Jueves, 3 de agosto de 2017.
Tiro del brazo de Valentin por el pasillo que lleva a la oficina de Ian.
—Mara, podemos arreglarlo nosotros —me dice—. No pongamos de mal humor a Ian, no es necesario.
Sin golpear la puerta me adentro a la oficina. Me aseguro que no hay alguien más en el lugar antes de echarle la bronca.
—Tenemos un problema.
—Oh, Mara —pronuncia mi nombre sin ganas—. Hace días no te veo y lo primero que me dices es que tienes un problema.
—Que tu creaste.
Valentin dice mi nombre en un tono bajo, como si de esa forma cambiara de opinión y se me fueran las ganas de hacer una escena ahora mismo.
Me siento en el sofá que se encuentra a un costado del escritorio donde Ian lee un apunte de hojas. Valentin se queda de pie, frente a su mánager.
—Valentin me dijo que tengo que ir a Londres con él por un evento.
—Un evento muy importante y harán su debut como pareja.
Sonrió.
—Es una lástima que no pueda ir.
—Si puedes ir y lo harás.
—Por si no lo recuerdas, tengo otro trabajo además de fingir ser una novia enamorada de el niño más dulce en la industria.
—Estoy justo aquí —murmura Valentin.
—No puedo dejarlo ir solo —lo ignora Ian—. Hay rumores de que Lauren Hamilton estará allá.
—Ah, no —niego—. Entonces no va a ir.
Valentin deja escapar una exclamación que pasa desapercibido por nosotros.
—Tiene que ir, ya confirmamos y tiene una presentación que hacer.
—Bueno, entonces ve tú. Así lo controlas.
—¿Perdona? —pregunta Valentin, incrédulo.
Levanto una mano en su dirección y él me pone mala cara.
—Shh, estoy hablando.
Voy a retomar el discurso que planee de camino aquí. En cambio, ahora la bronca es entre Valentin y yo.
—¿Te pagan por ser insoportable?
«Oh, no. El no dijo eso.»
—En realidad es un placer hacerlo gratis, ya que no me pagan lo suficiente por fingir quererte.
No sabe que responderme, entonces mira a Ian.
—No creo que Mara pueda ser más insoportable.
—¿Me estás desafiando? —pregunto cruzándome de brazos.
Vuelve a girarse hacia mí.
—¿Enserio vas a decirme que hacer?
—Cuando se trata de la bruja esa, tengo el derecho de decirte que hacer, nene. Porque, al parecer, no piensas con la cabeza correcta cuando se trata de ella.
—Eres un encanto.
—No sé si me estás hablando a mí porque un ojo me mira, pero el otro parece desviado.
—Ja, ja. Tengo un ojo vago, muy graciosa, Mara.
Un golpe en la mesa nos deja atónitos. Los ojos fríos e indescifrables de Ian están sobre Valentin y este se pone nervioso.
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Hablando con la Luna
Teen FictionPRIMERA TEMPORADA TERMINADA Y DISPONIBLE. SEGUNDA TEMPORADA EN CURSO. Dejando de lado la creciente fama de actriz principiante, la vida de Mara Bamber se vuelve aburrida y monótona con el paso de los días. En forma de juego le pide a la luna que le...