El futuro se vistió

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Los días siguieron pasando, Yumi abrió los ojos, debía acostumbrarse ahora a decir que tenía 17 años y no 16. Miró el calendario, un día que siempre le hacía ilusión. 10 de Diciembre. Su madre llamó a la puerta y toda su familia entró.

-¡Felicidades Yumi!

Toda la familia Ihiyama se sumió en un abrazo gigante. Le dieron un par de regalos, aunque ella en Japón tenía un año más, es decir 18, pero tampoco viviría una mayoría de edad allí ya que la mayoría de edad en Japón es de 20 años. Aún así, no podía quejarse, le cayó una pulsera de plata y un móvil nuevo. Se vistió algo más guapa de lo normal, incluso se maquilló. Llegó al colegio, se sentía muy especial, a la primera persona que vio fue a Aelita saliendo de la cafetería, una sonrisa de oreja a oreja se dibujó en su cara.

-¡¡Yumi!! ¡Felicidades! 

La chica corrió hacia su amiga y de un saltó se subió encima rodeando su cuello, ella la cogió respondiendo al abrazo.

-Gracias, gracias.-dijo la japonesa riéndose mientras bajaba el cuerpo de Aelita.

-¿Que se siente al tener 17?

-Pues... Igual que con 16.

-Vaya no es muy esperanzador.

-Pues no, no es nada especial. ¿Y los demás?

-Terminando de comer, supongo que Odd saldrá el último como siempre.

-¡Yumi!

Yumi se dio la vuelta y Jeremy se acercó a ella dándole un abrazo.

-Feliz cumpleaños.

-Muchas gracias Einstein. 

-Hey Yumi.

La chica se giró. Ulrich la miró sonriendo de lado, ella también sonrió. 

-¡¡Yumi!! ¡Felicidades k-poper!

Odd se lanzó en sus brazos y le dio besos por la mejilla. Yumi sonrió hasta que alejó a Odd ya que le estaba llenando de babas.

-Venga Odd, vamos a llegar tarde.-dijo Jeremy mientras caminaba.-Luego nos vemos Yumi.

Odd siguió a la pareja, dejando a Ulrich y Yumi a solas.

-Feliz cumpleaños.-dijo Ulrich.

-Muchas gracias Ulrich.

-No podía perdonarme olvidarme de este.

-¿Lo dices cuando cumplí 15 y luego me compraste un hueso de goma?

-Sabes que ese fue Odd y bueno, el año pasado X.A.N.A. tenía atrapado a William y tampoco fue un gran cumpleaños. Estoy seguro de que este será mejor. 

-Ojalá, he pensado que podríamos hacer algo por la noche o mañana, que es viernes.

-Claro. ¿Porqué no vamos a...?

-Ulrich, nunca me dices cuando te vas y vamos a llegar tarde.

A Yumi siempre le había caído bien, pero desde que Emily repitió curso y estaba con Ulrich, la voz de la chica se le metía en el oído como el sonido de pasar un cuchillo por un plato o el chirriar de los dientes. "Ilrich ninqui mi dicis quindi ti vis y vimis i lliguir tirdi" repitió en su mente.

-Ya.-dijo Ulrich rodando los ojos.

-Ah, Yumi cariño, felicidades.

Pero la chica no le dio ni un beso ni tan siquiera un triste abrazo a Yumi, agarró a Ulrich y casi lo arrastró hasta la clase. A Yumi le hubiera gustado hablar un rato más con él. Notó unos brazos alrededor de su cuerpo y un beso en el hombro. 

Código Lyoko. AFTERPARTYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora