámenes, está todo bien.

-No quiero hablar contigo de X.A.N.A., es que... Siento que en estas dos semanas... Todo ha cambiado mucho.

-¿Desde que Ulrich y yo lo dejamos? ¿Es eso lo que quieres decir?

-Bueno, se podría decir, sabes que solo tienes que decirme que te molesto para que me vaya.

-No William, no me molestas.

-Quizás deberíamos estudiar juntos, voy algo pegado en historia, tú me podrías ayudar.

-Claro.-respondió la chica.-Pero como mañana es el cumpleaños de Aelita, íbamos a hacer algo especial. Vas a venir, ¿No?

-Claro.

Los chicos volvieron a sonreír, William miraba a Yumi con ternura, ella hizo lo mismo, la chica cruzó los brazos y cogió aire sonadamente que acabó en una risilla nerviosa hasta que la mirada de William pasó a un segundo plano y sus cejas mostraron una mueca de preocupación. Ulrich estaba muy mareado, producto del cannabis, una fuerte mano se posó en su hombro y él se giró para mirar a su padre. Él mostró la sonrisa más falsa que pudo y se acercó hasta el oído de su hijo.

Código Lyoko. AFTERPARTYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora